Era recién el segundo lance de Alejandro Tabilo (45º) y un tenista ubicado entre los diez mejores del mundo. Y lo cierto es que se notó.

Más allá de algunos buenos pasajes del nacional, lo cierto es que Casper Ruud (10º) controló el ritmo del partido, aceleró en los momentos clave e hizo sentir su condición de top ten en la segunda ronda del Masters 1000 de Montecarlo, que selló con un claro 6-2 y 6-4.

Durante los primeros juegos del partido, había cierto equilibrio en el duelo. Si bien el europeo controló su saque sin problemas, el zurdo pegaba firme desde el fondo de la cancha y ocultaba las diferencias de ranking entre ambos.

Pero todo se derrumbó en el quinto juego. Los errores no forzados (28 en todo el partido, contra apenas 13 de Ruud) empezaron a pasarle la cuenta y cedió su servicio consecutivamente en dos ocasiones, con lo que en media hora ya le había ido el set.

El segundo comenzó igual, con Ruud sin grietas y con Tabilo atacando con ángulos y tiros profundos, buscando herir al imperturbable escandinavo. En el quinto game, el noruego quebró y parecía sentenciar rápido el desenlace, pero el chileno aprovechó el primer juego en el que tuvo break points para romper de vuelta y hacer aparecer unos “Alejandro, Alejandro” en el Court des Princes monegasco.

Pero sería un sueño del que Ruud haría despertar rápido al chileno. Quiebre inmediato y cierre rápido para consolidar su paso a la siguiente ronda y cerrarle el camino al zurdo, que de todos modos se va con la satisfacción de obtener su primera victoria sobre arcilla en un Masters 1000 y un casi seguro ascenso en el escalafón ATP.

“Se encontró con un jugador de un nivel superior, se apuró un poco, trató de jugar puntos muy rápidos cuando había que controlar más, como lo hizo al final del segundo set, cuando logró quebrar. Quizás los nervios, el escenario y la presión que ejerció Ruud terminó con un resultado que no esperábamos”, analiza Guillermo Gómez, entrenador de Tabilo.

“El primer partido fue bastante bueno, se está acostumbrando a este tipo de torneos, lo está asimilando de mejor forma”, añade.

El nacional partirá ahora al ATP de Bucarest, que parte el próximo lunes y en el que será cabeza de serie. En las clasificaciones está apuntado, por ahora, Christian Garín (103º).

“Está jugando casi todas las semanas con los mejores tenistas del mundo, ya se va asentando un nivel y ojalá que pueda seguir demostrando en Bucarest y en el resto de la temporada de arcilla el buen rendimiento que está teniendo”, confía Gómez.