La futura Ley sobre Transparencia de los Agentes de Mercado, aprobada este martes en el Parlamento, marca un hito en la historia bursátil de Chile. Esto, pues la legislación mandatará a las bolsas de valores a realizar su interconexión. En la práctica, esto significa que se unificarán la Bolsa de Santiago y la Bolsa Electrónica de Chile, para que las transacciones iniciadas en una de ellas pueda tener una contraparte en la otra, sin dificultades ni costos adicionales.
“En el marco de las bolsas de valores, se las obliga a configurar mecanismos de interconexión en tiempo real, con calce vinculante y automático entre distintas bolsas de valores, de manera que permitan la mejor ejecución de las órdenes de los inversionistas, incluyendo aquellas que provengan de terceras bolsas”, dice la ley a ser promulgada.
Lo anterior se traducirá en que la interconexión bursátil entra a su fase final y tiene un plazo de 10 meses, contados desde la publicación de la respectiva ley, para que la nueva norma esté completamente implementada.
El proyecto es considerado un triunfo por la Bolsa Electrónica, que ha estado promoviendo esta iniciativa desde hace años con el objetivo de “emparejar la cancha”. Su presidente, Fernando Cañas, señala que “estamos convencidos de que tiene tres grandes beneficios: mejora la competencia entre los actores, favorece la liquidez y protege a los inversionistas al garantizar la mejor ejecución de las órdenes”.
La interconexión permite emparejar la cancha y competir de verdad (...). Cada bolsa utiliza su propia infraestructura y compite, en igualdad de condiciones, para ofrecer sus mejores productos y servicios;Fernando Cañas">presidente
de Bolsa Electrónica de Chile
Lo anterior “fue un proceso muy largo y lento, que finalmente ve la luz. Recordemos que el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC), hace ya 5 años, hizo una recomendación normativa para la interconexión bursátil automática, vinculante y en tiempo real”, agregó Cañas.
Asimismo, dijo que “la interconexión permite emparejar la cancha y competir de verdad; cada bolsa utiliza su propia infraestructura y compite, en igualdad de condiciones, para ofrecer sus mejores productos y servicios. Eso le hace bien al mercado y a todos los inversionistas”, explicó .
Consultados al respecto, en la Bolsa de Santiago no quisieron referirse al tema.
La ley dará un plazo de tres meses contados desde la publicación de la ley para que las bolsas envíen la nueva reglamentación para aprobación de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), y luego 120 días corridos para la aprobación de esta.