“Viajo el miércoles 2 de septiembre a Argentina. Dirigiremos y colaboraremos en siete partidos de Copa Libertadores, Sudamericana y posiblemente alguno por las eliminatorias (sería Argentina vs. Ecuador). No está contemplado que dirijamos encuentros de la liga argentina”, cuenta Roberto Tobar sobre lo que vivirá en el país vecino, como consecuencia de los protocolos sanitarios por la pandemia.

“Cristián Garay, Christian Schiemann y Claudio Ríos van conmigo a Buenos Aires. Y a Bolivia viajan Piero Maza, Ángelo Hermosilla, Claudio Urrutia y Alejandro Molina”, detalla.

“A nivel familiar es bien compleja esta situación. Imagínate, son dos meses fuera y a mí me ha tocado estar en el exterior máximo un mes, cuando fui al Mundial de Clubes o a la Copa América, pero ahora será distinto. Tengo hijas de tres años que cuando me desaparezco me empiezan a buscar y hay que saber llevar todo eso, porque uno trabaja para estar en el más alto nivel”.

“Se les explica que uno tiene que ir a trabajar, ya entienden un poco el tema, porque me ven en la tele y ahí se quedan un poco más tranquilas”.

“Serán 14 días sin salir a ninguna parte. Vamos a estar en un hotel en piezas individuales, entrenando y preparándonos telemáticamente con charlas. Trabajaremos con distanciamiento en el gimnasio, potenciando, como corresponde, la musculatura y la velocidad”.

“A nivel arbitral la experiencia pesa, y al estar entrando y saliendo de un país a otro se corría el riesgo de perder a alguno por contagios y los jueces con recorrido internacional no son tantos. Se privilegió mantenernos en cada país para no exponernos a un contagio”.

“Sí, es una de las cosas que voy a extrañar. Son partidos motivantes, pero ahora voy a tener que estar con la camiseta de la Conmebol, me voy a tener que sacar la de la ANFP. Confío en que quien sea designado lo hará bien. Tenemos árbitros muy capacitados para dirigir ese partido. No habrá público en el clásico, eso puede potenciar el manejo de los jugadores con más experiencia y eso hay que saber manejarlo como juez”.

“Se está trabajando bastante el tema de la proyección y que los árbitros ganen experiencia de forma rápida, porque estamos en un proceso de transición hace unos años, cuando se fueron varios árbitros de mucho recorrido y ahora tienen que aparecer los árbitros jóvenes en partidos importantes”.

“Hay varios que me gustan: Carvajal, Véjar, Gamboa. Hay hartos que vienen con fuerza, entienden el juego y son muy futbolizados. Antes no era así, llegaban a esto por amigos o porque los motivaban de otra forma. Hoy los que están ligados a esta actividad son apasionados del deporte y la vocación está a flor de piel”.

“Claramente. Haber jugado, aunque sea a nivel amateur, permite conocer los diferentes estados por los que pasan los futbolistas durante un partido y facilita resolver problemas e interpretar de buena forma las reglas”.

Un fuerte remezón se vivió en la ANFP. La mesa que ahora encabeza Pablo Milad decidió el despido del jefe de los árbitros, Enrique Osses, y en su lugar quedó Jorge Osorio. “Asume el puesto de manera interina, pero se irá viendo cómo lo va haciendo”, aseguran en Quilín sobre el nuevo jefe de los jueces, quien se desempeña como profesor en el INAF y ha participado permanentemente en la implementación del VAR.

Leopoldo Iturra (gerente de comunicaciones), Luis Varas (abogado), Isabel Díaz (contralora) y Paulina Agüero (gerente de marketing), también fueron cesados.