Tänak apuesta y gana en el Biobío, mientras Heller vive una pesadilla
El estonio acertó en la elección de neumáticos y amplió su ventaja en el liderato de la competencia, en una jornada en que varios sufrieron con el desgaste de sus ruedas. El chileno, en tanto, rompió el tren delantero de su auto tras chocar con una roca y abandonó.
Justo al lado del centro de operaciones que el rally tiene instalado en el Biobío hay un casino que no ha dejado de funcionar en ningún momento.
Este sábado, los equipos que participan en la 11ª fecha del Mundial hicieron sus propias apuestas. Claro que no en el casino, sino que a la hora de elegir los neumáticos que colocarían en sus autos para los tramos de Chivilingo, Río Lia y María Las Cruces, que recorrieron dos veces.
¿Análisis? ¿Estrategia? “Adivinamos. En algún sentido tuvimos suerte. Revisamos los datos, elegimos y acertamos. La degradación fue como la esperábamos, no así para los demás”, resumió Ott Tänak (M-Sport Ford), que en el tramo matinal calzó compuestos duros en su auto, decisión que le permitió aumentar su ventaja en la cima de la tabla, la que conservó en el trazado vespertino.
¿Los perdedores del día? Toyota, equipo que arrancó la jornada con gomas blandas en sus máquinas y lo pagó caro. Elfyn Evans y Takamoto Katsuta terminaron la primera parte de la jornada con las ruedas destrozadas y Kalle Rovanperä tuvo que conducir a un ritmo muy menor para no sufrir lo mismo que sus compañeros.
El finlandés cumple 23 años este domingo y no lo celebrará como bicampeón del mundo. Apenas es quinto en la general y para coronarse necesita ganar la prueba, imponerse en la powerstage que cierra la competencia a las 13:15 horas y que Evans (que va cuarto) tenga problemas y sea octavo o peor. Casi imposible. “Correré pensando en asegurar los puntos”, dice. Evans apuesta por más: “Atacaremos para quitarle el tercer puesto a Thierry Neuville, estamos solo a 10 segundos”, asegura.
El que no sabe de inconvenientes en Chile es Tänak. Ha ganado siete de los 12 tramos disputados y lidera con 58,3 segundos sobre Teemu Suninen (Hyundai). Salvo un desastre, el estonio repetirá el triunfo de 2019, entonces con Toyota y ahora con el equipo M-Sport Ford. “Fue un día extremadamente bueno. Hemos hecho un gran trabajo hasta el momento, pero todavía queda el domingo”, manifestó, consciente de que, por lo visto en las dos primeras jornadas, nada se puede dar por sentado en el Rally de Chile.
EL DRAMA DE HELLER
Y si alguien puede dar fe de eso es Alberto Heller, quien siguió en su estrategia conservadora, pero eso no lo eximió de problemas. En el último tramo del día le pegó a una roca y la dirección de su auto quedó torcida. Cruzó la meta y llegó al parque de asistencia, pero antes de entrar a la zona de control de tiempos se rompió un brazo de la suspensión.
Por reglamento, solo la tripulación puede reparar el auto en ese sector. El piloto y su navegante, Luis Allende, hicieron todos los esfuerzos ante la preocupada mirada de Carlos Heller (padre del conductor) y la ayuda de Ott Tänak, quien llamó por teléfono a un mecánico del equipo para orientar el trabajo del chileno. También arribó Richard Millener, jefe de M-Sport Ford.

Los desesperados intentos de Heller y su copiloto, Luis Allende, resultaron infructuosos. Foto: Alejandro Cisternas
Pero nada resultó. Pasó la media hora de tolerancia para ingresar con retraso al parque de asistencia y un oficial de la carrera vino a quitarle la tarjeta de control a Allende. Abandono oficial. “Son cosas que pasan, tratamos de dar lo mejor. Abrí la ruta y fue difícil, tuvimos varios trompos, pero también hice algunos tiempos buenos. El potencial está, pero cuesta mantener el ritmo en el rally. Agradezco al equipo por la oportunidad y la ayuda. Hasta Tänak, que no habla mucho, vino a conversarme y apoyar harto rato”, valoró.
LA TRASTIENDA DEL BIOBÍO
Lyon, delicado: Tras su accidente y hospitalización del viernes, el estado de salud de Germán Lyon (51 años) sigue siendo materia de preocupación entre los integrantes de la caravana del rally. La última información oficial indica que su situación es “muy grave, pero fuera de riesgo vital”.
La revancha de Neuville: Cuatro años después, el belga Thierry Neuville volvió a recorrer el tramo de María Las Cruces, donde en 2019 se volcó y abandonó. Ahora, tal como había prometido, cruzó a fondo el sector. Y sin problemas. Con orgullo, compartió videos del momento en sus redes sociales. “Aceleré con todo y resultó bien. Estuvo divertido”, celebró.
El orgullo de Rosselot: Emilio Rosselot se quedó con el honor de ser el mejor chileno en la clase WRC 2: va octavo en la general de la categoría y además obtuvo el triunfo en la carrera válida para el Rally Mobil. “Es la carrera más importante de mi vida y el resultado soñado. Ver los tiempos y darme cuenta de que en algunos tramos les gané a los finlandeses fue increíble”, dijo.
Super Mario Kart: En el último tramo del día, Gregoire Munster (M-Sport Ford) sufrió dos pinchazos, detuvo su marcha y retomó. De rebote, el afectado fue Kalle Rovanperä (Toyota), pues tuvo que conducir obstaculizado 18 kilómetros por la estela de polvo que dejaba su rival. “Fue como jugar el Super Mario Kart, cuando alguien te tira plátanos o bombas”, comentó con humor el líder de la temporada, a quien los comisarios le devolvieron el tiempo que perdió.

Alejandro Cisternas
es coordinador periodístico de Deportes El Mercurio. Periodista titulado en la PUC, ha cubierto eventos nacionales e internacionales de fútbol, automovilismo, golf, básquetbol, tenis y otras disciplinas.