El futuro de Sergio Jadue: cumpliría su condena en libertad en Estados Unidos y podría no ser extraditado a Chile
Corrupto confeso y delator del FBI por estrategia judicial, el calerano perfectamente podría pagar su condena sin cárcel en EE.UU. como compensación por la ayuda prestada en la indagatoria y por no ser el cerebro ni el “pez gordo” de la organización criminal que ideó y ejecutó el FIFA-Gate. Su colaboración ante la justicia estadounidense —que no es otra cosa que soplonaje— puede también ser la clave para que nunca sea devuelto a Santiago para enfrentar los cargos de apropiación indebida reiterada y evasión de impuestos, delitos por los que arriesga hasta 10 y 5 años de prisión, respectivamente. La décima postergación de la lectura de su sentencia, ahora para el 9 de abril de 2021, aleja cada vez más las posibilidades del proceso extraditorio.
Antonio Valencia27 de octubre, 2020
Poco después de que estallara el FIFA Gate en mayo de 2015, Sergio Jadue entendió que estaba con el agua hasta el cuello. Con vuelos a Nueva York pagados por la ANFP— uno de los focos de las querellas por apropiación indebida reiterada—, comenzó la búsqueda de asesoría legal de peso en Estados Unidos para abordar su estrategia. Contrató el estudio Fox Horan & Camerini y siguió al pie de la letra los consejos del bufete de abogados que, en simple, recomendó que la mejor forma de controlar los daños era aceptar los cargos, declararse culpable y colaborar con la investigación soplando.
El plan comenzó a rodar el 17 de noviembre de 2015 cuando se fugó de Chile rumbo a Estados Unidos e iniciar formalmente su comparecencia ante la Corte Este neoyorquina en el caso rotulado “USA vs. Sergio Jadue”. Fue acusado bajo la ley RICO (Racketeer Influenced and Corrupt Organizations, en castellano: organizaciones corruptas e influenciadas por mafiosos), una norma nacida exclusivamente para perseguir mafias, y frente al estrado oyó los dos cargos imputados: conspirar para cometer delitos de crimen organizado y fraude electrónico en transacciones bancarias en perjuicio de la FIFA, la Conmebol y la Concacaf.
Seis días después de huir de Santiago, Jadue confesó ante el juez Raymond J. Dearie: “En 2012 acordé con ejecutivos de marketing deportivos y oficiales (dirigentes) de fútbol afiliados a la FIFA y la Conmebol varios esquemas involucrando el pago y recibo de sobornos en conexión con la venta de derechos de TV y marketing de torneos de fútbol. Yo y otros dirigentes de fútbol recibimos sobornos de las compañías de marketing, los cuales pagaron los sobornos para obtener, mantener y renovar derechos de televisión de la Copa Libertadores, Copa Sudamericana, Recopa Sudamericana, Copa América y Copa América Centenario”, sostuvo el expresidente de la ANFP el 23 de noviembre de 2015.
Jadue se fue de Chile el 17 de noviembre de 2015, cuatro meses después de haber celebrado el título de la Copa América. Foto: AP
La justicia norteamericana requisó US$2,2 millones de dólares de la cuenta de Jadue que el ejecutivo del banco UBS de Miami, Patrick Kiblisky, le abrió en dicha sucursal, dinero que fue triangulado a través de la empresa de papel Lisburn Strategies Inc. —en la que son socios el calerano y su madre—domiciliada en el paraíso fiscal de Islas Vírgenes Británicas, y otra cuenta en un banco de Barbados. Para armar dicho esquema, el propio Kiblisky presentó a su cliente a la empresa Amicorp ubicada en el barrio El Golf de Santiago.
En la cuenta del UBS de Miami, Jadue empezó a recibir dinero desde 2014. En febrero de ese año ya había ingresado un millón de dólares. Como los recursos incautados nunca pasaron por Chile, fue la base de la querella del Servicio de Impuestos Internos por evasión tributaria por la que arriesga penas que van hasta cinco años de presidio.
En Estados Unidos y bajo la ley RICO, cada uno de los dos delitos confesados por el calerano es castigado con hasta 20 años de cárcel, pero para ir rebajando la pena, la estrategia de sus abogados no solo incluía confesar y declararse culpable. También someterse al sistema de delación compensada. Soplar para obtener beneficios, pues el objetivo central de la fiscalía estadounidense es cazar y lucir a los “peces gordos” de la organización criminal capturados. Para eso, claro, requiere que los acusados como Jadue colaboren y entreguen nombres, fechas, datos y pruebas al FBI para llegar a los cabecillas.
