Panorama actual y desafíos del sector
Los primeros meses del año no fueron los mejores para el sector. Sin embargo, los expertos aseguran que las perspectivas a futuro son buenas, por lo que el desarrollo del negocio dependerá, en gran medida, de que la industria modernice sus procesos y se organice.
Ximena Fernández S.
Este 2013 no ha sido del todo bueno para la industria productora de carne bovina, desde el punto de vista de los precios, los cuales han mostrado una baja respecto del año pasado. Los novillos gordos, por ejemplo, registraron una caída de 7,3% en su precio durante el periodo enero-mayo, respecto del mismo periodo de 2012, llegando a $994 el kilo (sin IVA). Esta disminución ha estado forzada por el aumento de la oferta interna y el crecimiento de las importaciones durante los primeros cinco meses del año, cuyo volumen creció en 18,2%, alcanzando las 57.147 toneladas.
No obstante, según los expertos, todas las señales apuntan a que esta situación se revertirá durante los próximos meses debido a una estabilización de la oferta, lo que hará que los precios se recuperen.
La producción de carne bovina, en tanto, creció un 2,6% (enero-abril) debido al aumento del beneficio (1.3%) durante el primer cuatrimestre del año (mayor faena de novillos) y al aumento del peso promedio de las canales al ser faenadas (3.9 kilos más). “La fuerte retención de hembras observada en 2009 y 2010 debería traducirse en una mayor oferta de novillos en los próximos años”, dice Claus Köbrich, director del Departamento de Fomento de la Producción Animal de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias de la Universidad de Chile.
En efecto, la cantidad de novillos faenados entre enero y abril de este año aumentó en un 6.1% respecto del mismo periodo del año anterior.
Pasado, presente y futuro
Atrás quedaron los años como el 2008, cuando el beneficio total superaba el millón de cabezas y la producción de carne en vara se situaba en 240 mil toneladas. En los tres años siguientes —2009, 2010 y 2011— el beneficio disminuyó en 10% promedio, alcanzando el nivel más bajo en 2011. Sin embargo, a partir de este momento, la producción se mantuvo estable, llegando a las 200 mil toneladas promedio.
Hoy, el principal problema del sector es la baja masa ganadera, la que se mueve entre 3 y 3.3 millones de cabezas. “Antes de 2010 la situación era muy crítica en este aspecto. Sin embargo, el alza de precio hizo que que la masa ganadera dejara de caer y aumentara la retención de vientres. El problema es que esto no alcanzó para recuperar ese millón de cabezas que perdimos hace unos años”, comenta Christian Arntz, presidente de Fedecarne.
El dirigente gremial asegura que nuestro país posee un potencial de crecimiento que perfectamente le permitiría llegar a 6 u 8 millones de cabezas durante los próximos años. Lograrlo dependerá del trabajo que tanto el sector privado como el Estado puedan realizar para mejorar los procesos productivos y establecer políticas claras sobre fomento y apoyo al dinamismo del sector.
En ese sentido, los desafíos a futuro del sector aparecen claros: aprovechar las oportunidades venideras, aumentar la competitividad de la industria, trabajar con mayor eficiencia, elevar la productividad y propiciar la sustentabilidad de sus procesos y la innovación. Para ello, los especialistas recomiendan implementar nuevas herramientas de gestión predial, como la optimización de la alimentación, el uso de la tecnología en genética y la capacitación de la mano de obra (ver reportajes del especial).
“En materia de mejoramiento genético, alimentación y gestión hay mucho espacio para mejorar”, comenta Mario Maino, docente de la de Universidad de Chile.
En cuanto a gestión, una alternativa es llevar registros productivos, como la ganancia de peso diario y un manejo detallado de las variables financieras para ver dónde se pueden disminuir los costos, ya que la restringida masa ganadera hace que los costos fijos del sector sean muy altos.
En términos de alimentación, a menudo la ganadería de carne en Chile tiende a utilizar un pastoreo extensivo. No obstante, a juicio de Arntz los productores deberían apuntar a un sistema mucho más intensivo como el lechero, que ha demostrado ser muy efectivo y rentable. Por ejemplo, en las praderas utilizadas para el ganado de carne —donde no existen cercos eléctricos— la eficiencia en el uso de pradera es de 35%-40%, mientras que en las que se usan para ganado de leche —donde existen cercos eléctricos— ésta se mueve entre 70% y 75%.
Otras tareas pendientes
Otro factor determinante a la hora de implementar nuevas herramientas y manejos en la producción de carne, es la falencia del proceso de transferencia tecnológica desde la academia a los productores. “Estamos utilizando, con la gran mayoría del sector, sistemas extraordinariamente simples, antiguos y con poca variabilidad tecnológica. Nadie investiga la manera correcta de instruir a los productores, por lo que el proceso es muy poco eficiente”, explica Maino.
Los expertos concuerdan en que el sector ganadero de carne puede hacer la misma transición que hizo el rubro lechero, es decir, aumentar la producción, reemplazar la carne importada y acumular saldos exportables. “Nuestra rentabilidad no es la más alta del mundo, en promedio, porque la mayoría de los productores no es eficiente. El potencial que tiene nuestro suelo para tener ganadería da para tener 6 millones de cabezas, lo que supliría la demanda interna, e incluso 8 millones, con lo que tendríamos un margen exportable”, agrega Arntz.
