Gustavo Huerta afrontará en el campeonato 2021 su quinta temporada en línea como DT de Cobresal, un caso anómalo para el fútbol chileno y mundial. Es, con 63 años, el DT más experimentado de la división de honor y viene de completar una temporada sobresaliente con los mineros: clasificaron a la Copa Sudamericana 2020 y mostraron una pléyade de figuras que ya han engrosado las arcas del club atacameño en la apertura del mercado chileno.

Con el torneo finalizado, el entrenador (y otrora jugador albinaranja) realiza su propio balance de la temporada que termina, con una aguda crítica por las decisiones directivas en contra de los DT, ejemplificando con la "inexplicable" salida de Ronald Fuentes de la Unión.

“Atípico y extraño. Estuvimos 14 meses metidos tanto en los entrenamientos y después en el campeonato, con partidos tan seguidos. Al final, el resultado fue satisfactorio para Cobresal, clasificar a una copa es muy bueno y un logro, de acuerdo a las condiciones que hubo. Estoy muy contento por todo lo que se hizo, fundamentalmente por los jugadores, quienes armaron un buen grupo”.

“Es que fundamentalmente esto pasa por todo. En pandemia, mientras muchos clubes tuvieron que rebajar los sueldos e incluso hasta llevarlos al seguro de cesantía, Cobresal en ningún momento planteó nada negativo al plantel. Ellos tuvieron un gran respaldo y después viene la vuelta de mano de eso. Si bien nunca estuvimos en zona roja y tranquilidad en la tabla ponderada, en algún momento nos vimos afligidos, pero la interna y la comunión entre todos creó un grupo muy fuerte que sabía que iba a terminar arriba el campeonato”.

“Por los años ligado a Cobresal, como jugador primero y como entrenador después. Habitualmente me ha ido bien. No se puede negar que hay detractores cuando se producen un par de partidos malos, como en todos lados. Pero la directiva central es la que ordena, está con nosotros y nos da el respaldo. Llegué en 2017, cuando Cobresal vivía el peor momento de su historia, a punto de descender de la B y todos hablaban de la desaparición del club, porque era económicamente imposible financiarlo. Había presión de ganar varios partidos para salvarnos y los ganamos. Luego planteamos los objetivos: subir en 2018 y lo hicimos, mantenernos en 2019 y ahora fuimos por todo, clasificar a la copa y también lo logramos. Por eso hay credibilidad por parte de la dirigencia hacia nuestro trabajo”.

“Es cada vez más difícil ser entrenador. La locura de la gente que no tiene claro sus objetivos respecto del manejo de los clubes. Es imposible que todos los equipos participantes ganen domingo a domingo. en ese sentido, la más dolorosa y la que me provoca más críticas personales hacia una institución fue lo de Unión Española con Ronald Fuentes”.

“Como técnicos dependemos de los resultados y también de los jugadores. Entonces, cuando sacan tres, cuatro o cinco jugadores importantes de un equipo y después el técnico tiene que responder igual a la exigencia de antes se hace muy complicado. No sé qué influye ahí, si intereses económicos, los representantes, dejar tranquilo al hincha que está en redes sociales descalificando todo… Hay que adaptarse. Yo tampoco quedo afuera de esas críticas. Me pasó con Ever Cantero. Sabían claramente los dirigentes por qué se estaba prescindiendo de él. La hinchada presionó y, afortunadamente, la dirigencia creyó en mi postura. Esa presión, por ejemplo, hay gente que la soporta y otra que no”.

“La idea fundamental es mantener el máximo de jugadores del plantel de la campaña pasada y reforzar lo que nos puede faltar, como los jugadores que nombra. Hay que tratar de apuntarle con los jugadores que llegan. Ese es un desafío no solo para los dirigentes, sino que también para nosotros como cuerpo técnico, para respaldar la confianza con buenos resultados”.

“Hay varios argumentos positivos y también hay algunos con los que tenemos que lidiar. No todos optan por venir a un lugar en pleno desierto, con poca gente. Pero el lado positivo es la convivencia familiar, que es espectacular, en infraestructura no tenemos que envidiarle nada a nadie, tenemos de todo en nuestras instalaciones… Todo está para hacerle la vida lo más agradable posible al jugador y a su familia. Si un jugador asume un lado familiar, le dará gusto estar aquí. Incluso, y lo he hablado con algunos, no tienen dónde gastar la plata y eso es positivo porque el club entrega todo: no hay que pagar arriendo, gastos comunes, cuentas, las casas son muy cómodas. La convivencia diaria es fundamental, buscamos siempre armar un buen grupo”.

“Se está buscando en base a las características que tenemos. Por ejemplo, nosotros jugamos con tres delanteros por fuera, rápidos, y un centrodelantero de área, un enganche que arme jugadas. Ellos son los jugadores que se nos están yendo y estamos en esa búsqueda. Varios han llegado acá, han retomado su carrera y se han ido a otros clubes económicamente mejores, relanzando sus carreras. Si el jugador es inteligente y aprovecha la oportunidad, ganamos todos”.