Felipe Vercellino compite en el Abierto Argentino de Polo: “Cumplí un sueño que tenía desde niño, cuando empecé a jugar”
El chileno disputó su primer partido en el mejor campeonato del mundo defendiendo la divisa de La Aguada, pero no se conforma con eso. “Queremos conseguir los puntos para clasificar al torneo del próximo año”, avisa “Pipe”, que le anotó dos goles a La Natividad, campeón defensor en Palermo.
Equipo Deportes05 de noviembre, 2024
Para Felipe Vercellino, el mejor jugador chileno de polo del momento, la tarde del domingo pasado fue un momento que atesorará toda la vida. En la cancha 1 del Campo Argentino de Polo, en Palermo, jugó su primer partido en el Abierto Argentino, el torneo más importante del mundo de la disciplina.
Son muy pocos los nacionales que han vivido tal privilegio: Max Errázuriz, Gabriel Donoso y Jaime García-Huidobro defendieron a equipos en el Abierto, breve lista a la que se suma Vercellino.
Defendiendo los colores de La Aguada (29 goles de hándicap), histórico equipo en los pastos bonaerenses, que logró su paso al torneo a través de la fase previa, le plantó dura batalla al campeón defensor, La Natividad (40), que finalmente se impuso por 19-11, resultado que no empaña el estreno de “Pipe” en el linajudo certamen.
El nacional (7) incluso se dio el lujo de anotar dos tantos ante una formación compuesta solo por jugadores de 10 goles de hándicap, el máximo posible, de la talla de Facundo Pieres y Pablo McDonough.
“Fue muy lindo, cumplí un sueño que tenía desde niño, cuando empecé a jugar. Llegar a jugar el Abierto es muy difícil, son solo 10 equipos y hay que clasificar para poder jugarlo. Año a año solo admiten dos equipos nuevos y fue muy lindo poder conseguir la clasificación”, expone Vercellino, que partió cuando aún era un adolescente a jugar torneos a Argentina para pulir su juego.
—Un debut complicado, ante La Natividad.
“Sí, nos tocó debutar contra el campeón del año anterior, con varios de los mejores jugadores de la historia. Además, nos tocó jugar en la cancha 1 de Palermo. Hicimos un buen papel, más allá de que perdimos”.
—La diferencia de hándicap entre ambos equipos era de 11 goles y perdieron por ocho. Si hubiera sido un torneo con hándicap, habrían ganado...
“Exactamente. Salimos con todo a ganar el partido, pero cuando se nos escapa, quisimos por lo menos tratar de ganar el hándicap y lo logramos. Eso refleja que hicimos un buen papel ante un equipo de 40 goles, dentro de todo, estuvimos a la altura”.
La Aguada fue campeón en Palermo en 2003, con cuatro Novillo Astrada en su formación. En 2006 fue finalista. Foto: La Aguada.
—¿Qué sintió cuando logró clasificar y cuando logró jugar ese partido en Palermo?
“Fue muy lindo. Hay mucha gente que juega polo que nunca puede llegar a este torneo, es muy difícil estar entre los mejores, requiere mucho trabajo, esfuerzo de años, mucha organización y eso cuesta trabajo y tiempo. Yo soy de una familia que no era de polo, por es me costó un montón llegar, pero mi familia siempre me apoyó, mi papá y mamá siempre creyeron, porque me fui muy chico de la casa a perseguir un sueño, me dediqué 100% para poder lograr todo esto. Mi papá siempre me decía que hiciera lo que yo quisiera, pero que fuera el mejor”.
—¿Cómo se gesta esta oportunidad de jugar en La Aguada?
“La familia Novilo Astrada es la dueña del equipo y tengo muy buena onda con ellos. Como ahora están fuera, porque están más grandes, igual decidieron armar un equipo para mantener el nombre en la élite del polo, que siguiera activo. Por eso, nos convocaron y nos están dando una mano muy grande con las canchas, los caballos. Estamos muy agradecidos de su apoyo”.
—El torneo no se acaba para ustedes. El sábado disputan la segunda fecha.
“Nos toca contra La Hache (36 goles), que viene de ganar el Abierto de Tortugas, va a ser otro partido bravo, para encararlo con todo. Estamos con muchas ganas. Después vienen dos partidos más, que aún no están programados, contra La Hache Cría (31) y contra Indios Chapaleufú (31)”.
—Será otro jugador después de jugar este campeonato...
“De todas maneras, se agarra mucha experiencia, se aprende mucho al estar jugando contra los mejores. Es en estos torneos donde uno más aprende, más mejora. Sin duda va a ser una muy linda experiencia, estamos con ganas de ganar un par de partidos y mantenernos para el próximo año”.
—¿Es la idea? ¿Seguir jugando en La Aguada en 2025?
“Obviamente si conseguimos el puntaje necesario para clasificar para el próximo año podemos mantener el equipo, pueden llegar otras invitaciones, es la idea, quedarme aquí para seguir creciendo. El noveno y el décimo del Abierto descienden automáticamente y el octavo juega un repechaje contra el ganador del torneo de la Cámara de Diputados. Solo los siete primeros mantienen su lugar y eso queremos conseguir”.
—¿Alcanza a jugar los torneos de Chile?
“Ni bien termine acá me voy a jugar allá, no creo que llegue al Hándicap de Chile (parte el 16 de noviembre), pero sí al Abierto del Club de Polo y al Abierto de Chile. Voy a jugar en Cría Bucarest, el equipo de Lionel Soffia”.