Chile tiene a su embajadores para la ceremonia de inauguración. El voleibolista Marco Grimalt y la tiradora Francisca Crovetto fueron elegidos por el directorio del Comité Olímpico de Chile para ser los representantes en la obertura del 23 de julio.

El especialista de la modalidad de playa, actual campeón de los Juegos Panamericanos de Lima 2019, y la skeetera, directora del COCh —se restó de la votación— y subcampeona en el megaevento limeño, conformarán la inédita dupla en el tradicional acto, ya que Chile seguirá los lineamientos del COI, que llamó a todos los países a tener a un representante de cada género.

Para la ceremonia de clausura, en tanto, fue seleccionada la canoísta María José Mailliard.

"Siento un tremendo orgullo y es un gran honor ser el abanderado en este megavento deportivo tan importante, acompañado de la 'Panchita', una gran deportista y ejemplo como persona. Cualquiera de los deportistas que clasificó tiene los méritos para ser abanderado, todos somos luchadores y yo soy uno más de ellos", expresa Grimalt.

"Es un reconocimiento de lo que hemos hecho en estos casi 20 años de carrera. Todo lo que he logrado ha sido junto a Esteban (Grimalt), asi que esta distinción es para él también", añadió.

Una de las intenciones del COCh era llevar al golfista Joaquín Niemann como portaestandarte, pero el talagantino iba a estar muchos días parado desde la ceremonia hasta su estreno. De hecho, "Joaking" y Guillermo Pereira recién llegarán el 26 de julio a Japón, después de que "Mito" juegue el 3M Open y que Niemann dispute el British Open, la semana previa, por ende, no era elegible.

A nivel femenino, la tiradora se impuso a otras serias candidatas como la nadadora Kristel Köbrich o la triatleta Bárbara Riveros. La líder de la Roja, Christian Endler, también era opción, pero se estrena dos días antes de la ceremonia y también juega al día siguiente, por lo que fue descartada.

Finalmente, a nivel paralímpico, el nadador Alberto Abarza y la atleta Francisca Mardones portarán el estandarte.