Van ocho carreras de la Fórmula Regional Américas y el puntero del campeonato es chileno: se llama Nicolás Ambiado, nacido el 4 de noviembre de 2007 y que, como muchos otros pilotos, sueña con llegar a la Fórmula Uno.

Por lo pronto, el santiaguino se encuentra en una categoría que es parte de la “pirámide FIA”, el camino que el propio ente rector del deporte marcó para quienes deseen acceder a las grandes ligas sumando puntos para obtener la superlicencia.

Ambiado coronó un exitoso fin de semana en Indianápolis. La carrera del sábado se suspendió, mientras que en las pruebas dominicales fue cuarto y primero. “Estuvo complicado el inicio del fin de semana. De las cuatro prácticas agendadas solo pude participar en dos por problemas en el auto. Eso nos dejó complicados para la clasificación, pero pude ser tercero, a milésimas del segundo y a dos décimas del primero, eso me dio confianza para lo que vino después”, explica.

El chileno ya había ganado en Nueva Orleans, el primer fin de semana de competencia. Y ahora le tocó festejar en el mítico “Patio de Ladrillos”, no en el óvalo clásico, sino que en el trazado interno que alguna vez ocupó la F-1 y que también utiliza la Indy Car.

“Es un sueño para cualquiera ganar en esa pista, estaba súper emocionado porque nunca había podido lograrlo. Tuve ritmo y velocidad”, comenta el piloto que en la temporada pasada de la Fórmula Regional Américas fue quinto. “El objetivo este año es ser campeón, la cosa está bien pareja, los cuatro primeros estamos en menos de 10 puntos, así que es muy competitivo y desafiante. El nivel está mejor que en 2024”, analiza.

Ambiado sabe que está en una temporada decisiva para su futuro. “Las metas siempre han sido claras, pero para lograr esas metas hay que tener resultados, por eso este año es fundamental para seguir en los pasos correctos. Ganar el campeonato me abriría muchas puertas para seguir en la carrera ascendente en la que estamos”, asegura.

En 2026 el chileno deberá definir si intenta el salto a Europa con la ilusión de la Fórmula Uno, o bien se mantiene en Estados Unidos en un camino que tiene como destino la Indy Car.

¿Qué hacer? Dos históricos del automovilismo chileno coinciden en que la ruta norteamericana es la más adecuada.

“Es bueno e importante que esté ganando carreras. Si piensa en Europa o la Fórmula Uno no es el camino, sería perder plata y tiempo. El ‘road to Indy’ es un camino que vale la pena tomar, porque hay premios en dinero. Está en una buena edad para sumarse a esa opción”, analiza Pablo Donoso, quien corrió en ambos lados del Atlántico.

Para Eliseo Salazar, en tanto, “es muy meritorio lo que está haciendo Ambiado y ojalá pueda ganar este campeonato. Después, el camino a la Fórmula Uno tiene que ser ganando categorías de monoplazas en Europa, como la F-4, luego F-3 y F-2. Yo le aconsejaría que se sumara al ‘road to Indy’ para subir en los monoplazas en Estados Unidos, que corriera en la serie Indy Nxt y luego apuntara a la Indy Car. Esa es la opción más realista”.