El irlandés Liam Neeson tiene sus años como para protagonizar películas de acción, se acerca a los 70, pero el dato de la longevidad no es un obstáculo y el actor no piensa en abandonar el género, aunque, por cierto, de vez en cuando lo anuncia y asegura.
Nada es verdad, porque mientras se pueda, lo seguirá haciendo, más que mal, la otra alternativa y debido a su edad, es convertirse en el padre del protagonista, por lo tanto, un papel secundario. Por ahora sigue en primera línea: hace meses en “El protector” (2021), hace menos en “Riesgo bajo cero” (2021), ya vendrán “Blacklight” (2021) y “Memory” (2021) y para el futuro “Marlowe”, nada menos, y si eso llega a ser así, superaría los 61 años que tenía Robert Mitchum cuando encarnó por segunda vez al gastado detective privado.
El título original de “Venganza implacable” es “Honest thief”, pero se trata de conectar al actor con una de sus sagas más nombradas: “Búsqueda implacable” (2008) y sus secuelas que llevaron el mismo título, seguidas del 2 y del 3.
Lo que hay es una historia de amor otoñal e invernal, desde la parte del Tom Nolan (Liam Neeson) que desea borrar su vida anterior y convertirse en alguien honrado y enamorado, porque conoció a Annie Wilkins (Kate Walsh), una mujer estudiosa y trabajadora que lo cautivó.
En su pasado hay un bandido de guante blanco —12 bancos y un botín de nueve millones de dólares— que desea alcanzar un acuerdo y entregarse al FBI, lo que no es fácil, porque nadie le cree, hasta que llegan dos detectives que descubren que la confesión es cierta, el dinero existe y la ocasión la pintan calva.
En el origen hay un problema universal: las malas pensiones.
El padre de Tom fue estafado por el director de un fondo de pensiones y no pudo soportarlo. Por esa tragedia y para vengarse del sistema, se convirtió en un ladrón solitario que llegó a juntar los nueve millones.
Los agentes Niven (Jai Courtney) y Ramos (Anthony Ramos), cuyo deber es escuchar la confesión, hacer un trato y recibir el dinero, se tientan con la zona oscura por un par de razones, donde una de las principales son sus bajas pensiones futuras.
Nolan, como tantas veces el personaje de Liam Neeson, es un ex de algo: exagente de la CIA, ex alguacil federal y, en este caso, al igual que en “El protector”, exmarine.
Con este pasado sintético pero remoto, la pregunta sería la siguiente: ¿qué hace un señor como usted en películas como estas? Desplomándose de terceros pisos, rebotando en el pavimento, huyendo sin rasguños y solo con una cojera momentánea. Mientras sea el protagonista, como en “Venganza implacable”, todo es posible y tolerable, aunque sea increíble.
Si fuera secundario en esta clase de películas, que a nadie le quepa duda, le caen los años encima y lo matan a la media hora, que es como desaparecen los que alguna vez fueron héroes de acción.
“Honest thief”. EE.UU., 2020. Director: Mark Williams. Con: Liam Neeson, Kate Walsh, Jai Courtney. 99 min. Mayores de 14 años. En cines.