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Cartas
Sábado 24 de noviembre de 2018
Ojalá no pasen por lo mismo
Señor Director:
El 8 de junio de este año un accidente en una intersección de Santiago cambió a mi familia. Ese día viernes, a eso de las 20:30 hrs., un mensaje de WhatsApp desde el teléfono de mi papá fue un golpe de realidad.
Como hijo mayor de un padre que murió en su medio de transporte favorito -la bicicleta- por andar correctamente en ciclovía, con casco certificado y más luces incluso que las recomendadas, me atrevo a cuestionar la eficiencia (¡y pertinente fiscalización!) que debería tener esta nueva legislación.
Dos asuntos que hay que profundizar:
Primero, una modalidad que no está siendo considerada: la ingente masa de repartidores de comida u otras como los monociclos eléctricos. Estos vehículos y sus respectivos usuarios parecen desentenderse de las mínimas recomendaciones de seguridad necesarias en su andar: no utilizan casco, pero sí audífonos en ambos oídos, incluso revisando y respondiendo notificaciones en el celular. Es impresionante ver cómo estos ciclos se mueven echando a la suerte de los conductores de automóviles sus vidas.
Segundo, una velocidad máxima respetada por todos, y no solamente por los automóviles. Nunca he visto multar a vehículos de transporte público: buses de Transantiago, taxis y colectivos, quienes parecen ser la excepción de la ley. Pocas veces un bus circula a menos de 70 kilómetros por hora, es un hecho.
Estoy seguro de las buenas intenciones de la Ley de Convivencia Vial. Estoy seguro de que es necesario un cambio en la legislación más acorde a los tiempos. Estoy seguro de que se evitarían accidentes con resultado de muerte si se usaran cascos y se prohibiera el uso de audífonos en la bicicleta. Estoy seguro de que los automovilistas tienen todas las de perder en (casi) todos los casos.
No soy un automovilista furioso: estoy seguro de que seguiré usando principalmente la bicicleta como medio de transporte. Estoy seguro de que mi papá perdió su vida haciendo lo que más le gustaba y más libre lo hacía: andar en bicicleta.
De lo que no estoy tan seguro es de si los esfuerzos gubernamentales van bien encaminados.
Me encantaría que muchas familias no tuvieran que pasar por lo que nosotros vivimos. Mi papá, el pasado jueves 22, habría cumplido 68 años.
Matías Infante Middleton