Dos glorias del pugilismo vuelven al cuadrilátero para una contienda con fines benéficos: Mike Tyson (54 años) y Roy Jones Jr. (51 años), ambos excampeones del mundo en peso pesado y referentes en su momento, se enfrentarán este sábado en una justa a realizarse en el Staples Center de Los Angeles, California.

Tyson (50-6), el boxeador más joven en la historia en ganar el título del peso completo (20 años y 4 meses) vuelve a un ring después de 14 años, luego de caer en una exhibición ante Corey Sanders. Por su parte, Roy Jones (66-9), el único peleador en la historia que comenzó como súperwelter y terminó como campeón de peso pesado, viene de cuatro victorias ante rivales de bajo calibre. En diciembre de 2015 sufrió un duro nocaut ante el galés Enzo Maccarinelli.

No será un combate tradicional, ya que la Comisión Atlética del Estado de California determinó estrictas medidas para cuidar la salud de los veteranos púgiles. De hecho, está pactado que no pueden haber noqueos. Tampoco habrá jueces —aunque el Consejo Mundial de Boxeo invitó a a que algunos dieran un veredicto remoto— y, por ende, tampoco se declarará un vencedor.

Sí habrá árbitro, el que intentará velar por el cumplimiento de las atípicas reglas. “Es conveniente puntualizar que lo que harán será una exhibición. Serán ocho asaltos de dos minutos y usarán guantes de 12 onzas y no de 10. Formalmente no habrá un ganador, que es la esencia de un combate”, explica Luis Valenzuela, presidente de la Comisión Nacional de boxeo.

Para el excampeón mundial en peso mínimo y minimosca (AMB) Rosendo Álvarez, la pelea “me parece muy entretenida e interesante, porque se trata de dos leyendas del boxeo. Roy Rones Jr. es considerado uno de los mejores de los 90 y Mike Tyson fue el destructor de boxeadores, uno de los más aclamados entre el 84 y el 90. Es uno de los más grandes de la historia”.

El “Búfalo” cree que estas exhibiciones se están generando por el poco atractivo que tiene el boxeo en la actualidad. “Creo que deleitará al público, ya que en este último tiempo se han realizado peleas que no tienen el brillo que se espera y dejan mal sabor a los aficionados. Hay muchos excampeones mundiales que quieren hacer lo mismo por la ausencia de grandes peleas”, añadió.

La dieta vegana fue clave para Tyson, quien bajó de peso para ponerse a tono para su regreso. “Fue difícil (la preparación), pero solo por una razón en particular: porque tenía que perder 45 kilos. Pero aparte de eso, siempre he hecho esto en toda mi carrera. Además, me hice vegano. Mi esposa me dijo que me subiera a la cinta de correr. Comencé con 15 minutos en ella y terminé en dos horas”, explicó.

“El veganismo me dio la oportunidad de vivir una vida sana. Estaba tan congestionado por las drogas y la cocaína que casi no podía respirar y mi tensión arterial era muy alta”, añadió.

Valenzuela se muestra muy crítico por la contienda. “Claramente la edad de ambos constituye un riesgo muy alto para un combate de boxeo tradicional. Esta actividad ya es riesgosa para jóvenes y eso sin duda que aumenta en personas que estaban retiradas y superan los 50 años”, analiza.

Jorge Drouillas, periodista de Boxeadores.cl, plantea que “es una forma de conseguir ingresos en un momento muy complicado para el deporte en general. Esta exhibición se viene preparando hace meses por lo mismo. Respecto de su valor deportivo, es nulo. Es un show comercial, como el de Floyd Maywheater con Conor McGregor”.

Ahora, Drouillas sí cree que puede haber espectáculo. “Ambos fueron boxeadores de élite en los años 90-2000. Tyson es un poco anterior, pero en el sentido del espectáculo, se ha preparado bien. Hay algo que es bien importante aclarar, los dos se retiraron tras nocauts bien duros. No es como lo presentan, casi una especie de carnicería a los estilos de una pelea de 1920. Para nada, yo veo una pelea con muchos amarres y los lujos típicos de Roy Jones”, detalla.

US$ 11 millones: Medios estadounidenses cifran la bolsa de ganancias en 10 millones de dólares para Tyson y uno para Jones. Eso sí, el primero donará todo. “Será para varias organizaciones benéficas, por lo que nadie tendrá que preocuparse de que yo me haga rico o se ponga celoso y diga que hago esto por dinero”, anticipa Tyson.