El futbolista Ignacio Jara relata sus días contagiado de covid-19 en Brasil
El jugador chileno del Goiás contrajo el virus, aunque es asintomático. Su club ya suma 13 enfermos. Hace dos semanas, sin ir tan lejos, se tuvo que suspender el choque con Sao Paulo minutos antes de la brega por una decena de positivos. “Fue responsabilidad del laboratorio, porque después que nos tomamos los exámenes nos dijeron que los resultados no eran seguros y tuvimos que hacerlos de nuevo, y los resultados estuvieron el día del partido”, detalla el futbolista.
Goiás totaliza 13 contagiados por covid-19 y en la lista del equipo brasileño está el futbolista chileno Ignacio Jara. El extremo de 23 años, que partió a préstamo desde Cobreloa, contrajo el virus en el viaje a Sao Paulo para enfrentar a Palmeiras —disputado el 15 de agosto— y fue apartado de los entrenamientos para cumplir con el aislamiento en su casa. Eso sí, es asintomático.
“Me siento súper bien, he descansado y bebido mucha agua, estoy en mi casa, junto a mi pareja y mi hija. Duermo en otro dormitorio, trato de estar separado de ellas, y si estamos en la misma pieza, me protejo siempre con mascarilla. Afortunadamente ellas se hicieron el examen y arrojaron negativo”, detalla Jara.
Su contagio no es el primero en el club de Goiânia. Hace dos semanas debían enfrentar a Sao Paulo y el partido tuvo que ser suspendido minutos antes del arranque por una docena de enfermos. El chileno, que estaba considerado en la banca, detalla que "fue responsabilidad del laboratorio, porque nos hicimos los exámenes correspondientes y al otro día nos escriben que los resultados no eran seguros, que había ocurrido un error. Entonces tuvimos que hacerlos de nuevo y los resultados llegaron el día del partido, algo increíble. Ahora se enfermaron dos compañeros más, pero ninguno ha tenido complicaciones. Son pocos los que no se han contagiado en el equipo”. Eso sí, el formado en Cobreloa anticipa que podría volver a entrenar entre jueves y viernes tras realizarse otro examen.
Pese a todos los contagios, el club volvió a jugar con normalidad.
—¿Se mantuvo todo este tiempo en Brasil?
“Sí, porque mi pareja estaba embarazada, entonces en ese momento era mucho más complicado estar viajando. Mi hija nació acá, tiene tres meses, y este tiempo nos sirvió mucho para estar con ella. Es un poco complicado, estamos solos y en otro país. Fue un cambio brusco”.

Ignacio Jara fue una de las figuras en la temporada pasada de Cobreloa. El jugador de Cerro Navia anotó 11 tantos con los "Zorros del Desierto". Foto: Photosport
—Su hija nació en plena pandemia.
“Al principio iba a nacer en Chile. Yo llegué acá y estuve dos semanas solo, pero después me di cuenta que la ciudad era buena y que no quería estar así. En Calama estuve muchos años solo, teniendo a mi pareja y a mi familia lejos. Ella se vino, y había que tomar muchas precauciones, porque estaba el riesgo de que podía pasar algo malo en el nacimiento de mi hija. Ahora la estamos disfrutando a concho”.
LA VIDA EN BRASIL
El país sudamericano es uno de los más golpeados por la pandemia del coronavirus. Jara cuenta que en su ciudad la gente es responsable con las medidas sanitarias. “Uno está expuesto, hay gente que tiene que salir a hacer sus cosas diarias. Donde vivo andan todos con mascarillas, preocupados del alcohol gel. La gente ha tomado las precauciones, pero igual hay muchas personas contagiadas. Acá el que más sale soy yo, voy a hacer las compras y a entrenar”, detalla.
En el Brasileirao, el Goiás marcha 15° en la tabla, con apenas un triunfo, un empate y dos derrotas y Jara ha jugado nueve minutos. Pese a ello, el chileno describe el panorama del balompié brasileño.
