Eduardo Berizzo no va más en Paraguay. La selección guaraní fue goleada 4-0 por Bolivia en La Paz y terminó sentenciando el proceso del técnico argentino. "La APF comunica que se dan por terminadas las funciones de Eduardo Berizzo al frente de la selección paraguaya. Le deseamos el mejor de los éxitos. Informamos que los próximos días se comunicarán los integrantes de la nueva conducción técnica de nuestra querida Albirroja", rezó el comunicado de la asociación paraguaya, dando cuenta de la suerte del "Toto".

En esta fecha triple Berizzo sumó un solo punto de los nueve en disputa y su escuadra no anotó un solo gol, aumentando la molestia con el entrenador argentino. De hecho, Paraguay quedó décima, superada por diferencia de goles por Bolivia. Tras la debacle en La Paz, el “Toto” declinó hablar en la conferencia de prensa, dando luces de que su salida era cosa de horas. Incluso antes de la debacle, el argentino había enfrentado su posible salida.

“La Federación no tiene ni que preocuparse por mí, no me debe nada ni le debo nada. Iré a casa tranquilo en el caso de que así suceda, ni reclamando, ni pagando cláusula. No tengo cláusula de salida, no deben pagarme nada por despedirme. La clave es confiar en nosotros, no autodestruirnos. Ningún problema tengo para irme a casa. No deben pagarme nada, no deben pagarme ni el mes de octubre. Lo económico aquí en lo más absoluto importa”, expuso Berizzo.

El 11 de noviembre Chile visitará a Paraguay y en el banco guaraní habrá un nuevo entrenador. En ese país se especula con que el español Fernando Jubero sería el elegido para tomar la banca. El mencionado entrenador de 47 años, marcha puntero con Guaraní con 22 puntos en 11 partidos. Además, ha dirigido a cuatro grandes del fútbol paraguayo: Guaraní, Olimpia,, Libertad y Cerro Porteño. De todas maneras, los próximos días serán clave para definir al reemplazante de Berizzo. Además, para el duelo con Chile, los paraguayos perdieron por tarjetas amarillas al volante Ángel Cardozo.

“Todos somos responsables de lo que estamos viviendo. En este tipo de clasificatorias los errores se pagan caros y Bolivia los aprovechó. Quedan partidos, pero hay que ser autocríticos, aceptar la realidad y tratar de enmendar el rumbo. Esta camada de jugadores pasó por varias dificultades y aún soñamos con jugar el Mundial, pero debemos asumir que somos responsables. Esto duele muchísimo, sabíamos que iba a ser difícil por la altura y en el primer tiempo nos vimos mejor, porque el partido fue más parejo, tuvimos nuestras chances, pero en el segundo tiempo al ir a buscar el empate nos hicieron mucho daño por los espacios que dejamos. Todavía podemos soñar con la clasificación, pero tenemos que ser autocríticos y mejorar. Cambiaría muchos títulos que he conseguido en los clubes por jugar el Mundial y mientras haya posibilidades lucharé por ese sueño”, dijo Gómez.

El arquero Antony Silva remató lo que viven: “Bolivia encontró muchos espacios y nos liquidó. No hay que bajar los brazos, queda mucho, pero hay que mejorar”.

En la cancha la debacle empezó temprano, a los 21 minutos, cuando Rodrigo Ramallo encajó una zurda al ángulo que dejó parado a Antony Silva. Un penal elevado por Antonio Sanabria, en la única ocasión clara de Paraguay, ahondó el drama forastero. Luego, Moisés Villarroel finalizó un veloz contragolpe y Víctor Abrego le ganó una pelota dividida al meta rival para sentenciar el partido. En los descuentos, Roberto Fernández completó la humillante goleada.

En el vestuario altiplánico, en tanto, César Farías resumió el presente de Bolivia: “Estuvimos muy precisos y los muchachos entraron muy prendidos y superamos a un gran rival. Esto nos ilusiona para seguir peleando por un cupo”, dijo el técnico de un equipo que también busca un puesto en el repechaje.