Zampedri, a las puertas de una hazaña: ser el tercer futbolista de la historia en titularse de hexagoleador
Si en 2024 el delantero de la UC fue pentagoleador —un registro inédito en los libros del fútbol chileno— en la actualidad está a un partido de conquistar una marca todavía más extraordinaria: liderar la tabla de goleo por seis años consecutivos, registro que alcanzó Kylian Mbappé en el PSG, y que solo es superado por Atilio García, romperedes en la década del 40.
“Todo '9' quiere convertir y ser goleador del torneo”, reflexionó Fernando Zampedri la primera vez que pisó San Carlos de Apoquindo.
Nadie lo sabía, o al menos era un tema que se manejaba muy secretamente, pero la llegada del nacido en Chajarí era un viejo anhelo de José María Buljubasich, gerente técnico de los cruzados. “Lo conocía mucho por su época en Rosario Central. Hace años que lo quería fichar y no se podía, porque los argentinos pretendían venderlo caro”, admiten en la precordillera.
Sin embargo, 2019 no fue un buen año para Zampedri: una lesión en el cartílago del tobillo derecho lo marginó de las canchas desde mayo y lo obligó a pasar por el quirófano un mes después.
A fin de temporada, cuando la UC volvió a preguntar por el atacante, Central no estaba en condiciones de pedir demasiado y aceptó cederlo a préstamo a cambio de US$ 150 mil.
“Todo '9' quiere convertir y ser goleador del torneo”, reflexionó Zampedri.
Y cumplió. No una, sino dos, tres, cuatro y cinco veces. Insaciable, con 37 años, el “Toro” fue por más gloria y está muy cerca de convertirse en el hexagoleador del fútbol chileno. “Sería histórico y muy lindo, pero estamos enfocados en conseguir la clasificación a la Copa Libertadores. Si lo consigo, seguramente lo festejaremos y disfrutaremos”, declaró el máximo goleador en la historia de Universidad Católica con 139 dianas.
“Ojalá se jubile en la Católica, más que eso qué voy a decir… Que llegue a 300 goles para la felicidad de los hinchas. Para mí jugar en la UC fue fácil, para otros difícil, y para él muy fácil”, enseña Juan Carlos Almada, artillero de los estudiantiles en la Copa Libertadores de 1993.
La saga de Zampedri —quien renovó su contrato por una temporada, igual que Gary Medel y Branco Ampuero— no pasará inadvertida en los libros de fútbol. Considerando las mejores 25 ligas del mundo, solo hay dos jugadores que lograron seis veces dominar la tabla de goleadores en forma consecutiva: Kylian Mbappé, el francés, y Atilio García, un atacante argentino, pero nacionalizado uruguayo.
Es justamente “Bigote”, que así apodaban al delantero de Nacional, quien dio un paso más: artillero siete veces en forma consecutiva.
“Lo de Zampedri es espectacular, casi no hay registro en el mundo de ser seis veces goleador. Es para aplaudirlo. Independiente del campeonato, del tipo de campeonato, es todo un mérito. No queda más que felicitarlo y que sea de incentivo para los jóvenes. No es u súperdotado técnicamente, pero tiene una tremenda fortaleza, muy buen juego aéreo, de repente saca voleas… Es completo, es completo. Muy preciso para encontrar el espacio y el gol”, opina Osvaldo Hurtado, máximo anotador en la competición de 1987.
Luka Tudor es dueño de otro récord, el de más goles convertidos (7) en un partido, y también elogia al capitán de la UC: “Es extraordinario bajo todo punto de vista, porque los que estuvimos dentro de una cancha sabemos lo difícil que es marcar diferencias, más para un delantero, más para un goleador, porque cada vez las marcas son más férreas y todos están preocupados de un tipo como él. Genera temor en el rival, preocupación; es tal su capacidad, su porcentaje de acierto, que provoca miedo; en sus compañeros genera confianza y seguridad. Hay una dualidad de situaciones importantes a nivel psicológico”.
Cierra Tudor: “Se lo merece absolutamente, porque además me parece un muy buen tipo. Tiene liderazgo, los compañeros le creen, lo empujan. Cuando se inaugura el estadio se desgarra y dije ‘no se para más’. No solo se paró, sino que hizo el gol. Es un tipo bendecido y lo ha sabido retribuir. Se merece todo. Su principal virtud, la más importante, es la inteligencia. Sabe sus virtudes y sus limitaciones; sabe que no se va a pasar a cinco tipos en dribling, pero sabe dónde tiene que estar, cuándo, maneja los timmings, tiene el olfato que tenemos los goleadores. Ni se apura, no se acelera, va con el tranco perfecto para cuando se provoque la jugada. Es bravo, es un toro, físicamente impresionante”.

Raúl Neira
es redactor de Deportes El Mercurio y especializado en fútbol. Con más de 25 años de carrera, cubrió la Copa Confederaciones de Rusia 2017, la Copa América de Chile 2015, copas Libertadores, sorteos y partidos clasificatorios a la Copa del Mundo.







