Esperaba conocer los argumentos que fundamentaran debidamente el cambio curricular que afecta a los alumnos de 3° y 4° medio, con el retiro del curso de Historia del Plan Común Obligatorio, relegándolo a uno de carácter electivo.
Se advirtió que durante dos años se había analizado la modificación, consultando expertos, haciendo una consulta pública (digital), jornadas de reflexión en colegios, con directores, docentes, estudiantes, etc., pero no se conoce el informe respectivo y la opinión de los expertos tiene resguardo de confidencialidad. Quedan entonces las pocas explicaciones que autoridades expresaron hace meses.
Se dice que una parte del contenido de la asignatura de Historia se aborda ya entre 1º y 2º medio (Historia de Chile) y otra se hará en “Educación para la ciudadanía”, un curso nuevo que se estrenaría el próximo año.
Debe entenderse entonces que alumnos de 15 y 16 años tendrán que comprender los procesos políticos, sociales, económicos y culturales que conforman la Historia de Chile. Dificulto que se logre una comprensión adecuada. Es cuestión de revisar los textos que se utilizarán y ver cómo se exponen los contenidos y su profundidad en las escasas páginas dedicadas a cada tema. ¿Con qué rigor se implementará el modelo en los liceos y colegios de todo Chile, sobre todo en los subvencionados y públicos, teniendo en cuenta que principalmente para ellos son los cambios?
He constatado el nivel de conocimientos y la capacidad de análisis acerca de la Historia de Chile, por ejemplo, con que llegan a la universidad la mayoría de los estudiantes provenientes de todo tipo de establecimientos. Hablo del currículo actual, donde Historia de Chile se profundiza en 3º medio: manejan información fragmentaria, pero sin relacionarla o explicar el sentido que pudiera tener en el contexto correspondiente. Eso está lejos de ser conocimiento histórico. Pero desde 2020 será reemplazado por “Educación para la ciudadanía”.
De este curso se conocen las bases, pero no los programas. En todo caso, es más propiamente educación cívica: busca hacer comprender los principios y fundamentos de la sociedad democrática y el bien común, la promoción y valoración de los derechos humanos y de conceptos como la ética política, etc. Integra conocimientos de las ciencias sociales (ciencia política, sociología, no históricos propiamente), filosofía, economía, geografía. Y si se pretende que los alumnos reflexionen a partir de presupuestos teóricos y su aplicación en la realidad chilena, sin conocer en profundidad su historia política, puede ser un paso en falso. Así, no parece cierto que —seriamente— esta nueva asignatura “se haga cargo” de los contenidos históricos que se enseñan actualmente en 3º y 4º medio.
Por otra parte, el Plan Común electivo contempla 2 horas para que los alumnos elijan entre 4 asignaturas; una es Historia, Geografía y Ciencias Sociales. En ella se pretende profundizar en conocimientos y habilidades sobre la historia reciente, mundial, latinoamericana y nacional. Las habilidades a desarrollar serían la investigación, el pensamiento crítico y la comunicación.
Idealmente, no obstante, los alumnos que se inscriban deberán tener conocimientos sólidos de historia de Chile asimilados previamente. Sospecho que será un porcentaje menor de estudiantes, y con conocimientos superficiales, de acuerdo a lo expuesto. Por último, queda el plan de formación diferenciado, que incluye un solo curso de historia, de 27 que tiene la oferta, con variadas temáticas: Comprensión histórica del presente.
En fin, la formación histórica debe estar en cursos obligatorios y ofrecerse a jóvenes con mayor madurez intelectual o de raciocinio. Tal como se diseñó el plan general, los logros esperados no se alcanzarán en los cursos electivos, además de ser para un grupo menor de alumnos.
Así, las generaciones que egresen con este plan serán portadoras de conocimientos superficiales sobre la historia y la de Chile en particular. La propuesta no asignó relevancia a formar jóvenes dotados de conciencia histórica, capaces de comprender la realidad vivida por los chilenos de ayer y de antes de ayer, con todos los avatares y el legado llegado hasta nosotros… La cultura histórica hace mejores ciudadanos.