Esta tarea es la más importante y la única que se debe considerar como tal, ya que abarca a todo el árbol. Su objetivo no es otro más que aprovechar bien la luz solar.
Carlos Honorato, ingeniero agrónomo y asesor técnico en manzanos y perales.
Árbol al que se le eliminaron
dos ramas bajas 'montadas',
una rama más alta 'montada'
y una rama alta grande.
El objetivo principal de esta poda es dejar los árboles muy bien iluminados, eliminando sólo las ramas y ramillas que impidan la iluminación; es decir, aquellas altas, muy grandes; las muy bajas; las que están en la misma dirección y que no están suficientemente separadas; y las demasiado largas hacia la entre hilera.
Además de eliminar estas ramas completas, se deben eliminar todas las ramillas colgantes que están por debajo de las ramas.
Cómo realizarla
En la parte de encima de las ramas deben estar todas las ramillas productivas, ya que ésta es la parte más iluminada de todo el árbol. Por lo mismo, la poda de esas ramillas o chupones debe ser mínima, es decir, se deben eliminar sólo los chupones demasiado grandes, que a simple vista se vean mucho más largos que el promedio de los chupones que están por encima de las ramas.
Si se eliminan todas las ramillas y/o chupones por encima de las ramas, se producirá un problema permanente, que consiste en tener las ramas con muchos chupones todos los años y con pocas ramillas productivas. Esta fue una práctica común en el pasado (años 1980 y 1990), que aún muchos practican, que genera pésimos resultados. Esto se conoce comúnmente como “espina de pescado”.
Por el contrario, al dejar más ramas nuevas por encima de las ramas, algunas se endardarán, otras se coronarán con una yema floral terminal y el resto seguirá creciendo sin producir yemas florales. Éstas últimas se deben eliminar en la poda del próximo año.
Las ramas y ramillas sombrías no sólo producirán muy poca fruta y de mala calidad, sino también causarán gran daño al árbol y a la producción, ya que son hojas que no hacen fotosíntesis, por lo que no sólo no producirán nada útil, sino que además se nutrirán de lo que producen las ramas y hojas iluminadas. En palabras simples, estas hojas son parásitas.
Cuando se empiezan a formar muchas ramillas productivas en una rama, algunas caerán encima de otras. Cuando eso suceda, se deben eliminar las más sombrías en la poda invernal.
Otra parte importante de la poda consiste en establecer una entrada de luz a lo largo del eje central, para iluminar las hojas y los frutos que están más sombríos. Para ello se debe eliminar todo lo que pueda interrumpir el paso de la luz desde la punta del eje hacia abajo. Esta labor se llama comúnmente “hacer la chimenea” y consiste en establecer una chimenea de luz. Esto es de gran ayuda para el control de algunas plagas, como las escamas y los chanchitos blancos. El diámetro de la chimenea dependerá de la edad del huerto y de la densidad de la plantación (tamaño de los árboles). En general, en huertos adultos de alta densidad, una chimenea de 40 cm de diámetro es suficiente para cumplir con los objetivos. En el caso de los huertos adultos de mediana densidad, la chimenea debe tener entre 50 y 60 cm de diámetro.
Árbol sin podar en huerto
de manzano de Curicó.
A veces algunas ramas caen encima de otras, por lo que deben ser recortadas de forma adecuada para permitir que se iluminen las ramas bajas. Esto se debe hacer sólo al recortar la rama alta, la que quedará con suficientes ramas laterales productivas, con el fin de que no emita una gran cantidad de chupones que puedan sombrear a las ramas bajas.
En general, nunca se deben recortar las ramas ni ramillas. Si se recortan las ramas grandes, éstas se desequilibrarán y se llenarán de chupones. Si se recortan las ramas débiles, se debilitarán aún más. Las excepciones a esta regla son las ramas que caen encima de otras y que tienen suficientes laterales que cuelgan; y aquellas que llegan muy cerca del suelo, y que entorpecen la aplicación de herbicidas.
Las ramas con frutas no se deben recortar ya que podrían quedar más rígidas. Esto, a su vez, ocasionaría que la fruta quedara más expuesta al golpe de sol. De hecho, antes, cuando se usaban puntales para afirmar las ramas, la fruta de encima, en su mayoría, sufría con el golpe de sol.
