Una selección casi condenada desafía al campeón del mundo
La Roja padece los estertores de una eliminatoria que la tiene colista. Ahora el escollo es Argentina, en Ñuñoa. “Chile debe cortar el circuito de su oponente en el medio y evitar que la pelota le llegue limpia a Messi”, sugiere Roberto Sensini. “Es un rival casi imposible”, coinciden los especialistas. El mapa de un partido cuya diferencia objetiva son 21 puntos.
El punto de inicio de la selección chilena fue hace 115 años y el rival fue el mismo de esta noche en el Estadio Nacional. El gol inicial de George Simmons para la visita en la cancha de Belgrano Athetic Club en Buenos Aires alcanzó a entibiar una jornada que terminó 3-1 a favor de los trasandinos. Casi un presagio del derrotero que se escribió después. Hoy, en otro contexto y con las diferencias estiradas, el representativo nacional se cuelga de un batacazo para frenar su agonía rumbo el Mundial de 2026.
“Históricamente Argentina ha sido complicado, incluso cuando se le ganó (2008) fue sufriendo hasta la última jugada. La mejor versión de la ‘Generación Dorada’ tampoco le ganó en la cancha, lo logró en penales, y en los últimos años ellos establecieron una diferencia grande. ¿En qué confiar? Es difícil, a nivel individual está (Lucas) Cepeda en un nivel alto, (Darío) Osorio si se mete en la cabeza que puede ser un jugador de nivel debería aportar mucho, (Guillermo) Maripán responde, (Rodrigo) Echeverría tiene personalidad, (Felipe) Loyola llega en un buen momento, pero para aspirar a sacarle puntos a estos rivales debes tener un rendimiento colectivo muy alto, funcionar como equipo a tope. Viene Messi, que es el mejor del mundo, y si no juega todo el partido, entrará (Franco) Mastantuono, que la ‘rompe’ en River”, descifra Hugo Droguett, quien participó en la única victoria sobre los albicelestes en el recuento, hace 17 años, en Ñuñoa.
“Chile tiene que tratar de cortar el circuito de Argentina en el mediocampo y que la pelota no le llegue limpia a Messi. ‘Leo’ no pierde ese vicio de jugar bien y hacer goles, va a cumplir 38 años, y por ahí se mide un poco más, pero sigue siendo determinante”, expone Roberto Sensini, mundialista trasandino.
El analista Fabián Godoy refuerza la tesis sobre la fortaleza de la línea media de la escuadra de Lionel Scaloni. “Argentina nunca había sumado tantas bajas juntas en la eliminatoria, pero tiene un técnico coherente y la idea no se modificará: va a apostar al fútbol asociativo, un equipo que domina el juego a partir de la pelota. Está la posibilidad que tengan minutos ‘Nico’ Paz, Mastantuono, (Thiago) Almada, jugadores de ese perfil”, sostiene.
? Los últimos dos antecedentes inmediatos dan cuenta de la supremacía en esa zona: en el duelo de ida del premundial y en la Copa América 2024, Argentina cifró su dominio en la posesión en un 65 y 63%, respectivamente. Y Chile lo padeció en la forma y en el resultado.
“Argentina es potencia mundial, un equipo de otra envergadura, esa debe justamente ser la motivación de Chile. Es un partido muy dispar por el momento de ambos equipos y también por el nivel individual. Está Messi que participa lo justo para desnivelar y el equipo juega mucho para él. La diferencia actual está reflejada en la tabla de posiciones (21 puntos)”, advierte Luis Fuentes, quien jugó en el 0-0 santiaguino rumbo a Alemania 2006.
Godoy se detiene en un rasgo que desmejora a la Roja. “A Chile con (Ricardo) Gareca le falta fuerza arriba y no hablo tanto de no tener un centrodelantero definido, es un equipo que no tiene gol, tiene esa dificultad”, apunta.
El “Tigre” Gareca intentó explicar su decisión de ignorar a Eduardo Vargas y Fernando Zampedri en la convocatoria. “Hay que enfocarse en cuál es el futuro ‘9’ de Chile”, deslizó, al mismo tiempo que confirmaba a Alexis Sánchez (36 años) como piloto de ataque, donde deberá fajarse con Cristian Romero y Leonardo Balerdi, su excompañero en Marsella.
Scaloni, recatado, opta por mantener en alerta a su equipo valorando eventuales fortalezas del rival. “Como juegan siempre los equipos de Ricardo, han hecho partidos buenos, no merecieron perder con Paraguay, hicieron un partidazo. Hacen buen fútbol, pregonan el ataque, necesitan los puntos y son partidos ‘chivos’”, soltó en Ezeiza ante de viajar a Santiago, donde la delegación del monarca se instaló anoche.
Sensini, que dirigió en Chile, a la distancia entrega su diagnóstico de la Roja: “Le ha costado la transición generacional, es duro reemplazar a un grupo de jugadores que sostuvieron al equipo durante 10 años, los que vienen atrás se tienen que acomodar y eso lleva tiempo. Un buen jugador, como tiene muchos la selección, no es lo mismo que un consagrado”.

Claudio Herrera De La Fuente
es redactor de Deportes El Mercurio, especializado en fútbol y en atletismo de fondo, especialmente en maratón y pruebas de ultradistancia, con más de 20 años de experiencia en periodismo escrito.