Noches agitadas
El zurdazo cruzado, de manual, de Lucas Cepeda, hizo explotar a un público que asumía el empate con resignación. El fútbol ofrece historias como la del extremo porteño, que hasta una semana se subía a una micro y no lo conocía nadie.
La Copa Libertadores es mágica. El miércoles lo volvimos a vivir cuando Colo Colo derrotó a Cerro Porteño en el epílogo de su estreno en la fase de grupos del principal torneo de clubes del continente. El zurdazo cruzado, de manual, de Lucas Cepeda, hizo explotar a un público que asumía el empate con resignación. El fútbol ofrece historias como la del extremo porteño, que hasta una semana se subía a una micro y no lo conocía nadie.
Sus primeras declaraciones mostraron ubicación y sentido de pertenencia. Recordó a Santiago Wanderers y agradeció a Carlos Muñoz, el capitán de los caturros, que pasó por el Cacique, y lo guía en el fútbol profesional. El domingo ingresó ante Everton y fue vital para abrir un pleito que se le enredaba al cuadro de Jorge Almirón por la irresponsabilidad de Maximiliano Falcón. Ante Cerro Porteño entró cuando parecía que el 0-0 estaba sentenciado. Antes de su gol puso dos centros que anunciaban que estaba enchufado.
Son sus pasos iniciales, pero su explosión, centros a la carrera y potente remate son una buena noticia. Si trabaja con seriedad y entiende lo que implica ser futbolista profesional, es posible que estemos en presencia de un jugador importante. Bien Muñoz. Los buenos ejemplos siempre son bienvenidos.
Noche extraña en Macul. Arturo Vidal no hizo un buen partido y el público lo apreció. Si algo distinguió la carrera del notable volante fue su exuberancia. Esa capacidad para desdoblarse en todos los sectores del campo, para irrumpir por el lado contrario de la maniobra o sorprender con esa pegada con ambas piernas que aclaraba el panorama. Nada de eso ocurrió frente a los guaraníes y la impresión desde la tribuna es que jugó al límite, que aún muestra esquirlas de la lesión que sufrió ante Godoy Cruz.
Poner en duda la categoría de Vidal es un despropósito. Sin embargo, para que gravite, es necesario que esté en óptimas condiciones. Si no es descollante desde lo físico, el 23 del Cacique se transforma en un futbolista común y corriente. En este capítulo veremos el carácter de Almirón para lidiar con los deseos del exmediocampista del Bayer Leverkusen, Bayern Munich, Juventus, Barcelona, Flamengo y Paranaense.
Lo concreto es que Colo Colo venció a un rival directo por la clasificación y tendrá que afirmarse ante Fluminense y Alianza Lima. Pasó pocas zozobras en su arco, pero de tres cuartos de cancha en adelante generó poco. La igualdad estaba clavada y los tres puntos fueron un premio excesivo, ante un rival demasiado mezquino, que disponía de materia prima suficiente para plantear otro cotejo.
En Rancagua, los fantasmas desencajaron a Palestino. Los tricolores fueron goleados 4-0 por Bolívar en un partido extraño. Era mucho castigo el 2-0 del primer tiempo, pero la evitable expulsión del juvenil Iván Román anunció la debacle. Los paceños disponen de futbolistas con recorrido internacional y lo plasmaron.
Buenas expediciones de Cobresal y Huachipato, ante Barcelona de Guayaquil y Estudiantes de La Plata. Frente a rivales de presupuestos muy superiores fueron capaces de competir. Los mineros lo pasaron mal en los 25 iniciales, pero aguantaron el chaparrón. Los acereros reaccionaron para empatar y acariciaron la gloria con el vertical de Gonzalo Montes.
Por ahora, la Libertadores no es un trauma.

Danilo Díaz
es un comentarista, periodista deportivo y escritor chileno. En 2009 obtuvo el premio de Premio Nacional de Periodismo Deportivo de Chile.