Joaquín Niemann lo dio todo, como reza el cliché. Pero no bastó.

La última ronda del LIV Golf en Chicago obligaba al chileno a salir agresivamente para descontarle los tres golpes que lo alejaban de Jon Rahm en la lucha por el título individual del circuito. Lo hizo: estuvo más fino en los greens, algo más certero en sus tiros... Pero el español también.

Al final, fue el nacido en Barrika quien se llevó todo del Bolingbrook Golf Club: la victoria en la última fecha del LIV Golf, el título del circuito, los US$ 18 millones de bonos y el codiciado anillo de oro de 14 quilates y piedras preciosas.

¿Y a quién le ganó ese “todo”? A Niemann... entre otros.

Recién en el 17, Rahm metió un birdie que le permitió soltarse. Confirmó, con ese tiro, el título y el estratosférico premio como el mejor del año. “No era muy difícil vigilar a Joaquín, porque estaba justo ahí arriba en la clasificación. No siempre miraba directamente, pero cada vez que veía la tabla me daba cuenta de que su nombre estaba ahí, entre muchos otros. Me alegro de que una vez que tomé esa ventaja de dos tiros en el 3, nunca se acercó”, relató el campeón.

A Niemann le queda el consuelo de ser el segundo mejor de la temporada y cerrar una campaña millonaria: casi 17 millones de dólares en premios por los 13 eventos del LIV Golf y otros 10 más por ser subcampeón.

Un resultado que dejó satisfecho al nacional. "Estoy bastante contento. Le dije a mi caddie que no siento ninguna decepción. Siento que di todo lo que tenía. No sentí como si hubiera regalado un tiro en toda la temporada. Eso para mí es una victoria", evaluó Niemann.

“Sentí que Niemann jugó mucho mejor que el sábado: apuntó más fairways, más greens, estuvo muy sólido. Tuvo chances que estuvieron muy cerca, tiros que incluso pegaron en la bandera. Creo que, en resumen, jugó muy bien, Jon le ganó en la última recta. Tuvo una increíble temporada”, resumió el golfista y comentarista de Zapping, Mark Tullo.

También lo alabó Paz Echeverría: “Fue una tremenda temporada para él. Jugó muy sólido contra jugadores de altísimo nivel. Sin duda, debiera tener su oportunidad de jugar los majors del próximo año porque demostró estar dentro de los mejores de 2024”, comentó la exintegrante del LPGA Tour.

Ahora es momento de plantear el 2025. Niemann ya tenía asegurada su presencia en el LIV para el próximo año como uno de los mejores 24 jugadores, pero el cuestionamiento es sobre los majors: ¿podrá jugarlos?

Este año, Niemann entró a tres de los cuatro grandes del golf a través de invitaciones (solo el US Open no le extendió una wild card), por lo que puede optar al mismo camino en 2025 o ir a circuitos que entreguen puntos al ranking mundial, donde “Joaco” es actualmente 110°, como el Asian Tour, que permite el ingreso de jugadores del LIV, o el DP World Tour europeo.

Fue en el mencionado circuito del Viejo Continente donde consiguió un triunfo clave, el Abierto de Australia de diciembre pasado. Dicho torneo no solo le permitió sostenerse en el escalafón mundial, sino que le ayudó a cimentar su clasificación a París 2024 y, lo mejor, le ayudó a que la organización del Masters le entregara la invitación a jugar en Augusta National, además de confirmar su presencia en el British.

La otra opción es más complicada: que el LIV entre al ranking mundial, pero es algo que se ve lejano, después de que la organización del circuito cortara sus intentos en marzo. O, en otro escenario, que el LIV y el PGA Tour se abuenen, lo que tampoco parece cercano. De hecho, los primeros cuatro eventos confirmados del LIV en 2025 coinciden con cuatro torneos de relevancia en el PGA Tour, como el Genesis Invitational o el Players Championship.

El chileno puede, quizá, seguir el camino que trazará el propio Rahm, que anunció que jugará algunos eventos en el DP World Tour para no perder su membresía de la Copa Ryder.

En tanto, Guillermo Pereira terminó 47°, lo que le permitió mantenerse en el circuito.