“Lloramos lágrimas de máscara en el baño.

Amor, la vida es solo una sala de clases.

Ah, ah, ah, ah”.

Exploro a Taylor Swift, temblor del alma en mis nietos. En https://ts-lyrics.netlify.app tipeo cualquier palabra y me aparecen versos.

La sala de clases es algo por lo cual llorar, sugiere en “The New Romantics”.

“¡Tata!, son los versos, fíjate”, me dicen los nietos sintiéndose interpretados. Me pregunto, ¿qué pensará ella de suprimir los celulares en las salas de clases? Suecia los vetó en mayo de 2023.

Entre el 11 y el 13 de febrero, en la U. de Melbourne, Australia, celebraron un “Swiftposium” (https://swiftposium2024.com). Análisis de Taylor Swift, su música, su poesía y sus efectos sociales. Una señal.

Estoy seguro de que ella deplora el retiro de los celulares de las salas de clases. Es una libertaria.

Y leo argumentos. El doctor Miguel Nussbaum, del Departamento de Computación de Ingeniería PUC; Brayan Díaz, del Departamento de Educación STEM, de la U. de Carolina del Norte, EE.UU.; Samuel Greiff, del Departamento de Ciencias Cognitivas y del Comportamiento de la Universidad de Luxemburgo, y Macarena Santana, egresada de Enseña Chile y doctorada de Ingeniería PUC, publicaron un trabajo el 7 de febrero en la revista Computer & Education: “El papel de la tecnología en la competencia lectora: ¿Suecia retrocede o avanza al volver a la lectura en papel?” (https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0360131524000289?dgcid=author).

Conocí al autor, el doctor Miguel Nussbaum, desde cuando en los 90 enchufaba un mouse a las primeras consolas de juego y creaba programas educativos. Desde entonces estimula a los profesores a crear con las nuevas tecnologías. Y demuestra que, sin un profesor que les saque partido, nada sirve.

“Todo el colegio lanza dados cargados

Te metes en juegos estúpidos, y ganas premios estúpidos” (Taylor Swift, “I Forgot that You Existed”).

En su trabajo, Nussbaum, Díaz, Greiff y Santana revisan investigaciones que comparan el impacto de aprender leyendo en papel con aprender leyendo en pantalla. Revisaron 327 investigaciones en alumnos desde kínder hasta 4º medio, en países como Irán, EE.UU., Afganistán, Holanda, Noruega, Corea del Sur, Suecia, Turquía, Asia Pacífico…

Queda clarísimo que si la pantalla solo reproduce el texto papel, hay casi un empate en comprensión lectora.

Pero en pantalla uno puede mejorar el diseño, las imágenes. Y agregar diccionarios, vínculos a internet… Y para qué decir lo que logrará la inteligencia artificial para estudiantes con dificultades.

Con lo digital, los estudiantes pueden ser más activos. El desafío es diseñar las experiencias, capacitar a los docentes, generar impactos, más para los alumnos que para los profesores.

“Las escuelas no pueden existir aisladas del mundo digital, ni pueden detener la inevitable digitalización de nuestras vidas y entornos sociales y los de nuestros estudiantes”, dice el trabajo (traducido por Google Translator).

“Y todo de una,

¿Es este el final de todos los finales?

Mis huesos rotos se están componiendo” (T. Swift, “King of My Heart”).