En el caso de un delincuente que ha colaborado con la justicia, sin antecedentes penales y que no es el cerebro de la conspiración, la jueza podría condenarlo a una pena en régimen libre”Jorge ContesseDoctor en ciencias jurídicas de la Universidad de Yale y profesor de derecho penal, advirtiendo sobre el destino que puede tener Jadue bajo la ley RICO
En eso ha estado el exdirigente chileno. Y dado que su colaboración puede llevar al estrado a los cerebros de la organización criminal —donde incluso puede ser llamado como testigo ante la corte— los abogados de Estados Unidos aceptan postergar cada seis meses la lectura de su sentencia. Este lunes, la jueza Pamela K. Chen reprogramó por décima vez el trámite, fijándolo ahora para el 9 de abril de 2021, a las 10 de la mañana. Y perfectamente puede postergarlo de nuevo.
Jorge Contesse es un chileno radicado en Nueva Jersey (EE.UU.), doctor en ciencias jurídicas de la Universidad de Yale y profesor de derecho penal, advirtió el destino que puede tener Jadue bajo la ley RICO: “En el caso de un delincuente que ha colaborado con la justicia, sin antecedentes penales y que no es el cerebro de la conspiración, la jueza podría condenarlo a una pena en régimen libre”. Y aún cumpliendo el libertad su condena, Estados Unidos podría negar la extradición pese al interés de Chile en ese proceso.
El tribunal estadounidense que vea la solicitud de extradición, advierten otros expertos, ponderará el tipo de pena que recayó sobre Jadue, pero además si ayudó a la justicia. Si la corte estima que su testimonio fue fundamental para aclarar los hechos y capturar a los hombres fuertes, el “cooperador” Jadue podría quedarse en Estados Unidos, incluso protegido, tal como ocurrió con Michael Townley y Armando Fernández Larios, quienes nunca fueron extraditados por aportar al esclarecimiento del asesinato de Orlando Letelier en Washington.
¿Y LA EXTRADICIÓN A CHILE?
El optimismo por la extradición de Sergio Jadue Jadue se desvanece y las sucesivas postergaciones de su sentencia son vistas con desánimo en el Ministerio Público. El calerano suma un lustro viviendo en Miami, con cuatro años y medio posponiendo su condena (la primera prórroga fue en junio de 2016), y conocedores del proceso derechamente no ven “ningún interés de Estados Unidos en entregarlo”, sino que al contrario, “ha accedido a programas de protección a testigos u otros”, comentan.
Las causas abiertas contra Jadue en Santiago son dos: apropiación indebida reiterada de dineros y evasión de impuestos por las platas no declaradas en Chile e incautadas en el banco UBS de Miami. Zafó de ser acusado de lavado de dinero y de corrupción entre privados, pues recién en noviembre de 2018 se comenzó a tipificar como delito el soborno entre particulares, pues hasta esa fecha solo era sancionado si había un funcionario públicos involucrado.
Felipe Sepúlveda, fiscal que persigue la arista chilena desde mayo de 2018 —fecha en que reemplazó a Carlos Gajardo— no pierde la esperanza: “Estamos a la espera de la extradición”, comenta.
—¿Qué sanción arriesga Jadue en Chile por el delito de apropiación indebida reiterada?
“Eventualmente entre 5 años y un día y 10 años de cárcel”.
—¿Y por el delito tributario?
“De 3 a 5 años”.
—¿Qué le parece que en Estados Unidos se haya aplazado por décima vez la sentencia de Jadue?
“Sin perjuicio de que somos respetuosos de la administración de justicia en Estados Unidos y los demás países del mundo, nos gustaría que la situación del imputado Sergio Jadue se resuelva pronto en dicho país y que se resuelva a la brevedad el proceso de extradición, que lleva varios años en tramitación. Nuestra intención es que Jadue sea extraditado a Chile a la brevedad para que responda por los cargos que le formulamos en su ausencia”.
—¿La décima postergación de la lectura de su condena le parece una señal poco alentadora? Jadue completará cinco años en Estados Unidos esperando sentencia.
“No emitimos opiniones al respecto. Esperamos que ello no afecte el proceso de extradición”.
