La crisis social y política que afecta a Colombia obliga a suspender partidos internacionales y aumenta las dudas sobre la Copa América
Orlando Ascencio, periodista de El Tiempo de Bogotá, dice, con voz quebrada, que se viven días “muy, muy complicados” en Colombia. “En Cali la situación es más dura que en otras ciudades. Hemos visto hechos de violencia muy rudos, en los últimos días hubo uso de fuerza excesiva por parte de la policía y asesinato de civiles por parte del Escuadrón Móvil Antidisturbios… Las marchas no ceden. Al paro del jueves pasado, por la reforma tributaria, se sumó otro porque quieren frenar la reforma de la salud, y también hay protestas de taxistas y camioneros”, detalla.
El contexto, desgraciado, obligó a la Conmebol a tomar medidas drásticas. Durante la jornada suspendió los compromisos por la Copa Libertadores entre Independiente de Santa Fe-River Plate y Atlético Nacional-Argentinos Juniors, además del duelo por la Sudamericana de La Equidad-Lanús.
Todos se disputarán en Asunción este jueves.
“Por ahora se mantiene el que este jueves van a disputar Junior con Fluminense, en Barranquilla, porque la ciudad está relativamente tranquila. Sin embargo, la barra brava del Junior advirtió que no quiere que el partido se juegue y adelantó que no dejarán salir al equipo al estadio Metropolitano”, profundiza Ascencio.
Más allá del urgente cambio de planes, en Conmebol miran un
poco más allá: Colombia es uno de los organizadores de
Y Chile fue testigo: en 2019 albergaría la final de
“Completamos siete días de protestas. Hay un descontento
social amplio y ha sido muy complejo el tema de violación de derechos humanos.
Algunas ciudades están paralizadas. Habrá que esperar cómo avanza la protesta y
los posibles diálogos. Pero de momento el panorama es complicado. Hay muchos
puntos que generan descontento social, así que esto todavía puede demorar un
poco”, asegura el periodista
A 40 días del torneo, el ministro del Deporte de Colombia, Ernesto
Lucena, informó que se comunicó con el presidente de la Conmebol,
“Desde el punto de vista técnico y de infraestructura, Colombia está listo para hacer la Copa América solo. No sería el mejor escenario en este momento por razones de pandemia, pero la orden del presidente Duque es que trabajemos con el Ministerio de Salud y la Conmebol para mirar cuáles serían las otras sedes, si Argentina llega a renunciar”, apuntó el ministro, en alusión a una versión de prensa que circuló la semana pasada sobre una eventual deserción trasandina.
De todas maneras, hay un plan alternativo. Para la Conmebol, el certamen se juega y no hay opción de que se suspenda. “Hay gente que ha invertido mucho dinero adquiriendo los derechos a nivel internacional, con empresas que son patrocinadoras y si se cancela profundizaría el desastre económico en las finanzas del fútbol sudamericano”, dice el periodista argentino Juan José Buscalía.
¿Y si no es Colombia? La opción de Paraguay está en mente. El Defensores del Chaco, más las canchas de Libertad, de Cerro Porteño y de Sol de América aparecen como los escenarios de reemplazo.
“Colombia ha querido realizar la Copa, lo que no sabemos es
si las circunstancias van a permitir que se juegue... En Paraguay se jugaría
es redactor de Deportes El Mercurio y especializado en fútbol. Con más de 25 años de carrera, cubrió la Copa Confederaciones de Rusia 2017, la Copa América de Chile 2015, copas Libertadores, sorteos y partidos clasificatorios a la Copa del Mundo.