El Maracaná terminó transformado en un volcán que ni la lluvia de Río de Janeiro logró apaciguar. La multitud (68.418 asistentes) que convoca el “Mengao”, obsesionado con el tercer trofeo de la Copa Libertadores, entró en catarsis una vez que el equipo carioca encaminó la llave ante Corinthians (3-0 en el global) y se instaló en semifinales del torneo por tercer año consecutivo.

El “Timao” resistió casi una hora, incluso fue punzante en el primer acto (a través del lateral izquierdo Fabio Santos), pero la jerarquía del conjunto de Dorival Junior, invicto en el certamen continental, parece demasiado abundante para salir ileso de un mano a mano con el “Rubro-Negro”.

La amenaza permanente del centroatacante Pedro (casi emboca una chilena en el inicio) y el irreverente Gabigol condicionan cualquier trámite. Y si Giorgian de Arrascaeta tiene un partido normal, el “Fla” se hace insufrible. Así fue. El uruguayo quebró el duelo a los 52’, cuando desbordó a Fagner por la izquierda y sacó un centro sin demora, de revés a la carrera, para que Pedro —máximo artillero de la Copa, con 9 aciertos— venciera a Cassio (1-0). Fin de la historia. Ahí Corinthians sacó la bandera blanca, impotente ante un rival inabordable.

La expulsión del zaguero visitante Bruno Méndez (68’), por mano que interrumpió una arremetida de gol de Pedro, dejó la pista libre para Flamengo, que oxigenó el equipo con los cambios: adentro Arturo Vidal (ingresó a los 75’), Diego Ribas y Everton Cebolinha, entre otros, haciendo gala de un banquillo con astros llegados de Europa. Erick Pulgar no fue citado y podría asomar el domingo ante Athletico Paranaense en el Brasileirao.

El volante chileno, certero en los pases y muy simple para conectar líneas cuando el rival estaba entregado, participó en dos habilitaciones para Gabigol que por poco no estiran la serie.

Flamengo, que en la historia le ganó cinco de ocho series directas a Corinthians en el “Clásico de la Nación”, espera por rival en la semifinal al ganador de la llave entre Talleres y Vélez Sarsfield (2-3), que hoy se miden en Córdoba. El “King” está cada vez más cerca de la final agendada en Guayaquil. “Muy feliz, las cosas están saliendo muy bien, nos acercamos al sueño mío y el que tiene la gente de Flamengo. Viene una semifinal muy dura y ojalá la Copa sea nuestra. Tengo una carrera larga, con mucho esfuerzo, he estado en los mejores equipos del mundo y cada vez que cambio de equipo llego con personalidad y los compañeros me respetan, eso me ayuda mucho. Tengo dos años de contrato y espero ganar todo con este club”, aseguró Vidal tras el triunfo.