En el camino que llega al clubhouse del campo de golf Santa María, en Panamá, hay varios carteles que honran a los ganadores anteriores del Latin America Amateur Championship (LAAC). Tres chilenos aparecen levantando el trofeo: Matías Domínguez (monarca de 2015), Toto Gana (2017) y Joaquín Niemann (2018).

El equipo nacional en el LAAC 2024 no es indiferente al homenaje. Lukas y Simón Roessler, sin ir más lejos, son hermanos de Gana. Para ellos y el resto de la delegación (Vicente Encina, Facundo Moraga y Martín Cancino), lo que sus antecesores lograron en el torneo es un sueño luminoso como pocos. Porque el premio es el más suculento al que puede optar un especialista aficionado: imponerse en el LAAC entrega un cupo a tres de los cuatro majors del golf mundial, incluyendo el más apetecido y selectivo de todos, el Masters de Augusta.

“Mi objetivo es ganar, sin dudas, poder jugar el Masters, el Open y el US Open es lo mejor que hay. Vengo con muchas ganas de competir con grandes jugadores y obtener un buen resultado”; dice Lukas Roessler, quien fue el mejor chileno en el Sudamericano disputado en Bogotá la semana pasada: fue décimo.

“Tuve un gran primer día, en que fui puntero, pero después no jugué como quería. De todos modos ser top ten en un field tan competitivo me dejó buenas sensaciones”, agregó Roessler, de 19 años. Él y su hermano gemelo Simon ya conocen Augusta eso sí: fueron los caddies de Gana en el tradicional torneo par 3 del Masters de 2017.

Otro que viene de familia de golfistas es Vicente Encina, papudano de 21 años que está 318° en el ranking mundial y aparece junto a Martín Cancino en la foto principal de este artículo.

El tío abuelo de Vicente es Guillermo Encina, seis veces ganador del Abierto de Chile y campeón y ex top ten en el Senior Tour Europeo. “Es un orgullo su carrera. Ahora he compartido con él, pero no es dar tips o consejos, pero está presente. Sé que todos en Papudo están pendientes de lo que pueda hacer acá”, dice Encina, quien califica el campo del Club de Golf Santa María como un “canchón”. “Está espectacular, tiene harta agua y hay que tener cuidado de caer siempre en el fairway. Hay harta humedad y hay que mantenerse bien hidratado también. En lo personal, espero darlo todo para ganar, pero siempre tranquilo y enfocado. Que tres chilenos hayan ganado el LAAC antes es una motivación adicional”, añade.

El chileno mejor ubicado en el escalafón amateur es Facundo Moraga, 313° gracias a sus victorias en la lista de aficionados de los abiertos de Cachagua, Sport Francés y Brisas de Chicureo. “Clasificar a los tres torneos es un sueño increíble y todos queremos lograrlo. Hace rato que vengo jugando bien y mi objetivo es seguir ganando torneos”, destaca Moraga, quien coincide con Encina en alabar el campo. “Está muy bueno, con harta agua en los alrededores. Es importante llegar siempre al fairway”, enfatiza.

Para Roessler, son características que le gustan. “El rough está alto en varios hoyos y hay que tener cuidado, pero los fairways son anchos y eso me acomoda. Lo importante es estar finos en los segundos tiros, porque los greens son chicos y muy ondulados”, advierte.

El field completo (son 108 jugadores de 28 países) tendrá que vérselas no solo con los traicioneros greens, sino con una humedad que dispara los termómetros y pondrá a prueba a los competidores. Para este jueves está pronosticada una máxima de 34 grados, con una sensación térmica de 39°. Moraga, Cancino y Lukas Roessler, que comenzarán su recorrido después del mediodía, se llevarán la peor parte.