En el primer ranking ATP de 2025, Christian Garín aparecía 151º. Estaba lejos del protagonismo y a mucha distancia de Alejandro Tabilo y Nicolás Jarry, 23º y 34º, respectivamente. Incluso, fue peor en abril, donde llegó a estar 214º.

Pero mejoró en la recta final del año, ganó dos challengers (cuatro en total) y cerró como ‘1’ de Chile metido de nuevo en el top 100. Su 80º puesto le permitió entrar al Abierto de Australia de forma directa otra vez: de sus seis participaciones previas, solo en 2025 debió jugar la qualy; desde ahí llegó a segunda ronda, donde Taylor Fritz lo eliminó.

Esa performance es la primera gran misión de “Gago”: de los 105 puntos que defiende hasta Indian Wells, 80 fueron logrados en el primer Grand Slam. Los otros 25 fueron en el Chile Open.

“Siempre vale la pena volver a intentarlo. Orgulloso del esfuerzo y con la mirada puesta en lo que viene”, dijo Garín al cierre del año.

“Veo a Christian tenística y físicamente bien preparado. Pondría como su objetivo que mire con optimismo lo que le está pasando. Hace un año estaba lejos y ahora debe sumar en los primeros meses del año”, afirma la extenista Macarena Miranda.

Alejandro Tabilo prefirió alejarse de la bulla para planificar su 2026. “Jano” se fue a Quilpué a hacer su pretemporada, junto a su equipo técnico encabezado por Horacio Matta, gente de la academia GBM y un sparring, el británico Max Basing de 23 años, extop 20 junior y 420º del ranking.

El chileno aspira a comenzar mejor de lo que sucedió este año, donde esperó a marzo para ganar su primer partido del año, no logró defender los títulos de Auckland y Mallorca, sufrió con las lesiones, tuvo fuertes encontrones con la familia y perdió más de 100 puestos desde el puesto 22º con el que inició. Pudo mejorar al final: ganó el ATP de Chengdú y volvió a los 100 mejores.

De todo lo malo del primer semestre del año pasado, algo positivo en las cuentas del nacido en Toronto: solo defiende 10 puntos hasta Indian Wells, los que recibió por partir en segunda ronda del Chile Open 2025. De los cuatro de la “Armada”, es el menos presionado en ese aspecto.

Un escenario que puede ayudar, cree Miranda. “Ojalá tenga suerte en el sorteo de Australia y tenga una primera ronda que lo haga entrar en ritmo, aunque sabemos que es un torneo duro por el clima. Si no, jugaría mis cartas en la gira sudamericana”, dice la directora del WTA de Colina.

De los cuatro de la “Armada”, Tomás Barrios es el único que sigue jugando a esta altura del año. La semana pasada estuvo en Buenos Aires disputando la exhibición “Road to Australia”, aunque no le fue bien y perdió sus dos partidos, y está en la final de la Copa Chile en el Club Providencia, que juega este sábado al mediodía.

Y el chillanejo no para: para comenzar el año, irá a Canberra para jugar el challenger de la capital australiana como adaptación a la qualy del Abierto de Australia. El objetivo es doble: tal como en 2022, entrar al cuadro principal tras fallar en su intento tres años seguidos, y comenzar con el pie derecho la defensa de 77 puntos hasta Indian Wells. De ese total, destacan los 44 que ganó por ser finalista del challenger de Punta del Este.

“Espero que Barrios siga mejorando en su regularidad. Él tiene un tenis increíble, creo que en un buen día puede ganarle a cualquiera, pero le ha faltado en el último tiempo mantener esa constancia”, apunta Miranda. El 2025 tuvo bastante para hacerlo: fue el chileno que jugó más partidos a todo nivel en el año, con 80 duelos, y remató la temporada ganando 15 de sus últimos 18 choques.

Otro año complicado para Nicolás Jarry. Si en 2024 debió lidiar con la neuronitis vestibular, el 2025 fue una fractura en el dedo chico del pie y otra en el codo; esta última obligó a parar su temporada a fines de octubre, cuando estaba 107º.

Ahora 123º del mundo, Jarry arranca el 2025 tal como Barrios, en el challenger de Canberra y luego la qualy al Abierto de Australia, al igual que en 2023. Esa vez superó la instancia y ganó su único partido del cuadro principal en Oceanía.

Jarry es el que posee el panorama más complicado de la cuarteta: defiende 110 puntos (50 ganados en Brisbane, 50 en Río y 10 en Australia) hasta Indian Wells y arriesga caer fuera de los 150 mejores si no lo logra.

Para eso, hizo cambios. Entrenó junto a Christian Garín en la pretemporada y dejó de trabajar con el entrenador español César Fábregas, pieza importante de su staff durante años. “Fuiste y serás muy importante en mi carrera profesional”, comentó en su salida.

“Ojalá pueda tener un inicio limpio, sin nuevas lesiones”, confía Miranda. “Es difícil proyectarle una meta cuando viene recuperándose de una lesión importante, hay que ver cómo vuelve al circuito primero”, añade.