Es importante que en la poda de huertos adultos se mantenga una relación entre la altura final de los árboles y la distancia entre las hileras, con el fin de permitir una óptima iluminación y evitar que a ciertas horas del día una hilera sombree a otra. Mi experiencia indica que la altura óptima corresponde al 90% de la distancia entre hileras.
Otro aspecto de gran importancia en la poda es que no se deben eliminar las brindillas que están por encima de las ramas, aunque estén juntas. Esto debido a que producen la fruta en la punta y al caer quedan separadas. En general, la fruta de las brindillas coronadas es mucho mejor que la de los dardos, es decir, posee mejor calibre, color y forma, entre otras cosas, tal como lo han comprobado varios Centros de Investigación en Francia y nosotros acá en diversos huertos de Chile.
Afortunadamente, las variedades más plantadas en Chile —como Pink Lady, Fuji y Granny Smith— producen un gran porcentaje de la fruta en brindillas coronadas. Otras, como el grupo Galas, pueden formar fácilmente una gran cantidad de brindillas coronadas al hacer extinción de dardos. Esta labor, que se debe realizar en septiembre, consiste en eliminar alrededor del 50% del exceso de dardos presentes en las ramas, dejándolos más separados. Para ello se deben eliminar los que están por debajo de las ramas. Esta no es una labor costosa ni difícil y se justifica plenamente, ya que permitirá el mejoramiento de la producción (cantidad y calidad) y la calidad y rapidez del raleo manual de frutos.
Árbol sin podar, pero al que
se le eliminó una rama baja 'montada'
y dos ramas altas grandes.
Evitar los errores comunes
Los errores más comunes de la poda en los manzanos adultos son los siguientes:
a) Creer que mientras más ramas tengan los árboles más van a producir. Esto es un gran error ya que cuando existan muchas ramas la cantidad de hojas sombrías será mucho mayor y la cantidad de hojas iluminadas menor. Por lo tanto, la cantidad y calidad de las yemas florales y de la polinización será peor. Así también, el aborto de frutos recién cuajado será mayor.
b) Dejar ramas muy bajas y sombrías, pensando que habrá fruta más fácil de cosechar, es otro gran error, ya que estas ramas producen poca fruta y de mala calidad (pequeña y con poco color).
c) Podar excesivamente por encima de las ramas es un error, ya que esa labor es totalmente contraria a la productividad del árbol y buena calidad de la fruta
d) Dejar un exceso de ramas sobre la hilera es nefasto, ya que esa parte es la más difícil de iluminar de forma adecuada
La poda invernal es la poda más importante y es la única que se debe considerar como tal, ya que abarca a todo el árbol. En primavera-verano se pueden repasar las chimeneas, y eliminar los brotes nuevos en esa parte del árbol, recortando las ramas bajas. Esto permitirá aplicar herbicidas y eliminar chupones exageradamente vigorosos (sólo, si hay demasiados). Sólo se debe hacer una poda mayor en primavera-verano si se realiza una mala poda en invierno
Por lo mismo, es importante que los podadores conozcan a la perfección las tareas más importantes que involucran esta labor:
Huerto de manzanos de
Agroindustrial Jaime Soler,
variedad Gala Brookfield
sobre patrón EM-9 Pajam 2,
cuarta hoja.
La mayoría de los productores realizan la poda pagando un “trato” por árbol, lo cual funciona muy bien cuando existe un control adecuado de la calidad del trabajo
Es muy importante que la gente que vaya a podar tenga serruchos, tijeras y escaleras de la mejor calidad, ya que así su rendimiento será óptimo.
Hasta ahora las máquinas podadoras neumáticas no han resultado muy útiles, debido a que requieren la presencia de varios podadores, lo que a la larga genera poca eficiencia. Además, algunos podadores no realizan los cortes de ramas de forma adecuada, por lo que en primavera salen muchos chupones.
En definitiva, es importante tener en cuenta que la poda persigue aprovechar bien lo único que es gratis en la producción de manzanas: la luz solar.