El viernes santo, algunos astrónomos involucrados en fotografiar por primera vez, el 10 de abril de 2019, un agujero negro, tele-celebraron el aniversario, uno con su gorro de cumpleaños. Lograron la foto con el Event Horizon Telescope (EHT: Telescopio del horizonte de eventos): un amanecer del conocimiento.
Entre ellos había chilenos: Álvaro Sáez llevaba 10 años en el proyecto.
Ese Telescopio de horizonte de eventos es un instrumento virtual: coordina ocho telescopios en cuatro continentes que forman la cámara, un instrumento del diámetro de la Tierra, poderoso: podría ver una manzana en la Luna.
Álvaro Sáez explicó lo difícil de integrar tantos telescopios exactamente al mismo segundo.
Los hitos traen consecuencias, como las tecnologías y los acontecimientos, especialmente los inesperados. Imagino a Galileo Galilei en 1610, boquiabierto, descubriendo las cuatro lunas de Júpiter. Es como el gozo de quienes ven por primera vez el mar. O la impresión de los ingenieros Luis Ladislao Zegers y Arturo Salazar, cuando lograron generar la primera radiografía en nuestro país, el 22 de marzo de 1896, en la U. de Chile.
Lo hicieron a 85 días de la publicación del descubrimiento de los rayos X por Wilhelm Roentgen.
Ahora, los astrónomos del EHT apuntaron a otro objetivo, el cuásar 3C 279, y anuncian otro hito. La revista “Astronomy & Astrophysics” de abril publica resultados del estudio.
Vieron en el 3C 279 un agujero negro de un diámetro equivalente a nuestro sistema solar. “Succionado” por la gravedad de esa negra garganta, vieron un chorro de fotones, de luz. Este chorro rompió sus expectativas: debería ser recto, como el agua cuando sube por una bombilla, pero, aparecieron fotones que toman una ruta perpendicular al chorro.
“Sabemos que cada vez que se abre una nueva ventana al Universo se encuentra algo nuevo”, comentó Jae-Young Kim, quien dirigió el análisis, “… esperábamos encontrar la zona donde se forma el chorro y, en cambio, observamos una especie de estructura perpendicular”. Y agrega: “Este fenómeno es nuevo y requiere un análisis cuidadoso”. Viene otro amanecer.
Ocho telescopios, dos en territorio chileno, ALMA en Antofagasta y el que maneja EE.UU. en el Polo Sur, engendraron la imagen del chorro misterioso. El EHT coordinó los resultados en supercomputadores de Bonn y del MIT.
Violette Impellizzeri, astrónoma que lleva años en ALMA, dijo estar particularmente contenta con el descubrimiento de los elementos perpendiculares: “Hace 15 años que intentábamos resolver el origen del chorro… el EHT lo está logrando”.
El viernes agregó: “No recordaba cuán nerviosa estaba hace un año”, por la foto del agujero negro. “Algunos decían que era la foto del siglo”.
La revista Science la declaró la foto del año. Y dio pie a fotografiar el chorro de hoy.
Hoy el covid-19 tiene paralizado el EHT pero, en 2021, sincronizará no ocho sino once telescopios; pretende filmar una película de un agujero negro. Para ir más allá.
Los hitos traen consecuencias, amaneceres.