En el TG Garden, la casa de Boston Celtics, con capacidad para 18.624 espectadores, arrancaron las finales de la Conferencia Este de la NBA. Por primera vez en la historia, la liga de básquetbol estadounidense tendrá un sexto campeón distinto en seis temporadas, luego que Minnesota Timberwolves eliminara en el séptimo y último partido a Denver Nuggets, del MVP Nikola Jokic.

“No están los que uno podía imaginar: Indiana Pacers no era un equipo por el que se apostaba, y Dallas Mavericks tuvo una temporada con muchas irregularidades y que no generaba muchas expectativas, pero está haciendo unos playoffs extraordinarios”, menciona el analista internacional de ESPN, Alejandro Pérez.

Indiana Pacers disputará la final del Este tras una década de ausencia en estas instancias. El equipo liderado por Tyrese Haliburton se impuso por 21 puntos en el séptimo juego a New York Knicks en el Madison Square Garden.

La noche del martes, en el primer juego, Boston se impuso en un duelo que requirió tiempo extra. Fue empate a 117 en el tiempo regular, y luego el cuadro local dominó por 133 a 128.

“Va ser muy determinante el tema físico, Boston viene muy descansado: ganó las dos series 4-1, además con mucha autoridad. Indiana viene de una serie muy larga, más allá de los siete partidos, por lo físico y ruda. La llave Knicks- Pacers recordó los cruces de los 90. Fue extremadamente física y vamos a ver cómo quedaron Haliburton y todo el equipo”, afirma el periodista especialista en básquetbol Víctor Alex Flores.

Con el mejor registro de la temporada (64-18) y un paso cómodo en los playoffs (4-1 ganó sus primeras series), Boston no solo es favorito en la final del Este, sino también para obtener su título número 18 de la historia.

“A Boston da gusto verlo jugar, porque tiene un básquet bien moderno, haciendo uso de lo que hoy se valora mucho, como los tiros de tres puntos, y dentro de un juego no alocado por momentos juegan los cinco abiertos, sin referencia interior en ataque. Defender a Boston es muy difícil, porque tiene muchos jugadores que puedan anotar. Es el gran momento de Boston para coronar una temporada que lo tiene con un rendimiento bravísimo desde que comenzó”, apunta Alejandro Pérez.

Víctor Alex Flores se suma: “Boston tiene su gran oportunidad de salir campeón. El año 2022 ya estuvo en la final, siempre está tocando la puerta. Tiene dos jugadores como (Jaylen) Brown y (Jayson) Tatum, que además con (Jue) Holiday tiene la mejor media cancha ofensiva de la liga. Tiene jugadores de rol muy consistentes, son durísimos. Esta es la gran oportunidad de Boston”.

En el Oeste, el factor descanso no tan será determinante en el arranque de la final: Dallas Mavericks cerró su paso en seis partidos la noche del sábado, mientras los Timberwolves lo hicieron la noche anterior en casa de Denver.

“La veo muy pareja, porque Dallas con Luka Doncic y Kyrie Irving demostró en los playoffs estar bien. Es una llave más incierta, donde Minnesota tiene la ventaja de campo y llega con el envión de eliminar al último campeón jugando a gran nivel físico y atlético”, menciona el argentino Pérez.

“La gran sorpresa, entre comillas, es Minnesota, pero Jokic lo dijo muy bien: ‘No puede ser sorpresa un equipo con dos All-Star (Anthony Edwards y Karl-Anthony Towns), el mejor hombre defensivo (Rudy Gobert) y el mejor sexto hombre del año (Naz Reid)’. Minnesota se construyó para jugar finales y está preparado para estas instancias”, agrega Flores.

La serie entre Timberwolves y Mavericks empieza la noche de este miércoles en la casa de los primeros, el Target Center, con capacidad de 20.500 espectadores.