Es difícil decirlo, pero en busca de una salida armoniosa a los problemas con el plantel -algo que debe haber solicitado Gustavo Quinteros, obviamente- el vicepresidente ejecutivo Harold Mayne Nicholls envió un potente mensaje a los “referentes” en entrevista con El Mercurio: ColoColo se jodió cuando Mario Salas echó a Agustín Orión. “Todos le dijimos por favor que no lo echara. Y generó que hasta hoy estemos a los tropezones”. Agregó que se produjeron “sensaciones de autoritarismo” y que el club se metió en un hoyo, con un quiebre muy grande.
Todo el resto es anecdótico, siguiendo esa tesis. ¿Por qué el club se acogió al seguro de cesantía? “Fue decisión de los abogados”. ¿Por qué no pagaron abril? “Son materias legales”. ¿El bono que generó el quiebre del plantel? Inventos de la prensa (“Que salga publicado la dejó como verdad, aunque fuera mentira”). ¿Por qué no negoció Aníbal Mosa? Por estrategia. En suma, la única culpa atribuida al plantel y sus principales figuras fue la de ser “muy intransigentes” al no entender que no habría recaudaciones por Copa Libertadores. En esta pasada, libres de polvo y paja, listos para dar vuelta la página, apretón de manos incluido.
No es un mea culpa, por cierto, pero si un generoso gesto para enfatizar que las responsabilidades futbolísticas no son de los jugadores, sino que están en la decisión de Salas de expulsar a Orión, lo que por ende justificará las partidas de Valdivia y Valdés, y seguramente la política de contratación de refuerzos. ¿Tanto puede provocar la salida de un jugador?, pregunta el periodista Raúl Neira. “Cuando caes al hoyo cuesta salir”, responde el dirigente.
¿ColoColo puede irse al descenso? Mayne Nicholls elije la metáfora favorita del ex dirigente Jorge Vergara: “Si mi abuelita tuviera ruedas sería bicicleta”. ¿Hay problemas físicos debido al paro por el seguro de cesantía? Puede ser físico o emocional, dice el directivo, pero también hay otras cosas, como el VAR. En fin. Si la culpa es de Mario Salas por haber metido a la institución en un hoyo, todo el resto serán matices. “Intransigencias”. Ciencia Ficción. Mentiras.
Volviendo al momento en que ColoColo se jodió, porque el ex técnico no quiso entender razones, el plantel podrá salir libre de culpas —incluidos los que se fueron enemistados con Salas— pero otra vez el rol del gerente técnico Marcelo Espina queda cuestionado, porque el salvavidas no alcanza para él. Si la crisis iba a ser tan grande y el hoyo tan profundo, debió haber reaccionado con más energía, sobre todo, suponemos, porque estaba del lado del entrenador. ¿O el “autoritarismo” de Mario Salas no sólo superó a la dirigencia, sino también al gerente técnico?
Mario Salas se fue del club y del país sin dar una entrevista formal. A través de las redes, en alguna charla, dijo que su relación con el plantel había sido buena y que las cosas terminaron bien. No reaccionó ante los dichos de los jugadores -de los que se quedaron y los que se fueron- en un error que ahora, cuando es sindicado como responsable de la peor crisis de ColoColo en las últimas décadas, tendrá que afrontar.
Como nota cultural, Orión fue un gigante mitológico en la antigua Grecia, difícil de someter y matar. Solo la picadura de un escorpión lo liquidó, para transformarlo en constelación estelar. Pura mitología, claro.