“Hay que ser más flexibles y amigables en las fronteras”, afirma Eduardo Yanjari, presidente de la Cámara de Comercio y Turismo de San Pedro de Atacama (Región de Antofagasta), al reconocer que el progresivo repunte del sector debe preservarse con medidas que faciliten y no desincentiven la llegada de turistas extranjeros.

Como evidencia de esta paulatina reactivación, el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que el número de personas ocupadas en las llamadas Actividades Características del Turismo (ACT) ascendió a 584.155 en el trimestre febrero-abril de este año, con un alza del 25,4% durante los últimos 12 meses, en un período también afectado por la pandemia.

Según Yanjarí al reactivarse el sector, como ocurre hoy, se requiere de mano de obra y se generan empleos. “En mayo pasado, cuando se abrieron las fronteras, comenzaron a llegar nuevamente turistas brasileños y europeos, pese a las normas restrictivas en los aeropuertos y frontera. Para salir de Chile no hay problema, lo complicado está al ingreso con los controles”, dice el representante del gremio, quien detalla que los recintos de hospedaje operan hoy con un 50% de ocupación comparado al período prepandemia en esta localidad nortina.

“Si somos más ágiles y proactivos, la gente empezará a llegar nuevamente; pero si se pasan el dato de que tardas muchas horas en la frontera, es obvio que la gente va a pensarlo dos veces antes de venir (…). Hoy, la homologación de vacunas es una de las piedras de tope para el turistas de otros países”, agrega sobre un procedimiento que han cuestionado gremios de distintos sectores vinculados al turismo.

De acuerdo al Plan Fronteras Protegidas del Ministerio de Salud, dependiendo del nivel de alerta en que se encuentre determinada zona del país, se requerirá de homologación de vacunas voluntarias u obligatorias para ingresar al país. Dependiendo del mismo factor, se recomendará o se exigirá test de diagnóstico, entre otros requerimientos de la autoridad sanitaria.

En la Región de Coquimbo, Rafael Vera (DC), alcalde de Vicuña y también presidente de la Asociación de Municipios Turísticos de Chile, reconoce una positiva evolución en el turismo interno. “Estamos viendo un turismo que no solo se plantea durante los meses estivales, diciembre, enero y febrero, sino que durante todo el año. Quizás no de la misma forma, es decir, con menos personas, pero es un visitante que estamos recibiendo durante todo el año”, dijo.

“Ahora se presenta para el sector turístico una oportunidad importante, que son estas vacaciones de invierno que han aumentado y que nos permiten recibir a personas que puedan extender esas vacaciones y tengan los recursos para hacerlo”, añade Vera.

Mientras que en el extremo sur, Andrea Rosas, presidenta de la Corporación Provincial de los Glaciares, reconoce que tras haberse suprimido la exigencia de test PCR para ingresar a la Región de Aysén, el pase de movilidad ha contribuido de manera progresiva al desplazamiento de turistas nacionales. “El crecimiento laboral vinculado al sector turístico para nosotros es súper reconfortante (…). Aunque debemos reconocer que muchos en nuestro gremio se vieron obligados a cerrar o simplemente migraron a otras actividades productivas. La vacunación ha contribuido a la movilidad y por ende reactivación de la actividad turística”, dijo.

“Aunque la homologación de vacunas y los pases provisorios que se están implementado ahora siguen siendo una barrera de entrada para el turista de largas distancias, que llega a la Patagonia por una estadía mayor a una semana en esta zona del país”, agrega Rosas, representante de una agrupación que abarca a las comunas de Tortel, O'Higgins y Cochrane.