Fue en marzo de este año, cuando un posteo del tenista argentino Federico Gómez (144º), de 28 años, impactó al mundo. “Han sido los seis meses más duros que me han tocado vivir como ser humano”, escribió el trasandino en sus redes sociales, justo cuando empezaba a escalar en el ranking y a conseguir su mejor ranking histórico.

“Convivir con pensamientos de dejar el tenis por completo, de realmente cuestionarme si todo esto realmente vale la pena y hasta incluso en reiteradas ocasiones pensamientos suicidas de no quere vivir más y dejar este mundo (...) Me cuesta mucho escribir todo esto sin llorar a más no poder”, se leía en su emotiva declaración.

Su desahogo remeció al tenis. Incluso Novak Djokovic lo invitó a charlar y entrenar juntos en el Masters 1000 de Miami —donde no pasó la clasificación— y también en Roland Garros. “Estoy para ayudarlo de cualquier forma”, dijo el serbio en marzo, luego de compartir en Florida.

En París tampoco logró sortear la fase previa, tras perder ante el italiano Giulio Zeppieri (310º), pero recibió una tarjeta de lucky loser dada la gran cantidad de retiros y disputó este martes su primer partido en un Grand Slam.

Y ganó. Gómez superó al estadounidense Aleksandar Kovacevic (76º) por 4-6, 6-4, 6-4 y 6-1 y festejó su triunfo entre abrazos, risas y lágrimas.

“Nunca en mi vida me temblaron tanto las piernas como en el peloteo. Sentía la necesidad de rendir, de llegar a conseguir el resultado”, contó el argentino, quien por cierto recordó los momentos que debió enfrentar a comienzos de 2025.

“Felicidad hermosa de tener a toda la gente acá. Mi equipo, gente amiga que venía al torneo y se dio la casualidad de que pude jugar hoy. Estoy muy agradecido de toda la gente que me bancó en los momentos duros. No fueron meses fáciles para mí, pero ellos me bancaron, me dieron fuerzas y hoy estoy aquí”, reconoció.

Su historia continúa este jueves, cuando enfrente al británico Cameron Norrie (81º, pero extop ten), pero pase lo que pase, Gómez ya ganó en París.

En general, fue una jornada tranquila para los principales favoritos en París. Novak Djokovic (6º) no sudó demasiado para vencer al estadounidense Mackenzie McDonald (98º) por un triple 6-3, en un juego en el que su mayor desafío fue el viento que levantaba arcilla y molestaba el juego.

También ganaron sin mayores apuros Alexander Zverev (3º) y Jack Draper (5º), mientras que el pupilo de Nicolás Massú, el polaco Hubert Hurkacz (28º), quedó eliminado al perder en sets corridos con la nueva sensación del tenis sudamericano, el brasileño Joao Fonseca (65º).

La derrota más resonante fue la caída del ruso Daniil Medvedev (11º), despachado por el británico Cameron Norrie (81º), que lo venció por 7-5, 6-3, 4-6, 1-6 y 7-5 en casi cuatro horas de batalla.

“Honestamente, podría saltarme la temporada de arcilla el próximo año. A la mier... la arcilla. Cada torneo es muy diferente. Roma y Madrid son muy distintos a Roland Garros, la arcilla, las pelotas, todo. No encontré algo que funcionara bien”, se quejó Medvedev.

En tanto, desde las 5:00 de la madrugada del miércoles, Alejandro Tabilo (61º) disputa su partido de segunda ronda ante el australiano Alexei Popyrin (25º), buscando seguir alimentando su mejor actuación en el Grand Slam galo.

Más tarde, Nicolás Jarry (210º en la modalidad) y el brasileño Marcelo Demoliner (91º) disputarán su partido de primera ronda de dobles, enfrentando a la dupla del neerlandés Sander Arends (37º) y el británico Luke Johnson (42º).