Existió en la esquina de Santa Isabel con avenida Italia un local con poco ángel —escasa decoración—, buena atención y sabrosa cocina española: La Ibérica. Hace un tiempo se desplazaron de allí, más hacia el sector de plaza Las Lilas (bueno, por allí, más hacia Tobalaba), llegando a una casa en la que cuentan con unas cuantas mesas y una vitrina con hartos platos a la venta, precocinados y envasados al vacío (se ven gloriosos. Ver en www.laiberica.cl). El tema es que no queda en claro si son un restaurante abierto a público o no. Porque al llegar preguntan si se hizo reserva. Y no es porque estén llenos. Es porque atienden a la medida, y eso no está bien (a menos que lo publiciten claramente en sus redes sociales). O sea, o están abiertos-abiertos o están cerrados —y lo informan— y abren para quienes reserven. Porque está bien la informalidad, pero para el que la busca (= enojo para el que no).
Entonces, a escuchar las posibilidades que, de “buena onda”, se pueden comer sin reserva (y sin carta a la vista = otro enojo). Para picar, cosas ricas por las que la señora oveja —que cooperó— y el señor chancho —que se involucró— remecen ser felicitados: queso manchego ($8.500) y jamón serrano ($9.000), con buen pan, fresco, y junto a una jarrota de sangría ($8.500) muy heladita y harto arreglada (con maldá espirituosa).
Luego fue el turno de atacar dos paelleras que son para dos comensales cada una (por lo mismo, no se puede pedir individual). Primero, una paella mixta ($8.500) con choritos, dos gambas enteras, poroto verde, trozos de pollo —escuetos— y camaroncitos varios. Y casi a la par, un arroz negro con pulpo ($9.000) y algún camarón ecuatoriano (fome), de sabor intenso y más intenso aún por obra de un alioli de comparsa muy cargado al ajo y sin timidez alguna (como para olvidarse de la reunión posterior o de subirse al ascensor). Una gloria sin timideces.
¿Postre? A lo mejor había. Y al preguntar por café, podía estar, pero en veinte minutos o más.
Entonces: reserve mejor. Y opérese del nervio previamente.
Marcel Duhaut 2995, Providencia. 9 5406 8065.