Señor Director:
En relación con la
crónica sobre el "impasse" que se habría producido entre los senadores Rossi (PS) y Quintana (PPD), y el suscrito, a propósito del proyecto sobre educación parvularia que se tramita en la Comisión de Educación del Senado, deseo puntualizar lo siguiente:
Lo que intempestiva y sorpresivamente sometió a votación el presidente de la Comisión, senador Rossi, en uso de sus atribuciones reglamentarias, no fue la idea de legislar -tengo la impresión que el proyecto se va a aprobar por unanimidad, lo que sería una gran noticia para el país- sino que se decidiera si se votaba en ese mismo momento la idea de legislar.
Me opuse, junto a los senadores Allamand (RN) y Von Baer (UDI), por las siguientes razones: Era la segunda sesión en que la Comisión recién empezaba a conocer del proyecto en su primer trámite legislativo (la anterior con el ministro Eyzaguirre y esta con la subsecretaria Quiroga, acompañada de las directoras de Junji e Integra); no había tenido lugar ninguna audiencia para escuchar a expertos o diversas personas o instituciones vinculadas al tema; tuve especialmente en cuenta la petición por escrito de las asociaciones de funcionarios de Junji e Integra en que habían solicitado ser escuchados (¿cómo les habríamos explicado que el proyecto fue enviado a la Sala sin siquiera ser escuchados? ¿en qué quedaba la idea que hemos propiciado desde la Nueva Mayoría de legislar de cara a la ciudadanía y las organizaciones sociales, y no entre cuatro paredes? ¿Cómo habrían reaccionado las asociaciones de funcionarios de ambas instituciones?), y finalmente, el proyecto ni siquiera tiene urgencia.
En los ocho años en que he sido diputado y los cuatro en que he sido senador, nunca me había encontrado con una decisión tan frívola, liviana e irresponsable de querer someter a votación un proyecto de la mayor importancia, en la segunda sesión de su tramitación, sin ninguna audiencia ni debate entre los miembros de la Comisión.
¿A qué se puede haber debido entonces la iniciativa sorpresiva del presidente de la Comisión? Seguramente a avanzar un peldaño más en la "doctrina Rossi", según la cual "el problema es la DC, como siempre" (como lo indicara el mismo senador hace un par de semanas en declaraciones a "El Mercurio").
Como vio que yo pedía un par de sesiones más, para hacer bien la pega y escuchar a la lista de invitados que ya habíamos propuesto, y al constatar que ello coincidía con la opinión de los senadores Allamand y Von Baer, seguramente el senador Rossi vio una oportunidad inmejorable para demostrar que Walker y la DC están más cerca de la derecha y la oposición, que del gobierno y la Nueva Mayoría.
Finalmente, quiero decir que nada ni nadie me separarán nunca de lo que he practicado durante toda mi vida parlamentaria: hacer bien la pega, con sentido de la seriedad y la responsabilidad, así moleste al senador Rossi y a su ocasional aliado, el senador Quintana, supuestamente representantes del ala "progresista" de la Nueva Mayoría -ala progresista, insisto, que quería legislar entre cuatro paredes, sin escuchar a la ciudadanía y a las organizaciones sociales, contrariando lo que a estas alturas es como una doctrina del gobierno de la Presidenta Bachelet y de la Nueva Mayoría (y en buena hora).
La agenda legislativa que estamos conociendo en el Parlamento es demasiado sustantiva e importante, y la presión parlamentaria a que estamos sometidos es demasiado intensa, como para caer en la liviandad, la superficialidad y la irresponsabilidad del apuro, el tratamiento express y la tentación de legislar de espaldas a la ciudadanía.
Ignacio WalkerSenador DC