En esta historia hay dos hombres clave que guardan absoluto e inquebrantable silencio público desde que salieran a la luz los audios de Francisco Gilabert comentando su actuación en el partido entre Huachipato y Copiapó por la promoción.

Uno es Francisco Gilabert, juez central que cobró penal para los “acereros”, y el otro es Mario Vargas, quality manager (QM) del VAR que pronunció, según relata Cristián Droguett, el juez VAR de ese partido, la ya famosa frase “para Santiago es penal”.

Pese a la insistencia de este diario, ambos rehúsan explicar claramente qué ocurrió ese día, dadas las incongruencias entre lo relatado por Gilabert en audios publicados por radio ADN y lo que se escucha en el video oficial del VAR en el momento mismo en que se dirimió la pena máxima en el partido disputado en Talcahuano.

El único que ha comentado los hechos es Cristián Droguett, el juez VAR que llamó a Gilabert para que revisara en el monitor su cobro original.

Consultado el miércoles por “El Mercurio” sobre quién le dijo “para Santiago es penal”, Droguett afirma: “El que me transmite esa información es el QM. Ahora, ¿quién de la comisión de árbitros llamó a Mario Vargas para presionar? No tengo certeza. No tengo evidencia para saber quién presionó a Mario Vargas para que me dijera que para Santiago era penal”.

En cuanto a lo qué exactamente le dijo Vargas, abundó: “(Me dijo) dos cosas, todo a través del auricular. Primero: ‘Acuérdate del penal de la Católica’. Y segundo: ‘Para Santiago es penal’”.

Este jueves, con la comisión arbitral descabezada, con Javier Castrilli despedido, con el paro levantado por el reintegro de los 14 jueces exonerados por el “Juez de Hierro” y con la fecha del fútbol programada, Droguett responde de nuevo.

“Desconozco a qué jugada se refiere, él tendría que decirlo”.

“No, no me dijo eso, me dice tal cual como le mencioné a usted: ‘Para Santiago es penal’”.

“No. Eso solo él lo sabe”.

“Eso es lo que hay que esclarecer”.

Mario Vargas, pese a los múltiples intentos, rehusó hacer comentarios.

La primera pieza del rompecabezas ocurre en el minuto 69 del partido entre Huachipato y Copiapó: Gilabert pita penal para el local en la misma cancha. El duelo estaba 0-0 y los “acereros” de todos modos estaban salvando la categoría, pues habían ganado 3-2 en la ida.

Pero enseguida lo llaman desde el VAR para corregirlo, momento desde el cual todo lo que hablaron quedó grabado.

Frente al monitor en la cancha está Gilabert y en la cabina de videroarbitraje, Cristián Droguett y Loreto Toloza, asistente del VAR. En el mismo espacio, pero separado por un cubículo, el quality manager, Mario Vargas, quien tiene comunicación vía micrófono y auricular con Droguett.

En primera instancia, Droguett y Toloza creen que no es penal: por eso llaman a Gilabert. Ambos argumentan que el defensor copiapino toca primero la pelota (“En el momento que va a la disputa, claramente juega el balón el defensor número 15”, se oye a Droguett) y que “por acción de juego”, el nortino no tiene cómo evitar el roce al delantero Walter Mazzantti.

Gilabert entonces pide más imágenes, ángulos y repeticiones, segundos en los que Toloza le dice a Droguett: “Hay un momento en la camiseta, que lo evalúe igual”, a lo que el juez VAR le pide a Gilabert: “Evalúa también arriba el tema de la camiseta, el forcejeo”. Y el réferi responde enseguida: “Ambos, poh, yo veo penal arriba y abajo”.

Acto seguido, Gilabert confirma su decisión original pitada minutos antes en la cancha, es decir, penal.

Esa es la primera versión de Gilabert, la que ocurrió el día mismo del partido.

Pero esta semana, la radio ADN reveló otra cosa distinta, relatada por Gilabert a un amigo a través de audios de WhatsApp en fecha indeterminada, que contradice su versión original, entre otras cosas, al afirmar que no iba a cobrar penal, sino que tiro de esquina, cuestión que no consta en el registro oficial del VAR que muestra lo que dijeron él, Droguett y Toloza.

En el audio que terminó por botar a Castrilli, Gilabert dice: “(En la cancha) cobré el penal, entendiendo que podía no ser, porque me la jugué y vi que le tocaba el tobillo. Me llama el VAR, veo que no es penal, voy a salir con tiro de esquina y me dicen ‘Francisco, por favor, analiza la camiseta’ y veo el jalón, pero me parece acción de juego, voy con tiro de esquina. Y me dicen, ‘Francisco por favor, analiza la camiseta’, y yo dije ‘¿¡¡qué!!?’. Ahí entendí que algo raro había pasado y me fui con esa sensación de haber cobrado algo que no era. Termina el partido y el VAR (Cristián Droguett) me dice: ‘Hueón, menos mal que cobraste penal, menos mal me lo entendiste’... ‘Puta, sí, pero ¿qué pasó?’, pregunté. ‘Me llamaron de Santiago que tenía que cobrar penal’. Tan tan!”.

Gilabert no quiso comentar sus dos versiones. Y Droguett advierte que a él nunca lo llamaron de Santiago, pues el único que habló en ese momento crítico fue Mario Vargas, el QM, por el auricular.

La investigación del oficial de cumplimiento de la ANFP es otro de los herméticos misterios del caso que, en lugar de verdades absolutas, suma cabos sueltos y contradicciones.

Esta historia continuará.