La desconocida historia de la familia chilena que compite en el Dakar de Arabia Saudita
Andrés Brabeck-Letmathe, hijo de padre austríaco y madre chilena, participa en la serie Classic, creada en 2021 y que reúne a varios vehículos que han marcado la historia de la prueba. Nicolás, su hermano, está en los UTV. Completa el grupo el patriarca, Peter, quien llegó al más alto nivel como ejecutivo: fue CEO de Nestlé y de la Fórmula Uno.
Para los fanáticos más recalcitrantes del mundo tuerca, la categoría Classic del Dakar es un verdadero deleite. Con autos y camiones fabricados el siglo pasado, muchos se quedan embobados mirando pasar esos diseños que marcaron época.
Uno de ellos es el Mitsubishi número 719, pilotado por Andrés Brabeck-Letmathe. Aunque en la inscripción oficial de la competencia figura como austríaco, el vehículo tiene las banderas del país europeo y de Chile.
¿Por qué? “Mi padre es austríaco y mi mamá es chilena. Todos los hijos nacimos en Chile. Ahora vivo entre Suiza e Inglaterra, por trabajo, tenemos un family office que administra inversiones. Mi señora también es chilena y pasamos la última Navidad en Santiago antes de venirme a Arabia Saudita”, cuenta el piloto.
“Hace varios años que quería participar. Es muy divertido, novedoso, los paisajes son espectaculares, es muy entretenido el manejo”, continúa el competidor de 57 años, quien detalla que “la pasión tuerca es de familia. Mi hermano ha corrido ocho veces el Dakar y ahora lo hace en los UTV. Siempre nos ha gustado la naturaleza, el outdoor, salemos a recorrer en jeep y moto, nos encanta. Para mí es como dar un paso más adelante, algo un poco más desafiante, pero todo parte por nuestro padre”.

Andrés Brabeck-Letmathe compite en el equipo del francés David Casteu, exmotociclista que corrió 12 veces el Dakar. Foto: ASO.
El aludido es Peter Brabeck-Letmathe, quien estaciona otro Mitsubishi al lado del de Andrés. Con 78 años, el austríaco cumple su segunda participación en el Dakar Classic. En los años 60 entró a trabajar a Nestlé, durante más de una década fue director de la división de la compañía en Chile, donde formó su familia, y llegó a ser el CEO de la empresa entre 1997 y 2008.
Pero su vida empresarial fue de la mano con el mundo tuerca, tanto que en 2012 fue designado director del consejo de la Fórmula Uno, cargo que ocupó hasta que Liberty Media tomó el control de la máxima categoría del automovilismo.
“Cuando uno tiene esta pasión, pasan estas cosas. Al principio con la moto, pero ahora con la edad que tengo solo puedo estar en auto y en la categoría clásica, pero el gusto por el desierto y la mecánica permanecen siempre. El Dakar es una gran aventura, es el rally más difícil del mundo. Nos levantamos antes de las 4 de la mañana para competir y hay momentos duros como ayer (martes), con la lluvia, la crecida del río, pinchamos neumático y estuvimos tirados hasta las 4 de la tarde”, comenta el patriarca de la familia.
“He pasado años maravillosos en Chile, pero también fueron difíciles, porque fue la época de Salvador Allende y el comienzo de Augusto Pinochet... Pero me quedó lo más importante, mi familia y muchos amigos con los que seguimos teniendo contacto, tratamos de ir por lo menos una vez al año”, añade Brabeck-Letmathe.

Nicolás Brabeck-Letmathe tiene experiencia en el Dakar: compitió por primera vez en 2014. En la foto, en acción en su UTV de la serie T4. Foto: DPPI
Las máquinas que usan están pintadas para homenajear a dos históricos el Dakar: la del progenitor, fabricada en 1998, lleva los colores que usó Jutta Kleinschmidt en 2001, cuando se convirtió en la única mujer en ganar la competencia, y la del hijo (de 1999) está decorada como la que lució Luc Alphand cuando triunfó en 2006.
“Alphand está acá trabajando para la TV francesa y se nos acercó hace unos días para agradecer el homenaje, le gustó mucho”, asegura Andrés.
—¿Conoce a los otros chilenos que están en el Dakar?
“Poco. A ‘Chaleco’ López lo conocemos bien. También al chico (José Ignacio) Cornejo, porque mi hermano se preparó para sus Dakar en moto con el papá (José), él lo entrenó en navegación. Él es el que tiene más relación, por su experiencia”.
El mencionado Nicolás, quien corre en la serie de UTV (T4), ya completa ocho participaciones en la prueba, cinco en motos y tres en la su categoría actual. También inscrito con bandera austríaca, cuenta que “nací en Chile, pero también he vivido en Europa y Latinoamérica, por trabajo. Ahora estoy en Suiza”.
Sobre su llegada al Dakar, en 2014, explica que “me entrenó ‘Pepe’ Cornejo, el papá de José Ignacio, un año antes de que debutara. Es una familia muy buena onda. Ver ahora a ‘Nacho’ en Honda es increíble, un cabro simpático, humilde y que se lleva bien con todo el mundo. Con ‘Chaleco’ hablo harto, no puedo decir que somos amigos, pero sí nos conocemos. También saludo a Casale y Quintanilla, a quienes conozco menos, pero obviamente es otro nivel, ellos son profesionales y de los mejores en lo que hacen. Yo soy un amateur que solo trata de llegar a la meta”.
El menor de los Brabeck-Letmathe, de 45 años, dice que “es un sueño que estén todos los hombres de la familia. Yo empecé a pensar en esta carrera desde que mi papá me llevó a Libia en 1997, siempre hablaba del Dakar hasta que un día mi señora me dijo ‘deja de soñar y anda’. Ahora está arrepentida, jajajá. Mi papá empezó acompañándome en la asistencia, hace dos años se animó al Classic y ahora está mi hermano. Para nosotros es un orgullo llevar la bandera chilena en nuestro auto”.

Alejandro Cisternas
es coordinador periodístico de Deportes El Mercurio. Periodista titulado en la PUC, ha cubierto eventos nacionales e internacionales de fútbol, automovilismo, golf, básquetbol, tenis y otras disciplinas.