Santiago de Chile.   Mié 08-05-2024
12:40

Polémica asunción de Mosa al poder genera un quiebre aún más profundo en Colo Colo

El comerciante forzó las elecciones de ByN al pedir la renuncia de Eduardo Loyola. Sin embargo, descolocó a todos cuando en la Junta de Accionistas verificada este viernes anotó en su reemplazo… al mismo Loyola. Como ya tenía acordado el respaldo del Club Social —que también se había comprometido con Stöhwing— llegó a cinco votos y se colgó la banda presidencial. “Dentro de nuestra agenda está tener un estadio nuevo, de todas maneras”, prometió Mosa, quien asume por tercera vez y será el gobernante en el centenario.
Foto: Photosport
Raúl Neira26 de abril, 2024
Domingo 21 de abril, por la tarde.

Alfredo Stöhwing y Matías Camacho conversan durante un buen rato. Hablan del pasado y del futuro. El bienestar de Colo Colo es el foco principal.

“El jueves, entonces, nos juntamos a firmar el acuerdo”, asegura el presidente del Club Social a la máxima autoridad de Blanco y Negro.

Stöhwing respira aliviado. Cree tener comprometidos los votos para la elección presidencial de este viernes y, así, ser reelegido por tercera vez.

Sin embargo, al día siguiente ya la calma se ha perdido. Camacho no contesta el teléfono. No una, sino varias veces. Recién da señales de vida el último jueves. “El club no va a votar por ti, votaremos por Aníbal Mosa”, dispara.


A Stöhwing se le cayó el mundo encima. “Ellos me habían comprometido su apoyo, me prometieron sus votos. Cuando me dicen que no, entregan argumentos muy livianos y está claro que no son los verdaderos”, confiesa apesadumbrado.

“Durante mucho tiempo trabajamos codo a codo con Camacho. Participó en todas las reuniones del ‘proyecto estadio’, por casi un año. No puede decir que no lo conocía, fue parte de todo. No es todo: también le ofrecimos presidir la Comisión Centenario y descuentos para los socios. Nos pidió un cargo gerencial; le explicamos que eso no podía darse de la noche a la mañana, pero que lo íbamos a analizar”, cuentan quienes hasta ayer dirigían ByN.

No habría ofrecimiento que lo hiciera cambiar de opinión: el presidente del Club Social había dado su palabra a Mosa para que el comerciante nacido en Siria recuperara el gobierno de la concesionaria.

EDUARDO LOYOLA, EL CAUSANTE


Hace un mes, Eduardo Loyola —uno de los tres representantes de Mosa en el directorio de ByN— dejó el cargo argumentando que “mi compromiso con Aníbal Mosa era por un año”.

La decisión revolvió todo el puzle en la concesionaria y por dos motivos: uno, porque correspondía elegir directorio en la próxima Junta de Accionistas, que se verificó durante este viernes y, luego, porque permitía designar un nuevo presidente.

Mosa sabía lo que hacía. Había logrado forzar los comicios electorales, pero le faltaba un siguiente paso para recuperar el sillón presidencial: contar con los dos votos del Club Social, representado por Camacho y Alejandro Droguett.

Lo mío no es ninguna operación política. Soy una persona seria, tengo una trayectoria. No vean quintas intenciones. Pondré todo mi esfuerzo Eduardo Loyola nuevo vicepresidente de ByN

Y a eso se dedicó en el último tiempo. Sostuvo varios encuentros con Camacho, y poco a poco lo fue convenciendo. “Mosa le prometió a varios trabajadores del club puestos en ByN. Esa fue su oferta electoral”, confidenciaron en Pedrero.

Camacho, agregan en la interna colocolina, está viviendo momentos difíciles en su administración. “Se ve debilitado, con poco apoyo; ha estado a punto de renunciar varias veces. No asiste a todas las reuniones. Haber criticado a Gustavo Quinteros el año pasado, cuando cuestionó su relación con los representantes, y que después el DT lo humillara, lo dejó muy mal parado”, puntualizan.

No es todo: el club, cuentan, tiene un déficit importante (superior a los $200 millones), la cantidad de socios ha bajado de 70 mil a 12 mil, y muchos aventuran que en la próxima asamblea de socios, a realizarse el 25 de mayo, se le pedirá la renuncia a Camacho. Varios integrantes de la mesa que dirige han dejado sus funciones y uno de los puntos más críticos lo vivió la semana pasada, cuando Bárbara Martínez, directora social, presentó la renuncia.

“Tengo profundas diferencias valóricas con el directorio y principalmente con su presidente… No quiero estar donde no se valora el sentido de lo humano en el quehacer social y donde el hostigamiento, la segregación y el despotismo están a la orden del día. No quiero seguir siendo parte de un directorio que no trabaja por intereses colectivos, ni mucho menos por la recuperación del club”, contó en sus redes sociales.

En ese contexto, a Camacho y Droguett no le quedaba más alternativa que entregarle su respaldo a Mosa, pese a que en las bases del club no estaban para nada convencidos. Con esos dos sufragios, más los tres de su sector, incluyendo el del retornado Loyola, Mosa capturó cinco votos, dejando en cuatro al bloque liderado por Stöhwing.

“Es una situación que se sustenta en un subterfugio jurídico, legal, que tiene bien poco de fino, por decirlo de alguna forma. Se utilizaron legalmente las herramientas que se tenían, pero es muy burdo. Partir así es complejo”, analiza el abogado Fernando Monsalve, presidente del Club Social entre 2014 y 2018.


El aludido expresidente no guardó comentarios respecto a la jugada de su contrincante: “Es todo muy desilusionante; Colo Colo no va a despegar nunca, porque se construye un período y después se llega a estrujar el juguete de nuevo. Lo de Loyola es una maniobra que no resiste análisis, pobre club… Es una burla a los hinchas que salga un director para provocar la elección, como en todos los mandatos de Mosa, y que vuelva a aparecer en menos de un mes. Es una actitud muy poco seria, que no vislumbra buenas cosas y habla mal de todos los involucrados en esa estratagema. Parece que salir en las fotos del centenario justificaba todo”.

La jornada terminó con Mosa en la sala de prensa del Monumental. Feliz, radiante, aunque con un atraso de media hora, el nuevo presidente de ByN declaró: “Es un tremendo honor volver acá y una gran responsabilidad. ¿Qué se negoció con el club? No es una negociación, pasa por tener puntos de vista, de encuentro, que son vitales; por ejemplo, el estadio nuevo es una visión que compartimos con el club. El estadio es un tema siempre candente, pero dentro de nuestra agenda está, de todas maneras. En el primer directorio del mes de mayo esperamos tener algunos lineamientos. Queremos tener una maqueta, poner una primera piedra”.

Y agregó: “Mi sello será el de la unidad. Pretendo que todos los directores sean tomados en cuenta, acá no sobra nadie… Tenemos que tener una agenda corta y una más larga; la corta, tenemos que hacernos cargos de situaciones en el estadio como los baños y los accesos, que hoy se pueden mejorar bastante. ¿Lo que declaró Stöhwing? No tengo nada que decir ante eso”.
Raúl Neira

es redactor de Deportes El Mercurio y especializado en fútbol. Con más de 25 años de carrera, cubrió la Copa Confederaciones de Rusia 2017, la Copa América de Chile 2015, copas Libertadores, sorteos y partidos clasificatorios a la Copa del Mundo.

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