El factor clave
A partir del incremento de los ingresos de los chilenos, la demanda interna siguió la tendencia alcista mundial, aumentando en 2.8% anual por habitante, en el periodo 2011-2012. Pese a esto, el sector no tuvo una capacidad de respuesta acorde, por lo que se debieron importar cerca de 5.000 toneladas más de carne respecto del año anterior.
La dificultad de los ganaderos para enfrentar este escenario puede explicarse, según Mario Maino, por la falta de una estrategia de desarrollo sectorial. Para el experto el primer paso hacia la evolución de la industria es la organización y agrupación de todos los actores involucrados. “Sin una institucionalidad que haga mirar a todos en conjunto hacia dónde ir y que permita recoger parte de los proyectos que el Estado pudiera querer facilitar al sector, veo complicado que la industria se desarrolle”, dice.
Ejemplos como el Consorcio Lechero y Ovino, en nuestro país, y el Instituto Nacional de la Carne, en Uruguay, aparecen como casos exitosos en los que se congrega a todos los actores de un sector en pos de establecer un proyecto de desarrollo que los beneficie a todos.
Trazabilidad, una tarea pendiente
Chile ha mejorado de forma notable la calidad de su carne. De hecho, en la actualidad, existe un volumen de elite, que no tendría ningún problema para competir en cualquier mercado del mundo.
No obstante, este producto tiene una alta probabilidad de no ser considerado como Premium por los consumidores extranjeros, debido a que no existe ningún mecanismo que les asegure la calidad de lo que están consumiendo.
De hecho, las fallas en el sistema de aseguramiento de calidad fue lo que ocasionó que se suspendieran las exportaciones chilenas de carne bovina a la Unión Europea, principal destino de nuestras exportaciones. “El problema de trazabilidad nos hizo perder un mercado, lo que repercutió en una baja de precios. Y si los precios bajan, el sector se estanca y decrece”, explica Arntz.
Por esta razón, es imperante que el sector actúe y oriente sus esfuerzos a garantizar la calidad de su producto. “Deberíamos ser más proactivos en construir certezas sobre la calidad que estamos ofreciendo para los consumidores que quieren comer carne chilena”, enfatiza Maino.
Beneficio total de ganado bovino |
Año |
2007 |
2008 |
2009 |
2010 |
2011 |
2012 |
Beneficio (cabezas) |
967.979 |
1.004.773 |
867.220 |
819.372 |
724.930 |
762.129 |
Fuente: INE
Beneficio de ganado bovino por categoría |
Año |
Novillos |
Vacas |
Bueyes |
Toros y torunos |
Vaquillas |
Terneros(as) |
2007 |
497.396 |
235.589 |
20.816 |
21.560 |
178.919 |
13.699 |
2008 |
475.412 |
275.894 |
22.726 |
23.248 |
187.676 |
19.817 |
2009 |
407.884 |
240.168 |
15.448 |
20.314 |
169.757 |
13.649 |
2010 |
404.973 |
208.237 |
25.788 |
22.985 |
148.948 |
8.443 |
2011 |
381.914 |
174.397 |
19.728 |
21.640 |
121.055 |
6.096 |
2012 |
409.523 |
182.283 |
15.279 |
24.221 |
122.779 |
8.044 |
Fuente: INE
Producción de carne en vara de ganado bovino |
Año |
2007 |
2008 |
2009 |
2010 |
2011 |
2012 |
Carne en vara (ton) |
241.677 |
240.257 |
209.853 |
210.745 |
190.979 |
197.571 |
Fuente: INE
Precio real de carne bovina según nivel de comercialización ($/Kg. sin I.V.A) |
Año |
2007 |
2008 |
2009 |
2010 |
2011 |
2012 |
A productor (novillo) |
740 |
790 |
728 |
899 |
1.004 |
962 |
Por mayor carne en vara categoría V |
1.523 |
1.764 |
1.783 |
2.018 |
2.288 |
2.349 |
Fuente: INE
Existencias ganado bovino por región según Censo Agropecuario 1997 - 2007 |
Región |
1997 (miles de cabezas) |
2007 (miles de cabezas) |
Arica y Parinacota |
4 |
2 |
Tarapacá |
1 |
0 |
Antofagasta |
1 |
0 |
Atacama |
7 |
7 |
Coquimbo |
39 |
41 |
Valparaíso |
132 |
108 |
Metropolitana |
164 |
108 |
O'Higgins |
156 |
89 |
Maule |
368 |
266 |
Biobío |
550 |
459 |
La Araucanía |
784 |
678 |
Los Ríos |
599 |
629 |
Los Lagos |
1.003 |
1.058 |
Aysén |
169 |
199 |
Magallanes y Antártica |
138 |
144 |
Total |
138 |
144 |
Fuente: INE
Consumo unitario aparente de carne bovina |
Año |
2007 |
2008 |
2009 |
2010 |
2011 |
2012 |
Consumo (Kg./Hab.) |
23,5 |
22 |
22,4 |
23,6 |
21,8 |
22,4 |
Fuente: INE
Ganado bovino rematado en ferias |
Año |
2007 |
2008 |
2009 |
2010 |
2011 |
2012 |
Cabezas rematadas |
1.099.935 |
1.097.248 |
953.286 |
933.743 |
915.551 |
921.452 |
Por mayor carne en vara categoría V |
1.523 |
1.764 |
1.783 |
2.018 |
2.288 |
2.349 |
Fuente: INE