Copa Libertadores: Bahía y Carabobo amenazan las aspiraciones de O’Higgins y Huachipato
El conjunto de Salvador de Bahía, que tiene la tutela económica del Grupo City, será el examinador de los celestes en una llave que se definirá en Brasil, mientras los acereros tendrán un traslado que querían evitar. En la Copa Sudamericana, la U se medirá con Palesitno, mientras Cobresal espera por Audax Italiano.
Después de 11 años O’Higgins volverá a la Copa Libertadores y en la segunda fase previa se cruzará con Bahía, club que fue 7° en el Brasileirao y que este año ya compitió en la fase de grupos del principal torneo de la Conmebol, después de sortear dos rondas preliminares.
“Cualquier club brasileño es superior a uno de acá, por historia y presupuesto, pero si O’Higgins mantiene la base de este año, invierte en refuerzos y confirma al técnico puede competir, porque el equipo jugó muy bien”, sentencia René Valenzuela, quien jugó el torneo sudamericano con los celestes en 1979.
El “Esquadrao”, local en Salvador de Bahía, está bajo el paraguas económico del Grupo City y su inversión no es menor. Sus últimas dos pretemporadas las montó en Manchester y Girona. Piedra angular es el técnico Rogerio Ceni, que salvó al equipo del descenso en 2023 y lo llevó a la Libertadores después de 36 años. Fue el equipo brasileño que este año jugó más partidos en la temporada: 80 duelos entre Brasileirao, Copa Brasil, Libertadores, Sudamericana, Campeonato Baiano y Copa Nordeste (ganó estos dos últimos).
En el plantel del “Tricolor” sobresalen Everton Ribeiro, armador zurdo de 36 años con pasado en el Scratch, que ganó cuatro veces el Braileirao y dos cetros de la Libertadores (77 presencias), y el ariete Willian José (34), de fructíferas campañas en Real Sociedad y Betis, entre otros.
La serie, que asegura un piso de 500 mil dólares, se inicia en Rancagua y se cierra en el Arena Fonte Nova. Si O’Higgins avanza chocará con Tolima de Colombia o un club procedente de la primera fase (Táchira o un representante boliviano), y tendrá asegurado, en el peor de los casos, un boleto a los grupos de la Copa Sudamericana.
La oposición de Huachipato, que termina la serie en el CAP, será Carabobo, club valenciano que ganó el Clausura 2025, fue segundo en la tabla anual, perdió la final absoluta ante Universidad Central y también cedió por penales la corona de la Copa Venezuela. “Era uno de los rivales que queríamos evitar sobre todo por el tema país que se está viviendo allá, es complicado la logística de los vuelos, es un viaje pesado; ya lo vimos con la U en la Libertadores, utiliza el factor climático de local, será difícil, pero queremos ganar a toda costa”, revelan en la interna acerera.
El equipo granate cambió su forma en relación al que jugó ante la U en el primer semestre: Daniel Farías —hermano de César, ex seleccionador— reemplazó a Daniel Merino y sumó a un jugador influyente como Yohandry Orozco, armador con pasado en la “Vinotinto”. “Pasó de las transiciones, de un estilo más áspero, a jugar más con tenencia y lírico”, revela un testigo.
Si clasifica, Huachipato chocará ante el ganador de la llave entre Sporting Cristal y 2 de Mayo o Alianza Lima.
La Copa Sudamericana sorteó las parejas preliminares: Universidad Chile chocará ante Palestino y Cobresal con Audax Italiano, con localía para los azules y mineros.
El “Chuncho” podría utilizar en el Estadio Nacional el 4 de marzo, porque los únicos conciertos agendados por esos días son de la banda AC/DC, el 11 y 15 de marzo. La U aún debe purgar cinco partidos sin público, de acuerdo a su sanción tras lo sucedido en Avellaneda.
Cobresal no puede utilizar El Salvador por las luminarias y el cuerpo técnico desea jugar en Calama, pero el club también consultó por Coquimbo y Rancagua. “Al club le convenía ser visitante, porque recibía US$ 250 mil y el local 225 mil, y el viaje significará gasto”, revelan en el mineral.
Claudio Herrera De La Fuente
es redactor de Deportes El Mercurio, especializado en fútbol y en atletismo de fondo, especialmente en maratón y pruebas de ultradistancia, con más de 20 años de experiencia en periodismo escrito.







