Boca Juniors, el turbulento gigante en que aterriza Carlos Palacios
La “Joya” ya tiene todo acordado para incorporarse a Boca Juniors, club azotado por una inestabilidad futbolística refrendada en su primer año sin títulos desde 2016. “El chileno va necesitar sobre todo personalidad y rebeldía”, dicen los históricos del club. También deberá afinar su físico. “Boca lo está esperando, lo necesita”, apunta José Basualdo. “Gago hoy no tiene un jugador como Palacios”, analiza la prensa, que da cuenta de un equipo en construcción y un club muy politizado.
‘No tiembla, late’, es el eufemismo que rodea a La Bombonera, un estadio fervoroso como pocos donde se construye el relato del Club Atlético Boca Juniors. Allí debiese asomar el domingo 15 Carlos Palacios, ya como nuevo futbolista del club. “Estamos bastante avanzados, la semana que viene creemos que Carlos debiera estar en Buenos Aires haciéndose los estudios y si toda va como pensamos, por ahí estará mirando el partido con Independiente, él tiene mucha ganas”, reconoció Juan Román Riquelme, presidente e ídolo total del club xeneize.
Tras abonar 4,8 millones dólares y acordar un contrato por cuatro años, Boca presentará a la “Joya” como en el primer fichaje de 2025, después de un año convulso, porque por primera vez desde 2016 el equipo no consiguió ningún título y vive una transición incómoda que encabeza Fernando Gago, técnico que llegó hace 50 días para reemplazar a Diego Martínez. La urgencia antes de cerrar el año es asegurar un boleto en la próxima Copa Libertadores y para ello debe ganar uno de los dos partidos que le restan —este domingo ante Newell’s y luego con Independiente—, lo cual le daría un cupo en la fase previa del torneo continental, por su puntaje en la tabla anual.
“Palacios puede encajar bien, es un jugador de nivel y una excelente negociación por parte de Riquelme. Es un mediocampista ofensivo, se va tener que adaptar al fútbol argentino, que es más intenso, más de roce y muy hablado, pero como viene de uno de los equipos más grandes de Chile la adaptación pienso que será más rápida”, imagina Alberto “Beto” Márcico, armador referencial del club ‘azul y oro’ en los 90.
Giménez y Cavani aparecen como las cartas ofensivas de un Boca que espera por más refuerzos. Foto: France Press.
No todos en Argentina tienen tan claro el repertorio de renquino, lo que se desprende de la función que le imaginan en el modelo 2025, que tiene como plato fuerte el Mundial de Clubes.
“Palacios es un jugador que entraría muy bien en Boca, es fuerte va para adelante, hace goles, ahí el único que está es (Edinson) Cavani y le queda poco tiempo, es bueno que entre gente nueva. (Miguel) Merentiel tiene una forma de jugar y ya le encontraron la vuelta, después está el ‘Changuito’ Zeballos que es más chico; el chileno tiene todas las condiciones para ser el ‘9’ de Boca y triunfar. En el club lo están esperando, es un jugador que se necesita”, advierte José “Pepe” Basualdo, multicampeón en la época de Carlos Bianchi.
Esteban Pogany, exarquero de Boca en la Copa Libertadores 1991, entrega más contexto del club que espera al colocolino. “Llega en un momento difícil para la institución y para el equipo, porque no logra plasmar todavía una forma de juego, está en plena formación y cuando uno llega a un lugar así no es fácil incorporarse, el chico va a tener que demostrar por qué lo contrataron y al no existir juego de conjunto eso cuesta; el chileno tendrá que adaptarse lo más rápido posible, va necesitar sobre todas las cosas personalidad y rebeldía par superar los malos momentos y después la categoría individual lo llevará a sobresalir, imagino una tarea de no muy poco tiempo”.
Con una decena de partidos en ciclo de Gago (cuatro triunfos, tres empates y tres derrotas), el período en curso asoma “inconstante en cuanto resultados y estilo, no hay una fisonomía de juego”, según Claudio Mauri, redactor del diario La Nación bonaerense. “Lo de Palacios es más un refuerzo de Riquelme que de Gago”, suma. “Le toca insertarse en un momento de indefinición, en un equipo de muchos baches, lagunas, que no da garantías. Además, es de los clubes más politizados por el acontecer nacional”, detalla el periodista.
Nicolás Montalá, del diario Olé, siguió el trabajo de Gago en Racing. “Él potencia a los jugadores técnicos, valora a los creativos, quiere equipos con buena circulación, es muy estricto y exigente, eso sí con (Edwin) Cardona no pudo, le costó. En lo físico aplica la balanza a diario, el que no está fino físicamente con él no juega”, expone.
Desde Santa Laura, donde se formó Palacios, vislumbran: “Si Carlos se enfoca, va a rendir, pero si anda con los amigotes va a tener problemas. Cuando estaba en Unión volaba, pero después se fue a Brasil y se puso ancho, se amurró. En Boca deberá ser constante y más fuerte de cabeza”, dice un conocedor del futbolista.
Gonzalo Suli, del diario Olé, añade más información: “Palacios es un jugador que Boca no tiene. Un delantero que arranca de atrás y rompe líneas. Boca busca a ese jugador. Una especie de cuarto volante, enganche o mediapunta que se asocie bien con los de arriba y tenga gol. Si es así, no tiene competencia. Boca llevó hace dos años a Oscar Romero, después a Martín Payero y (Ezequiel) Bullaude. Y ninguno se ganó el puesto”.
Si bien el sistema de cabecera de Gago es el 4-3-3, en la urgencia actual hasta probó con un 'doble 9'. Suli continúa: “Como delanteros, hoy tiene extremos (Zeballos, Brian Aguirre, Lucas Janson), centrodelanteros (Cavani y Miltón Giménez) y tiene a Merentiel, que ya no sabemos qué es pero siempre rinde. A Palacios lo vemos como un jugador importante. Hace un año cuando Boca lo buscó por primera vez, era casi un desconocido, pero la expectativa y la Copa Libertadores que hizo lo pusieron como un jugador codiciado. Después habrá que ver cómo se adapta”.
Claudio Herrera De La Fuente
es redactor de Deportes El Mercurio, especializado en fútbol y en atletismo de fondo, especialmente en maratón y pruebas de ultradistancia, con más de 20 años de experiencia en periodismo escrito.