En febrero, Pablo Milad, máxima autoridad de la ANFP, sacaba cálculos positivos. “Nuestra liga, con 0,23% de positividad, fue una de las más bajas del mundo. El promedio de Sudamérica fue 1,2%, y estamos muy por debajo. Los equipos hicieron un sacrificio económico grande y los jugadores fueron profesionales con los protocolos”, analizaba.

Tanto optimismo lo llevó a la siguiente reflexión: “Estamos cerca de que el público vuelva a los estadios… Es una buena noticia para todos los aficionados que esperan muy prontamente estar en las gradas y gritar por su respectivo equipo”.

En Quilín puntualizan que la ANFP elaboró dos propuestas para que los simpatizantes volvieran a disfrutar del fútbol: una en octubre de 2020 y otra, justamente, en febrero. Ambas se entregaron al ministerio del Deporte, que las derivó a la cartera de Salud. Y ambas fueron bien acogidas. Sin embargo, el coronavirus no tenía pensado rendirse y volvió con fuerza la segunda ola: la pandemia derivó, de hecho, en múltiples cuarentenas.

Se estropeaba el plan.

Sin embargo, nuevamente los números invitan al optimismo en Quilín. Chile comenzó a registrar menos casos de covid-19, se han ido liberando las restricciones a la población y en el fútbol el cuadro pinta mucho mejor, porque considerando las siete fechas del torneo de Primera y cinco del ascenso, los números son alentadores: solo 41 análisis positivos, con una tasa de 0,451%.

“El torneo de Primera División se inició el sábado 27 de marzo y hasta la séptima fecha se han realizado 5.895 exámenes. En el Ascenso, en tanto, que comenzó el sábado 3 de abril, hasta la quinta fecha se habían hecho 3.183 exámenes. De esta manera, como parte del protocolo instaurado por la Comisión Médica de la ANFP, son 9.078 test PCR realizados a todos los protagonistas: jugadores, cuerpos técnicos y cuerpos médicos”, informan en el ente rector del fútbol nacional.

Ante estos datos, Milad vuelve a la carga con la idea de que el público vuelva a los estadios. “Se ha conversado con la ministra del Deporte, con el ministerio de Salud y con la comisión médica. La idea es que sea después de la Copa América, es decir, en julio. Se ha pensado en un aforo del 25%. Un requisito para quien quiera ir al estadio es tener las dos dosis de la vacuna contra el covid-19, por un asunto de seguridad y, también, para fomentar la vacunación. En un comienzo no podrían ir los niños, por el tema de la vacuna, pero es algo que se está analizando. Nada está descartado. Se está pensando, además de eso, en pedir un test de antígenos negativo, que es igual que el PCR, pero que tiene un 90% de efectividad. Y es más rápido”, detallaron desde la ANFP.

Milad y compañía, eso sí, piden calma. “Más claridad tendremos después de la Copa América, porque aún hay comunas en cuarentena y es complejo abordar el tema con certeza. Pero sí está sobre la mesa, se ha conversado con Cecilia Pérez y ella ha llevado el tema a la autoridad respectiva, que es el ministerio de Salud. La comisión médica, por otro lado, está colaborando”, apuntaron desde Quilín.

Para reforzar la seguridad, el protocolo contempla que en los estadios se implementen áreas de sanitización, control de temperatura y una distribución del público respetando la distancia física.

La última palabra, en todo caso, será de la autoridad sanitaria. El ministerio de Salud, finalmente, tendrá que definir si el torneo 2021 se terminará con público en las graderías o habrá que seguir esperando.