Con Lula criticando la democracia liberal, Petro añorando el estallido social y Sánchez acusando a la internacional del odio y la mentira, la visita de los cuatro presidentes de izquierda fue otro gesto a Jano, ese dios de los comienzos y los finales. Al inicio de su gobierno, abrazado al momento constitucional, Boric apostó a ser el joven líder de la izquierda latinoamericana, una izquierda fresca y joven. Su apuesta vuelve a mostrar esa cara, pero ya no es ni tan fresca ni tan joven.
La cumbre “Democracia Siempre” coincide con el nuevo impulso refundacional post primarias. Aunque participó solo un 9% del padrón, la paliza de Jeannette Jara fue sorpresiva y abrumadora. Detrás de ese triunfo hubo un enroque y un funeral. Ese Apruebo Dignidad que cobijó al Frente Amplio y al PC resucitó como el ave Fénix. Pero con nuevas plumas. Ahora es el turno del “Comunismo Amplio”. Si Boric venció a Jadue, Jara pulverizó a Winter. La gran diferencia es que el PC se comió al Frente Amplio.
Todo esto no es casual. El partido del Presidente se fue plegando y mimetizando, por conveniencia o comodidad, al PC. De hecho, un estudio de Aldo Mascareño revela que entre abril del 2024 y marzo del 2025, los diputados frenteamplistas votaron al unísono con los comunistas. Es más, en la sede del Frente Amplio hoy se forman nuevos cuadros con cursos sobre “Economía política marxista” y “Superar el neoliberalismo”. Los jóvenes del FA, inspirados por Álvaro García Linera, Chantal Mouffe y su pareja, Ernesto Laclau, vuelven a sus viejas raíces. El pandero hoy lo lleva el comunismo. Y ya no hablamos de “todes”, sino de compañeros trabajadores.
Hay varias razones que explican por qué Winter, con un discurso que pudo ser del PC, obtuvo solo un 9% de los votos. Durante la campaña, los 44.973 militantes comunistas hicieron la pega. Jara obtuvo 825.835 sufragios, lo que equivale a 18 votos por militante. En el Frente Amplio, que tiene 60.592 afiliados, Winter obtuvo 123.829 votos. Solo dos votos por militante. Los compañeros trabajaron y movilizaron. Los frenteamplistas, en cambio, se quedaron en casa.
En cuanto al funeral post primarias, el Frente Amplio fue siempre muy crítico con el legado de la Concertación. Carolina Tohá, símbolo de esa exitosa coalición y emblema del rescate al Gobierno después del Rechazo, naufragó. La alianza entre el Frente Amplio y el PC, con o sin buscarlo, terminó enterrando a la Concertación. Es un logro que en el Comunismo Amplio celebran a puertas cerradas. En términos políticos, fueron consistentes. Pero en lo humano, la política puede ser más cruel que el mercado.
Boric finaliza con una nueva apuesta refundacional cargando con algunos récords. En una disputa en los márgenes del 1,8%, competirá con Bachelet II por el crecimiento más bajo desde el retorno a la democracia. Y en la encuesta CEP, al preguntar “Cómo calificaría usted la actual situación económica del país”, este gobierno tiene un promedio histórico: un 55% la califica como “mala o muy mala”. Entre el 2006 y el 2021, ese promedio era un 35%. En cuanto a las expectativas para los próximos doce meses, durante esta administración un 34% cree que la situación económica “empeorará”. Entre 2006 y 2021 solo un 15% así lo pensaba. Y en la pregunta más emblemática sobre el momento actual, un 28% cree que estamos “en decadencia”. Durante el período 2006 y 2021, solo un 13% era tan pesimista.
Con una derecha compitiendo a tres bandas, los movimientos dentro de esta nueva izquierda bajo el timón del PC remecerán el ambiente político. Veremos réplicas y remezones. Volverán los autocomplacientes y los autoflagelantes. Y todo esto bajo la mirada atenta del Comité Central de la hoz y el martillo. Como sea, esta nueva puerta que abre el dios Jano al Comunismo Amplio no es ni tan fresca ni tan joven.