"El club de los incomprendidos"

Valeria es una joven común y corriente que llega a Madrid después de la separación de sus papás. Con la mudanza vienen además las nuevas amistades, el nuevo colegio, y las sesiones de "orientación" a las que debe asistir. Ahí conoce al susodicho club de incomprendidos, un montón de jóvenes con problemas de adolescente y donde habrá amistad, llanto y amor. Mezclando mucha película "teen" con una estética de comercial de zapatillas, la historia trata de ganarse a su público objetivo sin grandes sorpresas y apostando por lo seguro: Gente atractiva enamorándose y sufriendo en la urbe mientras la banda sonora va soltando canciones pegajosas con calculada frialdad. Una película que, tal como esos dramas de adolescencia, puede resultar intensa e inolvidable en su momento, pero que luego será vergonzosa en la adultez. "El club de los incomprendidos". España, 2014. 104 min. Mayores de 14.

"Escapes de gas"

275 días es lo que tardó el grupo convocado por Salvador Allende para construir el impresionante edificio Unctad III, más tarde rebautizado como "Diego Portales" y hoy como el "GAM". Fue un trabajo colectivo, donde artistas, arquitectos y trabajadores lo dieron todo para conseguir un objetivo inédito, y claramente único. Este documental cuenta esa historia, con muy valioso material de archivo (recopilado a lo largo de siete años) y entrevistas a los involucrados directos, abarcando desde la concepción del proyecto hasta la devastación que sufrió en manos de la dictadura. Un gran relato que es a la vez metáfora, registro y memoria de un episodio triste que no debiese caer en el olvido. Chile, 2013. 72 min. TE.

"El llanto del diablo"

Una familia común y corriente se muda a un pueblo rural, donde el papá tomará el puesto de pastor en la iglesia. Y como esto es película de terror, entre la mudanza y conocer a los nuevos vecinos aparecen las visiones inquietantes, los rituales satánicos y le posesión de espíritus malignos. Buscando mezclar la paranoia religiosa con el horror inherente del pueblo chico de habitantes impredecibles, la historia se contenta con los golpes de ruido y con el abuso indiscriminado de efectos especiales digitales para transformar rostros en demonios horrendos, teñir paredes de espectrales manchas negras y borrar pupilas de seres queridos. Las sorpresas brillan por su ausencia, las patrañas del guión compiten con las malas actuaciones (¿qué te pasó, Anne Heche?) y poco hay para entretenerse, salvo jugar a detectar el reciclaje de películas mejores. Ofensiva hasta para el diablo. "Nothing left to fear". EE.UU., 2013. 100 min. Mayores de 14.