El Mercurio.com - Blogs : Decisiva rebaja de los quorum
Editorial
Domingo 14 de agosto de 2022
Decisiva rebaja de los quorum
La opción Rechazo se perfila como un camino más expedito hacia un texto capaz de convocar y no dividir al país.
La reforma que baja a 4/7 el quorum necesario para modificar la Constitución surgió como un camino alternativo para lograr una Carta Fundamental que efectivamente sirva como punto de encuentro de los chilenos, luego del fracaso de la Convención en esa tarea y su opción por un texto partisano. De este modo, si el Rechazo se impone en el próximo plebiscito, ese menor quorum facilitará la introducción de modificaciones a la actual Constitución, ya sea para incorporar materias que hoy generan amplio consenso, como el reconocimiento de nuevos derechos sociales, la protección ambiental o el carácter multicultural del país, o bien, para acordar mecanismos que permitan dar continuidad al proceso constitucional.
Los quorum supramayoritarios han sido uno de los aspectos más controvertidos del texto vigente. Fueron uno de los sustentos de la estabilidad que permitieron el desarrollo de los últimos 30 años, pero también han recibido fuertes críticas por la rigidez introducida en nuestro marco normativo, más evidente a medida que la clase política fue perdiendo la capacidad de alcanzar acuerdos. Por cierto, las constituciones de numerosas democracias también contemplan quorum supramayoritarios, pero los de nuestra Carta —de 2/3 y 3/5— son particularmente exigentes, y a ellos se suma la existencia de leyes orgánicas constitucionales cuya modificación también requiere de supramayorías (4/7). Ahora el Congreso ha despachado la reforma que rebaja el quorum para cambios constitucionales, al tiempo que se tramita otra según la cual las LOC solo requerirían mayoría absoluta.
Con el cambio ya aprobado, la Constitución actual resulta mucho más fácil de modificar que la propuesta elaborada por la Convención. Como se sabe, esta demanda un quorum de 2/3 en sus capítulos más relevantes o, en su defecto, de 4/7 más un plebiscito ratificatorio; ello, sin considerar las encontradas interpretaciones respecto de la eventual necesidad de consulta o de consentimiento de los pueblos originarios. Así, la opción Rechazo se perfila como un camino expedito para avanzar hacia un texto capaz de convocar y no dividir al país.
Por cierto, la rebaja de quorum apela a la responsabilidad de los parlamentarios. La experiencia de los retiros previsionales, impulsados con afán populista bajo el resquicio de reformas constitucionales, constituye una advertencia: la tentación de aprovechar los 4/7 para introducir reformas cada vez que mayorías circunstanciales lo permitan, alterando la estabilidad y la confianza que ella genera, debe ser contenida. Se hace patente, por otra parte, la importancia de un sistema electoral que efectivamente refleje la voluntad ciudadana y no la distorsione mediante mecanismos que otorguen a priori una sobrerrepresentación a determinados sectores. Y es que el sentido de este cambio no puede ser otro que el de facilitar la construcción de aquello que alguna vez se denominó la “casa de todos”.