El Gran Premio de Austria se definió por centímetros.

La 11ª carrera del calendario en la Fórmula Uno ratificó que el mayor espectáculo en las pistas lo ofrece la batalla interna de McLaren.

Hace dos semanas, en Canadá, Lando Norris impactó a su coequipo al precipitarse en un adelantamiento. Y en el circuito de Spielberg, Oscar Piastri estuvo a punto de hacer lo mismo.

Desde la pole position, Norris se apresuró en bloquear la arremetida de Charles Leclerc (Ferrari), quien arrancaba segundo, para permitir el paso de Piastri y asegurar el 1-2 de los anaranjados desde la primera curva. “Lando me cerró la puerta y se la abrió a Oscar. De todos modos eran demasiado rápidos como para mantener ese segundo lugar”, se conformó el monegasco.

A partir de ahí, todo fue color papaya en la lucha por el liderato. Los conductores de la escudería de Woking presionaron hasta el límite: Piastri logró adelantar a Norris, pero el británico recuperó la posición rápidamente. En el vigésimo giro, el australiano se lanzó por el interior de la cuarta curva y estiró la frenada hasta el límite, arriesgando con un posible impacto entre ambos que no se produjo por un pelo, con bloqueo de neumáticos incluido.

Desde boxes frenaron la disputa llamando primero al británico al cambio de neumáticos, para asegurar que recuperara el liderato tras las demás detenciones.

Porque en la pista no hay más rivales para McLaren. Detrás de ellos, en Ferrari celebraron la tercera y cuarta posición que alcanzaron sus pilotos. “Llegamos a nuestro máximo, aunque aún no es suficiente”, comentó Leclerc, mientras que Lewis Hamilton destacó que “es un gran progreso para nosotros, todos en el equipo estuvieron mucho más tranquilos y metódicos este fin de semana”.

“Tuvimos una gran batalla, fue estresante, complicada, calurosa y agotadora , pero también divertida. Me da mucha confianza”, reveló Norris, mientras que Piastri comentó que “el ritmo que mantuvimos mientras competimos entre nosotros fue impresionante. Estamos aquí para competir por las victorias, podría haber hecho un mejor trabajo cuando me puse por delante pero fue una buena batalla. Un poco al límite”.

La carrera en Spielberg también estuvo marcada por el choque entre Kimi Antonelli (Mercedes) y Max Verstappen (Red Bull), quienes abandonaron en la primera vuelta tras un impacto del italiano que destrozó ambos monoplazas.

El debutante de disculpó en el acto con el tetracampeón, por no controlar la frenada: “Sabía que no tendría espacio, pero cuando pisé el freno bloqueé la rueda trasera. Perdí el auto, simplemente no lo pude detener y golpeé a Max. Lo siento por él y por el equipo”, explicó.

“Todos los pilotos han cometido errores así y nadie lo haría a propósito. A veces tienes estos fines de semana”, lo excusó Verstappen, aunque el retiro lo aleja de la batalla por el campeonato. Tras la sólida victoria de McLaren en Austria, Oscar Piastri alcanzó los 216 puntos en la cima de la clasificación, seguido por las 201 unidades de Lando Norris. Con 155, el neerlandés comienza a quedar rezagado en la tercera ubicación.

Como sanción por el incidente, Antonelli arrancará con tres puestos de castigo en el Gran Premio Británico, que se corre este fin de semana.