José Miguel Piquer, el ingeniero que envió el primer e-mail en Chile, participa en la tercera temporada de la serie de TV “Por la razón o la ciencia”, producida por la Fundación VTR. Me habla del trabajo que implicó participar, del cuidado de todos los involucrados.
La transmitió CNN, los canales del Senado y la Cámara de Diputados, ayer a las 20 hrs., y está disponible en www.fundacionvtr.cl.
Paloma Ávila, periodista, presentó la serie. La producción aborda el impacto de la revolución digital en la vida de las personas.
Paloma habló chispeante ante científicos, políticos, periodistas. La escuché y me fui a 1968, cuando en TV 13 hacíamos “Clímax”, con el equipo de la Vicerrectoría de Comunicaciones de la UC, en blanco y negro.
Recorríamos a los científicos de la universidad averiguando en qué estaban, para subirlos a la tele los miércoles a las 19 hrs. El programa era todo lo rico posible entonces, a dos cámaras y en estudio, en vivo.
Envidio la producción de “Por la razón y la ciencia”; admiro los talentos, los recursos, la tecnología digital, la movilidad, el arte. ¡Así la ciencia y la tecnología se hacen hoy públicos!
Y con científicos dispuestos. Antes costaba convencerlos para que aparecieran. Hoy, la mayoría de ellos y ellas sienten la presión de contar.
Paloma Ávila mostró un video y dijo que era una “mirada hermosa a las ciencias”. Es como crear un ecosistema, dijo. Para prepararnos, para mirar el futuro y encontrarnos en ese futuro. Para generar una sociedad que conversa y resuelve, dijo.
Por eso la variedad de plataformas en Aque el programa está disponible. Incluso, como dijo Guillermo Ponce, gerente de VTR, en “cápsulas curriculizadas” para la educación.
Ana María Raad, antropóloga experta en educación y mundo digital, abrió el abanico de oportunidades: más conocimiento, más personalización, aprendizaje fuera de la sala. Énfasis en la creatividad.
Es una mirada nueva para educar, dijo, y la discusión no tiene que ver con traspasar conocimientos, con usar o no el celular en la sala, ni con enseñar a programar.
“Tenemos que abandonar —dijo Ana María— el concebir el conocimiento como la hiperespecialidad. Preparar personas que se eduquen contextualizando, aprender haciendo, en proyectos, no solo en desafíos científicos, sino que en creatividad”.
Andrés Couve habló de los distintos puentes que se abrirán desde el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación: “Hay que llegar”. Enumeró los niños, la calle, el metro, los museos, laboratorios abiertos, llamó a experimentar la ciencia. El Presidente, dijo, le había pedido desde el comienzo abrir “acceso”.
“Que Chile viva la evidencia científica y la use para la toma de decisiones, hito clave para el desarrollo sostenible”, dijo.
Entre el público, lo escuchaban también miembros de la Academia de Ciencias, de la Comisión Desafíos del Futuro del Senado, directivos del Congreso del Futuro. Y jóvenes del mundo de las comunicaciones, que sienten que tarde no podemos llegar.