Qué alivio después del estrés. Ahora empieza la temporada de: “lo vemos después del 18”. Nos merecemos un descansito de tanta política durante Fiestas Patrias. Darle tiempo a la familia, la cueca y los asados, disfrutar de la naturaleza y del buen tiempo. Tenemos derecho al buen vivir, y mucho que celebrar porque nos salvamos de la barbarie.

Después del 18 será el momento de ponernos serios. La sociedad civil deberá seguir involucrada en política. Ella es la gran ganadora de esta elección. Los partidos y el Congreso tienen una nueva oportunidad para dedicarse a lo que les corresponde y para lo que existen, hacer política de la buena y no abandonarse a los independientes que no lo son ideológicamente, pero sí lo son orgánicamente, con lo cual el desorden político se exacerba.

Debemos volver a escuchar a los técnicos. Si hubiéramos escuchado a los economistas, no tendríamos la inflación que tenemos ni estaríamos en la recesión que enfrentamos. Si hubiéramos escuchado a los expertos no habríamos producido la mala Constitución que nos propusieron. Afortunadamente las encuestas muestran que ha mejorado la confianza y credibilidad en Carabineros. Ellos son los especialistas en seguridad y debemos oírlos, respetarlos y respaldarlos. Debemos atender a los que saben en temas constitucionales, para mejorar la funcionalidad de nuestro sistema político que no tenemos que tirarlo por la ventana como se proponía, sino que mejorar sus defectos, pero mantener sus virtudes. En materia económica, debemos escuchar a los ingenieros y economistas, que nos ayuden a optimizar los procesos y los incentivos para mejorar nuestra economía, las pensiones y la salud.

Es la hora de la madurez cívica y de la otra. Tenemos gente joven e inexperta manejando el país. El Presidente Boric en cualquier organización de abogados, estaría en segundo o tercer nivel escuchando y aprendiendo de los que saben; ídem la ministra Siches en una organización médica o Jackson en una de ingenieros. Algo nos confundió y nos hizo pensar que la administración del Estado puede hacerse solo con la creatividad y energía juvenil, pero sin la prudencia y conocimiento de los veteranos. Este gobierno partió combinando mal juventud con experiencia y es un balance que debe recuperar.

Vienen tiempos difíciles donde se requerirá mucho diálogo, humildad y empatía, pero sobre todo, experiencia y empirismo. Hoy la ciencia y la historia tienen resueltos muchos dilemas de políticas públicas y los jóvenes del Frente Amplio es hora que se enteren de ello. No debemos insistir en políticas que la evidencia muestra que no funcionan y sí debemos destinar tiempo y esfuerzo a los que sí funcionan y que los chilenos prefieren.

Ayer ganó Chile, el centro político y la sociedad civil, y perdió el extremismo y la radicalidad. Chile debe retomar las confianzas, eso genera paz y prosperidad. Debemos tomar aire, respirar profundo, poner la pelota al piso y no desperdiciar este renacer. Después tenemos mucho que trabajar, y a diferencia de la vez anterior, tenemos que hacerlo bien. Pero por favor después del 18. Nunca nos hemos merecido una mejores Fiestas Patrias.

Gerardo Varela Alfonso