Apenas terminó el partido ante Paraguay, en una noche sin luces y poco juego, las 20 mil almas que llegaron al Monumental se unieron en una sola voz: “Berizzo ya se va, ya se va, Berizzo ya se va…”.

La reacción de la gente golpeó al entrenador. Y bien duro. Le llegó al alma. Caminaba al vestuario con el rostro desencajado y la decisión tomada. “Ya está”, decían sus labios, poco antes de abrazar a Daniel Garnero, su colega guaraní.

Demoró más de la cuenta en aparecer por la sala de prensa.

Y lo hizo una hora después de los dolorosos cánticos.

Exactamente a las 00:30 horas de este viernes 17 de noviembre, el “Toto” tomó asiento.

Y, de corrido, señaló: “He hablado recién con el presidente de la federación (Pablo Milad) y le manifesté mi deseo de dejar el cargo. Los resultados no han sido los esperados y es digno reconocer cuando las cosas no funcionan. Quise agradecer a la gente que trabajó conmigo, a la gente de Pinto Durán, a los cancheros, a los jugadores que se comprometieron en este proceso. Las chances de clasificar existen, están intactas, ojalá el clima ayude y se descomprima para que Chile pueda clasificar a un nuevo Mundial. Ha sido un honor dirigir a la selección chilena. Quiero agradecer a todas las personas que trabajaron en pos de la selección… Buenas noches y gracias”.

A cuatro días de visitar a Ecuador, la Roja no tiene entrenador. Ningún guionista hubiese imaginado un desenlace más maquiavélico para la quinta fecha eliminatoria. No está claro quién dirigirá en Quito, aunque se supone, por una cuestión de tiempo, que Nicolás Córdova, jefe técnico de las selecciones menores, será el elegido.

Ricardo Gareca es el candidato número uno para desarrollar un plan a largo plazo. Gustavo Quinteros, actualmente en Colo Colo, es otro de los nombres que baraja la dirigencia. Hay un problema serio, sí: en las arcas de la ANFP no sobra el dinero y cualquier decisión debe ser analizada y tomada considerando innumerables aristas.

Eran las preguntas lógicas que debía responder Pablo Milad, presidente de la ANFP y también de la Federación de Fútbol, pero el directivo pasó por la zona mixta y evitó el diálogo con la prensa.

Mientras el futuro de la Roja toma forma y logra rearmarse después de dos mazazos consecutivos —la igualdad con Paraguay que deja al equipo fuera de la zona mundialista y la partida de su entrenador—, en el plantel hubo voces de dolor.

El primero en hablar fue Alexis Sánchez: “Triste, con pena, porque estábamos trabajando bien; también es responsabilidad de los jugadores, en estar más concentrados. Tenemos la pelota siempre, pasa que no entra el gol. A Berizzo quiero agradecerle, porque trabajó siempre serio, me encantó como entrenador”, declaró.

Cuando al tocopillano le consultaron si el DT le había comunicado la noticia a todo el grupo, contestó: “Yo estaba en la ducha, no sé… No hablamos en grupo, algunos estaban en el doping. Llegando a Pinto Durán lo hablaremos. Berizzo rescató jugadores jóvenes, trabajó profesionalmente”.

Más categórico fue el capitán Gary Medel: “Es un momento súper difícil. Es una pérdida grande, porque trabaja de buena forma, sacó un par de jugadores nuevos. Intentamos convencerlo de que no se fuera, pero no es soportable por la manera en que en lo tratan. Se está creando un ambiente feo. Cómo lo tratan, cuando hizo un proceso de recambio, que era lo que todos querían, pero había que esperar un poquito, no es de un día a otro. No lo dejaron trabajar tranquilo, por eso se cansó”.

El “Pitbull” sumó más lamentos: “Faltó apoyo de la dirigencia, de la gente. Hace tiempo que no se vivía un ambiente así. Berizzo reformuló Pinto Durán con plata de su bolsillo… La gente lee lo que dicen ustedes, los periodistas, nadie se hace cargo. Ustedes (los periodistas) también tienen que apoyar… Ante Paraguay atacamos todo el partido, no tuvimos situaciones muy claras, lo mismo nos pasó con Colombia. No tenemos gol, nos falta hambre de gol, nos falta calma. El cuerpo técnico se sentía súper triste por la situación. No es agradable trabajar así, es un gran técnico y mejor persona, no hay nada que decir. ¿Si es un error su partida? Espero que no, que sea un cambio positivo. Hay que pensar positivo, que la gente apoye al nuevo técnico, que lo trate bien y respete el proceso”.