“El fútbol chileno es de mucha lucha, mucha garra, cerrado, y ahora llegué a uno de mucho toque, de mucha posesión, donde los laterales siempre están pasando. Ahora hay pocos entrenamientos y muchos partidos, entonces hay que estar preparado físicamente, acá es súper intenso, siempre es de ida y vuelta, y los jugadores son técnicamente extraordinarios”.
—¿Cómo se ha sentido en ese escenario?
“Me siento capacitado, porque al principio me costó comunicarme junto a mis compañeros, fue un cambio brusco, ahora estoy más adaptado. Fue un cambio grande para mí llegar a una de las ligas más importantes del mundo, lo que genera el fútbol, donde hay muchos equipos fuertes. Estoy disfrutando el momento, aprendiendo como jugador”.
—En Cobreloa destacó por su habilidad y por su incidencia en los goles ¿Cómo definiría su juego?
“Me gusta sentirme protagonista, me gusta tener el balón, aunque siempre en favor del equipo, siempre me gusta darle opciones de gol a mis compañeros con un pase filtrado o en alguna pelota parada. Eso es algo que también les debo a mis compañeros y al cuerpo técnico; el profe Víctor Rivero me dio la confianza. Mi estilo de juego es encarar, siempre estar atrás de los delanteros de mi equipo, alimentarlos con buenos pases y ocasionar opciones de gol. No soy egoísta, veo primero en el equipo”.
—¿Tiene algún jugador que le guste y le inspire?
“Como soy zurdo me gusta Lionel Messi, el mejor jugador del fútbol, y Arjen Robben, me inspiro en ellos. También Arturo Vidal y su garra, la inteligencia de Charles Aránguiz, admiro mucho a los jugadores chilenos, porque hay un gran potencial”.
—¿Cuáles son sus objetivos en Goiás?
“En lo personal, jugar lo que más pueda, aprender y disfrutar de este fútbol, que es un desafío importante para mí, por algo estoy acá. El club se preocupa hasta por el mínimo detalle, hay un gran plantel, jugadores que llevan larga trayectoria y espero seguir aprendiendo y sacarle provecho a eso. Quiero aspirar a lo más alto de la tabla, sé que es difícil, por lo competitivo de la liga, pero se han dado resultados que uno no se esperaba”.
—Tiene de compañero a Rafael Vaz, exUniversidad de Chile ¿Cómo es su relación con él? ¿Le dijo algo sobre la U?
“Sí, cuando llegue me brindó su apoyo, me dijo que hiciera mi fútbol y que esté preparado, porque ellos necesitan de todos. Me motivó y me dijo que puedo ayudar mucho con lo que tengo para entregar. Sobre la U tiene sólo referencias muy buenas, le tiene mucho cariño, tiene lindos recuerdos y quién sabe si le gustaría jugar allá eso habría que preguntárselo a él, pero yo lo veo bien y quiere mucho a la U. Me contó solo maravillas de ahí”.
A principios de año, Botafogo estaba interesado en Ignacio Jara pero optó por Goaiás, porque según él “cumple un sueño de niño al jugar en Brasil”. Pero no solo eso, su partida también tiene otra intención: “Vine acá para poder ser llamado a la selección, este fútbol abre muchas más puertas. Sé que por lo que hice en Cobreloa fui llamado a la selección sub 23, pero quizás por estar en una categoría menor, no fui tan bien visto. Eso sí, yo respeto las decisiones técnicas y solo me queda seguir mejorando. ¿Ser parte del recambio? No sé si llamarle así, creo que aún hay jugadores que pueden entregarle mucho a la selección y bueno, a mí me gustaría estar junto a ellos”.

Felipe Lemunguir S.
es colaborador de Deportes El Mercurio. Ha cubierto la Copa América Femenina 2018 y el Ironman de Pucón, entre otros eventos.