Siempre que el subgénero de supervivencia zombi se declara, bueno, muerto, aparece un nuevo título que consigue abordar el tema con cierto aire novedoso. Y “Black Summer” es pura acción. Una suerte de anti “The Walking Dead”, que lleva interminables temporadas explorando los recovecos más soporíferos de la psiquis humana. Acá, lo poco que sabemos de sus personajes lo vamos aprendiendo en plena persecución, en los primeros días del virus letal que transforma a todo el mundo en asesinos iracundos. Se trata (más o menos) de viñetas de supervivencia alrededor de un puñado de personajes, impecablemente realizadas, con elaborados planos largos que estrujan la tensión. La serie entrega unas implacables dosis de adrenalina, haciendo muy difícil la resistencia al capítulo siguiente.
En Netflix.