F-1: El campeón volvió en Imola
Un notable adelantamiento en la salida y un oportuno auto de seguridad virtual impulsaron a Max Verstappen (Red Bull) a su segunda victoria del año, que cortó la racha de tres triunfos seguidos de Oscar Piastri (McLaren).
Las diez escuderías de la Fórmula Uno prepararon un arsenal de actualizaciones para iniciar la gira europea. Al clásico circuito de Imola, en la región italiana de Emilia-Romaña, llegaron nuevos fondos planos, alerones, pontones e incluso el argentino Franco Colapinto (Alpine) que retornó como piloto oficial de la parrilla.
Desde la pole position, Oscar Piastri buscaba un inédito cuarto triunfo consecutivo para un piloto de McLaren. El australiano fue el más rápido en la salida, pero fue adelantado por Max Verstappen (Red Bull) en la entrada de la mítica curva Tamburello. “Me sorprendió, tenía el control pero fue un gran movimiento y frené demasiado pronto”, confesó Piastri.
“Traté de enviarlo por el exterior y funcionó muy bien. Eso desató nuestro ritmo porque una vez que estuvimos adelante pude cuidar mis neumáticos y mantener un muy buen ritmo”, detalló Verstappen.
A partir de dicha maniobra, todo sucedió en favor del tetracampeón neerlandés. McLaren decició enviar temprano a Piastri a los boxes y este lamentó que “tomamos algunas decisiones equivocadas. No fue nuestro mejor domingo, así que hay mucho por mirar y revisar”. Su coequipo Lando Norris se quedó en la pista para presionar a Verstappen, pero nunca pudo recortar distancias.
Y en la vuelta 29 se terminaron de alinear los astros para “Súper Max”: Esteban Ocon (Haas) se quedó estancado en el césped a un costado del circuito y el riesgo de accidentes desató un auto de seguridad virtual, que permitió a la estrella de Red Bull cambiar neumáticos sin perder tiempo extra ni posiciones.
“Fue útil para entrar en boxes y después, incluso con el compuesto duro, nuestro ritmo fue muy fuerte. Gestionamos todo muy bien en la reanudación. Estoy increíblemente orgulloso de todos. Ha sido una semana muy importante para nosotros, el coche ha funcionado muy bien y también toda la ejecución de toda la carrera”, celebró el ganador de la séptima fecha en la F-1.
A diez vueltas de la bandera a cuadros, el retiro de Andrea Kimi Antonelli (Mercedes) desató un auto seguridad que restableció las distancias y amenazó la victoria de Verstappen, pero Piastri no tenía neumáticos para aguantar otra disputa y Norris estaba muy lejos en el tercer puesto. Finalmente el británico terminó adelantando a su compañero y ambos cerraron el podio.
El relanzamiento definitivo permitió maquillar otra pálida actuación de Ferrari. El “Cavallino Rampante” estaba fuera de los puntos pero festejó con Lewis Hamilton en la cuarta posición, su mejor resultado del año. “Había mucha presión sobre nosotros con los problemas que hemos tenido, así que tener una carrera tan fuerte, avanzar y ganar terreno, es una gran sensación”, festejó Hamilton frente a una multitud de más de 200 mil tifosi.
Inmerso en rumores que lo apartan del futuro calendario de la F-1, el estrecho circuito de Imola ofreció un tremendo espectáculo. Este fin de semana, las calles de Mónaco exigirán al máximo la precisión de los conductores del Gran Circo.

Matías García
es colaborador en Deportes El Mercurio. Periodista de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, con experiencia en coberturas y transmisiones deportivas.