Colo Colo ve cada vez más lejos el sueño internacional
El elenco “tomatero” privó a los albos de una victoria que parecía cómoda al remontar un 2-0 en el Estadio Nacional. El Cacique quedó a seis puntos del último cupo en la Copa Sudamericana 2026.
La tarde no era una taza de leche, pero Colo Colo tenía bien encaminada la tarea en Ñuñoa, donde tuvo que hacer de local por el mal estado del césped del Monumental, hasta que Daniel Castro sacó una corrida de marca registrada y puso el descuento que le dio inesperada emoción al duelo entre albos y Limache.
Fue un cotejo trabado, muy interrumpido, que el Cacique ganaba gracias a la luminosa jornada de Lucas Cepeda, Claudio Aquino y Marcos Bolados, que tenían al frente un oponente que apostaba prácticamente todo al contragolpe, incapaz de pelear la posesión y tomar la iniciativa.
La apertura de la cuenta del Cacique llegó rápido, gracias a un córner que terminó con un cabezazo de Aquino en el segundo palo, libre de todo marca, descuido que desató la furia del DT Víctor Rivero.
El panorama se oscureció más con la expulsión de Yonathan Andía por un destemplada entrada sobre Bolados (33’), pero la ventaja númerica le duró poco al Cacique pues el juez Diego Flores, de gatillo fácil, le mostró la doble amarilla a Sebastián Vegas (38’), dejando a ambos equipos con diez elementos y dándole otra vida al conjunto del Marga Marga.
El segundo tiempo comenzó con un Colo Colo dominante, con el regreso de Javier Correa enchufado luego de un mes y medio sin jugar, los desbordes de Cepeda y el 2-0 de este último, a los 69 minutos, luego de capturar un mal despeje de Alfonso Parot.
El elenco popular trató de bajar el ritmo y el técnico Fernando Ortiz incluso ordenó el debut en Primera de Víctor Campos, reemplazando a Mauricio Isla, lo que probó ser un error porque por ese costado se gestaron las jugadas que cambiaron el destino del cotejo.
Vino el pique endiablado de “Popín”, cuyo gol fue inicialmente anulado por offside, pero luego corregido por el VAR. Minutos después el videoarbitraje detuvo el juego para analizar un supuesto penal sobre Arturo Vidal, y el partido parecía morir con la victoria ajustada de los albos, hasta que Luis Felipe Hernández metió la cabeza entre los centrales y acertó un cabezazo que dejó heladas a más de 20 mil personas en Ñuñoa.
El año del Centenario está próximo a apuntar otra decepción: la línea de corte para clasificar a la Copa Sudamericana está a seis puntos y solo quedan quince en disputa.
ORTIZ: “VEO UNA EVOLUCIÓN”
“Hay mucha frustración porque se nos escapan dos puntos importantísimos. Tenemos que trabajar detalles, mantener la intensidad del primer tiempo en el segundo (...) Nos apresuramos en muchas ocasiones donde pudimos concretar, donde hubo mala toma de decisiones. El tiempo se acorta para tratar de clasificar a la Copa, todavía tenemos partidos por delante para sumar”, dijo Fernando Ortiz, DT albo.
Apenas una victoria registra el ciclo del entrenador, pero este se mantiene optimista. “Me preocuparía si el equipo no tuviera ocasiones. Los pequeños detalles nos cuestan goles, pero veo una evolución, por momentos veo el equipo que quiero, el equipo que propone”.
En tanto, el “tomatero” Daniel Castro celebró el 2-2. “Fue un partido difícil. Íbamos perdiendo 2-0 y lo empatamos. Estos son los huevos que tenemos que tener, quedan cinco fechas para salvarnos. Este punto es de todos”.
Andrés Solervicens
es coordinador de Deportes El Mercurio. Periodista de la Universidad de Chile, trabaja desde 2000 en "El Mercurio". Fue enviado especial del diario a los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 y Río de Janeiro 2016, así como a Juegos Panamericanos, Grand Slams de tenis y fechas del Mundial de Rally, entre otros.







