No es frecuente que Colo Colo pierda dos partidos seguidos en la competencia local. Y menos, que con ocho jornadas disputadas esté a 10 cuerpos del puntero, Universidad de Chile.

La derrota ante Cobreloa pegó duro, tanto que Arturo Vidal dijo: “A la U no la tenemos ni en mente, te lo digo ya. No pensamos en la U. Quedan 22 partidos, son 66 puntos. Mira todo lo que queda”.

Más sereno, Ricardo Dabrowski, campeón de América con la camiseta blanca, analizó: “El problema es si los inconvenientes que ha tenido los puede solucionar o no. Se ha reiterado que le falta contundencia y efectividad, porque ha sido dominador del juego, principalmente de local. Cuando eso se paga con una derrota, hay un replanteo. No tiene hombres-gol netos, no cuenta con delanteros que tengan efectividad; en la elaboración anda fantástico, pero cuando no hay contundencia, el rival llega, convierte y gana, va generando la desconfianza”.

“La U viene jugando bien; el nivel de los equipos ha subido mucho, es difícil jugar contra el resto. Antiguamente era más fácil, ahora se ha equiparado. Diez puntos es mucha diferencia, casi cuatro partidos. Y por cómo está jugando, porque no está jugando bien, no tenemos una seguridad de triunfos como para alcanzar a la U”, sostiene Leonel Herrera, integrante del famoso Colo Colo 1973.

Un tema que ha generado debate es la decisión del técnico Jorge Almirón, quien priorizó el torneo continental, una medida que ya tomó como estratega de Boca Juniors. “Durante el segundo semestre de 2023, en paralelo a los cruces directos de la Libertadores, se disputó la Copa de la Liga, con 14 partidos en dos fases y los cuatro primeros accediendo a los cuartos de final. Boca no accedió. En instancias decisivas de la Libertadores ponía los titulares, salvo un caso puntual, ante River Plate. Apostó todos los cañones a la copa. Y así fue como logró llegar a la final sin ganar ningún partido y perdiendo el título con Fluminense”, detalla Alejandro Lemos, periodista del periódico “El Intransigente”, de Buenos Aires.

“No concuerdo con esa disposición de regalar algunos partidos del torneo local. No soy partidario de dar descanso. Si preguntas, jugador por jugador, todos van a responder lo mismo: que prefieren jugar antes que entrenar. Es regalar los puntos y cuando reaccione será demasiado tarde”, cree Herrera.

El “Polaco” modera: “En los tiempos que corren no debería ser problema jugar seguido, salvo una circunstancia como una molestia o una sobrecarga o muscular. Hoy la medicina tiene elementos que en mi época no existían. Si no está 10 puntos físicamente, pero mentalmente perfecto, puedes sobrellevar la carga de partidos. Si mentalmente no está fuerte… Es una constante: los equipos son más flojos de cabeza. Se ve en la sociedad, con una juventud con niveles de frustración muy bajos. Uno ve que los jóvenes pierden y se refugian en los celulares, en las redes sociales, tratan de evadir. No es fácil perder y ver a la hinchada, al vecino, los amigos o los familiares, cuesta andar en la calle. No es fácil. Antes era mentalmente más duro”.

El tema clave es qué pasará con Colo Colo si cede puntos ante la Católica. “Quedarían muy pocas posibilidades, porque aparte de la U están Everton, Coquimbo, Iquique, todos muy parejos. Si nos gana la UC habría que pensar en abandonar el campeonato nacional, porque se tendrían que dar muchos resultados”, asegura el exdefensa.

“Es tan relativo”, sostiene Dabrowski. “A Colo Colo ir en la punta no le pesa; en España, el Girona estuvo arriba, rompió marcas, pero ahora el líder es Real Madrid. El equipo grande, por un asunto de presión, pasó arriba. ¿Colo Colo puede salir de dónde está? Puede salir, no tiene menos plantel que el resto. Pero cuando te agobian los resultados, pesa la confianza, la autoestima y eso influye en el juego”.